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MASTER MEMBER
Si bien es una entrada en el campo de lo hipotético, me pregunto si Gastón Acuario hubiera declarado lo mismo si hubiese iniciado su actividad empresarial a fines de los ochenta o comienzos de los noventa. De hecho hacer empresa en el Perú es más fácil pues la legislación laboral y la situación económica de hace veinte años hacia imposible todo intento de progreso. Recuérdese que la gente no salía a la calle y la capacidad de consumo mínima. En esos zapatos Gastón habría deseado que llegara al poder un gobierno capaz de contener la inflación y vencer al terrorismo. Tómese este punto no como una crítica sino como un hecho fácil de constatar haciendo memoria propia.
Por otra parte, tampoco creo que hubiera puesto un pie en Ventanilla, ni siquiera para ir a un huarique escondido. Como muchas zonas de la ciudad, Ventanilla estaba off - limits de mucha gente por razones de seguridad. Además era una zona poco poblada con residentes casi forzados, traslados desde Villa El Salvador luego de una desgracia que no recuerdo.
Atreviéndome a una interpretación de sus palabras, yo creo que lo que quiso decir es que en una obligación moral ayudar al prójimo, más aún disponiendo los medios económicos que legítimamente se ha ganado con su trabajo (algo imposible aquí en los 80s). Moral y política están vinculados, pero no se puede decir que ser de izquierda sea una obligación moral. El bien se hace sin mirar el color político del prójimo. Recuerden la obra social de Violeta Correa de Belaunde. Ella fue quien inició los comedores populares en el segundo gobierno del presidente Belaunde. Idem el caso de Pilar Nores tanto en el primer como en el presente gobierno aprista.
Por otra parte, tampoco creo que hubiera puesto un pie en Ventanilla, ni siquiera para ir a un huarique escondido. Como muchas zonas de la ciudad, Ventanilla estaba off - limits de mucha gente por razones de seguridad. Además era una zona poco poblada con residentes casi forzados, traslados desde Villa El Salvador luego de una desgracia que no recuerdo.
Atreviéndome a una interpretación de sus palabras, yo creo que lo que quiso decir es que en una obligación moral ayudar al prójimo, más aún disponiendo los medios económicos que legítimamente se ha ganado con su trabajo (algo imposible aquí en los 80s). Moral y política están vinculados, pero no se puede decir que ser de izquierda sea una obligación moral. El bien se hace sin mirar el color político del prójimo. Recuerden la obra social de Violeta Correa de Belaunde. Ella fue quien inició los comedores populares en el segundo gobierno del presidente Belaunde. Idem el caso de Pilar Nores tanto en el primer como en el presente gobierno aprista.