En realidad ya tengo publicado las historias de esos ampay en otra parte del foro, pero a su pedido corfrade lo voy a transcribir:
LA PRIMERA
La pregunta del tema me trae recuerdos inolvidables y que compartiré en este Post.
Sucedió en una ciudad de Selva Central donde trabajaba temporalmente. Como buen kinero siempre buscaba el material de la zona y le daba curso. Así estuve probando el material en bares y night clubs.
Justo cuando ya terminaba mi trabajo y debía dejar la ciudad, conocí a esta chibola de nombre “LORENA” en un local ya desaparecido “MONTECARLO”. Me gustó altoke por su belleza, juventud y frescura.
La saqué del night club esa noche y ya no quería dejar la ciudad ni el trabajo. Pero luego pensé que se me pasaría y salí por última vez, pasamos la noche y todo el día juntos y nos despedimos.
Pasó un par de meses y no se me salía de la cabeza. Así que volvía buscarla y no la encontré. Me dijeron que había dejado el negocio y que trabajaba en una Juguería. Grande fue mi sorpresa al verla en un trabajo sencillo, me dijo que estaba cansada de ese negocio…igual tuve que dejarla con la idea de volver. Al siguiente mes moví mis contactos y conseguí otro contrato de trabajo, alquilé un mini departamento y me mudé con ella.
Fueron los mejores meses de mi vida sexual, la agarraba a la chibola a cualquier hora en distintas poses y lugares, disfrutábamos de una bonita relación. Yo era su maestro y era ella una alumna aplicada.
Sin embargo cometí un error, teníamos los mismos amigos relacionados al ambiente kinero, cuando salíamos siempre terminábamos tomando con las chicas del local o nos íbamos a la Discoteca con ellas; además la chibola cuando tomaba se rayaba como niña malcriada y eso me llegaba y terminábamos peleando. Todo eso fue deteriorando la relación hasta que se terminó el contrato de trabajo.
Entonces, lo pensé bien y decidí apartarme de ella, regresar con mi esposa (estaba casado) y continuar con mi vida. ¿Qué pasó con ella? Volvió a trabajar al Night Club y al poco tiempo se metió con un “paño de lágrimas” quien le sacó del local. Actualmente tiene su familia con él.
Realmente hay un montón de detalles que uno vive con una Kine que faltaría espacio para contar, pero ahora la recuerdo como una bonita experiencia de haberme enamorado alguna vez de una Kine.
LA SEGUNDA:
El peor roche es cuando tu pareja te encuentra con tu Kine, y eso me paso hace algunos años.
En esa época me hice caserito de una Kine llamada ROCIO, una huanuqueña bonita, chibola, blanquita, un poco seria, pero en la cama se transformaba en una loba.
La llevé una vez al Hotel, pero las demás veces la llevaba a mi cubil, que era mi negocio y donde me quedaba a dormir cuando no podía quedarse el guardián. Allí ponía mi colchón y a matar. Todo ese año me la pasé follando con esta chibola como 5-6 veces.
La última vez sucedió el roche. Llegué al loca un night club de La Merced, la saqué como de costumbre y la llevé al cubil. Empezamos con el paleteo y caleteo, cuando de pronto tocan a la puerta mi pareja y su hermana. Como el local era cerrado sin ventana o puertas laterales, me di cuenta que perdí…... Caballero nos vestimos como pudimos y abrí la puerta; entraron mi pareja y su hermana sorprendidas y molestas. Tuve que asumir toda la responsabilidad pero no pude evitar que la jalonearon y maltrataran a la chibola. Finamente la dejaron ir y me quedé encerrado en mi local hasta el día siguiente.
¿Que había pasado? Que mi celular viejito que tenía se había activado y sin querer la había llamado a mi pareja seguro por ser última llamada. Ella pensó que me habían secuestrado o estaban robando mi local, por lo cual fueron a ver qué pasaba… allí nos encontraron. Como consecuencia de esto la chibola ROCIO fugo ese mismo día, nunca más la volví a ver, solo recordar los buenos polvos que me metí con esta kinesiologa.
Finalmente, tuve que pedir perdón y me costó tres años de abstinencia de kines, para volver a ganar la confianza de mi pareja. También ahora soy más cuidadoso en hacer mis perrerías, como dice el dicho: “has las cosas bien… o no la hagas”. Y por supuesto....cambié de celular!!! Je, je, je.