Segundo encuentro
Cómo comenté en mi primer relato, ella se comprometió a invitarme a comer a su casa, ya que quería que pruebe su sazón. Aquí un paréntesis para analizar el porque se comprometió a ello y como quería quedar bien con su sazón, espero sus sabios y acertados comentarios.
Llegué a su humilde hogar, para ello lleve un vinito que ya habíamos coordinado para brindar después del almuerzo. Luego del almuerzo, llegó su hija de 19 años, que tal mujerón cofras, una nena que está en su punto, muy linda. Claro que la saludé con mucho respeto, pero por dentro me decía tengo que seguir visitando a la mamá que tampoco está mal, pero por obvias razones la hija le saca ventaja.
Ella y yo estuvimos conversando de varios temas, mientras la hija almorzaba. Nosotros disfrutábamos del vinito y la hija le dijo a su mamá, guárdame una copita. Entonces le dije, recién empezamos, no te preocupes. Ella esbozo una sonrisa.
Luego la hija se unió a nuestra conversación, ella trabaja y estudia una carrera técnica. También contaba lo suficiente de mí, y llegó la hora de la despedida.
La mamá me acompañó al paradero, me dió un abrazo y agradeció la visita. La elogié de su sazón y me dijo cuando gustes me avisas y te vienes a comer. Y me dió un dato interesante "mi hija trabaja todas las mañanas y estoy sola en casa". Ah bueno, entonces puedo venir temprano y me dijo, si.
Antes de subir al bus me da un beso cerca de los labios y nos despedimos.