Estimados cofrades:
Me parece que hay que ser sinceros y asumir nuestra responsabilidad. Me da la impresión que estamos tratando de definir “infidelidad” para sentir que nos le hacemos daño a nuestra pareja, cuando en realidad tener relaciones sexuales (por la razón que sea) con una mujer diferente a nuestra pareja es ser infiel. Muchas veces recurrimos a las kinesiólogas porque nuestra pareja es recatada sexualmente, pero este comportamiento es responsabilidad nuestra también, porque seguimos estando con nuestra pareja.
¿Por qué seguimos con nuestra pareja si no nos satisface? Lo racional seria ir con ella a un terapista sexual para solucionar sus temores a expresarse libremente en la sexual. Pero no lo hacemos, por múltiples razones. Quizás pensamos que si le decimos a nuestra pareja para ir al terapista sexual se asustaría. Quizás pensamos que debemos de caer en el molde social de tener a una “lady” por pareja, aunque sexualmente nos vaya mal con ella. Lo real sería no estar con una pareja que no nos satisface sexualmente, pero no lo hacemos. Seguimos apelando a las kines para seguir nuestras relaciones de pareja, con todo lo que eso implica.
Como dice el cofrade Macbeth “¿se han puesto a pensar cual seria nuestra reaccion si nuestra flaca, novia o esposa tira con un puto solo por una necesidad sexual???? para nosotros seria una "infidelidad" por parte de ella???” Por supuesto que seria infidelidad para nosotros, pero creamos definiciones según el genero, es decir, nosotros si podemos ser infieles, pero las mujeres no, en la misma situación. Si nos enteráramos de eso, romperíamos con nuestra pareja, al toque, sin pensarlo mucho. Hay que ser responsable y asumir que si somos infieles o que no podemos ser monógamos. Asumamos que la vida sexual con nuestra pareja no es la deseada y por eso elegimos a las kines. Y actuemos coherentemente, ya sea buscando terapia sexual y si ésta no funciona, rompamos con nuestra pareja. En todo caso, no actuemos para la “sociedad”, es decir, no busquemos una “lady” de pareja, sino una mujer sexualmente experimentada (que no sea kine o prostituta). Me dirán que existen los “hijos” y los “compromisos familiares” como excusa para mantener a las parejas, pero no caigamos en ese juego. No caigamos en el juego de la “sociedad”. Enfrentemos la situación y actuemos en consecuencia. No busquemos excusas o creemos definiciones para justificar un comportamiento que sí le hace daño a nuestra relación de pareja, independientemente que no sepa que vemos a kines. Es mi opinión.
Saludos
Pablo Castel