Le hablaba cosas bonitas al oído y apenas rozaba sus brazos y de cuando en cuando le acariciaba el rostro, intentaba controlar mis manos cada vez que se daba vuelta y me provocaba con ese trasero espectacular. Poco a poco con más confianza empecé a susurrarle al oído ¡cuanto me gustaba! y que lamentaba no haberla conocido antes... ella se dejaba llevar, prolongaba el momento de besarla, sabía que ella también lo deseaba, pero yo tenía planeado que fuera así (estaba tan canchero, no me reconozco yo mismo a veces), hasta que delicadamente besé sus comisuras labiales, su nariz, sus ojos, puse mis manos en su zona occipital y asiéndome de sus cabellos la atraje hacia mí y le estampé un beso lo más delicado y tierno posible, no era cualquier mujer, era una princesa que me cayó del cielo, era quizá la madre de mis hijos, era Fiorelita la mujer preciosa que conocí 4 horas antes en un bus....
Ella correspondió como lo imaginé, mostraba ansias de comerme los labios, pero yo la llevaba a mi ritmo... luego ese juego de lenguas se aceleró y nos llevó a succionarnos mutuamente con tal pasión, como si pudiéramos llegar al éxtasis en ese beso. Ella tenia el cuerpo pegado al mio, crecia en mi una erección que ya no podia contener, traté de delicadamente hacerle ver la situación que estaba provocando en mi con ese beso.
Seguimos ahi bailando, o mejor dicho besándonos y moviendo nuestros cuerpos sin distinguir bien que ritmo habia alrededor...hasta que volví a la realidad y me senti un poco en ridículo, asi que le dije para invitarle unos tragos en la mesa. El grupo estaba con su wiskhy y nos estaban esperando dos vasos. "Hidrátense" nos bromeó uno de ellos.
La verdad soy mas de chelas y vinito, pero bueno acompañé con el wiskhy, y complací a mi princesa que pidió un trago algo exótico, provocativamente me dijo
"quiero un orgasmo múltiple".. Si en ese momento se me salia el barrio le decia
"yo me encargo de eso mas tarde", pero fui prudente, y le dije
"cuidado con los que pides"...
, ella solo atinó a reir mostrando un tenue rubor en su rostro, porque todos gritaron al unísono "provecho ganador".
Estuvimos buen rato ahi, y cerca de las 3am regresamos al depa, solo quedamos Fio, Brenda, su novio y yo. La parejita anfitriona sirvió unos tragos y como estaban picados se vacilaban de lo lindo, solapadamente se fueron a su cuarto mientras nos decian "estas en tu casa..."
Me acerqué a mi musa, empecé a soplarle en el oido y chupar sus lóbulos, ella comenzaba a jadear muy sutilmente, se veia que estaba caliente, con mayor propiedad la empecé a besar hasta que me detuvo,
"tu cres que sea correcto, no se nada de ti, y yo tengo novio",-"Pues si me prometes que mañana acabas con él, no me molesto en llevarte a conocer mi casa, mi familia y todo sobre mi vida..."
Me hizo ese gesto tan lindo de aceptaciòn y me besó. Le pedí que se levantara y se sentara en mis piernas, ella muy recatadamente se sentó de costado, no era lo que yo queria, pero vi que ya tenia algo de confianza. Segui besándola, bajando por su cuello, ella poco a poco apoyaba su pecho y su pelvis en mi, al mismo tiempo que giraba sus piernas (yo le ayudaba a acomodar su falda) hasta quedar perfectamente encajados su introito vaginal y mi pene recontra erecto.
Se quedó ahi por unos segundos paralizada, sólo la besaba, hasta que ella misma comenzó a moverse, subia y bajaba a lo largo de mi pene erecto, comenzaba a morderme los labios para contener su jadeo. Traté de acomodar mi pene un poco mas recto para poder sentir a través de mi jean y su truza como se frotaban nuestros sexos...
Era muy excitante verla disfrutar, cogí sus piernas, sus caderas y la pegué todo lo que pude a mi... ella comenzó a hacer movimientos mas rápidos y rítmicos, su jadeo se hacia mas evidente, hasta que ví como llegó al clímax en menos de 5 minutos de frote y sentí la cálida humedad de su sexo, se abrazó a mi intensamente mientras su cuerpo se seguia contrayendo...
Fue espectacular, ya lo habia hecho antes, pero nunca estuve tan cerca de llegar como aquella vez... mi musa llegó al clímax, se quedó abrazada a mi, no dejaba de besar mi frente como agradeciéndome ese momento, luego se levantó algo avergonzada y se fue corriendo al baño.
Yo estaba muy excitado, el alcohol normalmente me complica llegar al clímax, seguia caliente, estaba feliz de haber compartido ese momento con esta musa... Saqué mi pene que estaba un poco hinchado por el frote y me comencé a masturbar recordando lo que habia pasado, además que en el cuarto se escuchaban los gritos de Brenda. Estaba en plena jalada de tripa con los ojos cerrados y la cabeza recostada, cuando sentí la delicada mano de Fiorella en mi pene mientras decia:
"te ayudo mi amor", comenzó a masajearlo con destreza, se lo metió a la boca y le hacia tal succión al glande haciendo golpear mi pene contra los lados de su boca pequeña, que me hizo llegar rápidamente, ella se apartó y vio como los chorros de semen se esparcian sobre su mano, ella miraba extasiada como se contraia mi pene, yo estaba en el cielo...