Buenas noches a todos estimados, resulta que hace pocos días, tuve la oportunidad de ayudar
a una dulce chica de Huánuco, resulta que en el hospital en el que trabajo, llega una Srta. de aproximadamente 21 años, ojos claros; 1.62 de estatura, piel clara algo bronceada y con pecas en los hombros, delgada con una busto de 34c aproximadamente, y un bonito derriere resguardado por un leggins estampado jean, que hacía ver una retaguardia de aproximadamente 100-105cm.
El contexto fue el siguiente, ella desesperada debido a que no encontraba el DNI de su familiar enfermo y no la dejaban entrar, solo atiné a decirle al encargado de seguridad lo siguiente:
I: Es mi prima, por fa paisa, déjala pasar.
S: Ok maestro-me hace un guiño con gesto complicidad- Dejen pasar a la prima del jefe.
Ella solo dice gracias con una sonrisa, que contenía dos hileras perladas y brillantes.
Mientras movía la silla de ruedas con su familiar, un anciano de 76 años, con antecedentes X y que precisaba atención urgente, pues logré notar un hilo dental, que hacía resaltar su hermoso culito.
Luego de un rato tocan a mi oficina, que habían dejado mal un consultorio y que se requería de mi presencia, me apersono y resulta que la encuentro nuevamente y su familiar sucio de sangre, orina y demás. Se apreciaba un charco de vómito oscuro. El señor se denotaba pálido y solo atiné a mandar al diablo la limpieza y como me conocen las enfermeras solo dije:
I: por fa licen` puede pasarle suero está pálido y el corazón le late fuerte
L: ¿ Y el doctor?
Tanto ella y yo encogimos hombros, lo pasamos a observación.
Luego de ese evento, decidí ir al consultorio y hacer mi trabajo. Luego de 30 minutos, ella se acerca y me dice
-Hola, gracias por todo, ya se queda mi madre y hermano, yo me voy retirando, por cierto me llamo Dalia.
-Un gusto Dalia, solo cumplía con mi trabajo. Mi nombre es Icelos.
D: Bueno Icelos, un gusto conocerte, espero si se presenta algún problema poder contar con tu ayuda, ya que lamentablemente el DNI de mi papá está deteriorado.
I: No hay problema Dalia, te veo un poco pálida ¿Sucede algo?
D: Es que no he comido, soy un poco eticosa, mi familia ya comió, pero yo no, tengo miedo me caiga mal, tú entiendes, cierto?
I: Pues mira, por acá hay sitios donde podrías comer, con seguridad si gustas te llevo, total es mi hora de almuerzo.
D: Ok, claro me gustaría comer segura.
I: Ok vamos.
Vamos caminando y la verdad que era una delicia verla caminar y conversar, me era difícil no verle el escote, me imaginé que era sonrosada ella toda, en mi mente ya mis manos la habían tomado y mi líbido crecía. Total era una bella mujer.
I: Listo llegamos, aquí podrás comer tranquila, sin riesgos, te dejo, siempre como solo y no deseo incomodarte.
D: No pues, no te pases negro... Ejem Icelos, quise decir.
I: No hay problema, estoy acostumbrado y me gusta que me digan negro.
D: Acompáñame a comer pues.
I: Ok, está bien, si no incomodo.
..........................................................................................................................................................................
Ella me contaba sobre sus cosas, decepciones sobre el tratamiento de su padre, un novio que le fue infiel y que por ahora ella era "un alma libre", me preguntó que como era posible que un tipo de 40... tantos siglos, estuviese solo y sin hijos y que no la floree, ya que lo habían intentado... Le gustaban canosos y me miraba.
Yo mantuve la calma y le dije:
I: Yo nací para trabajar, comer, beber y.... Tú sabes el resto.
D: Jajajajajajaja, eres un alma libre entonces? Me comprendes por que no quiero nada serio, negro.
I: Pues sí... (Yo algo impaciente pues mi hora de almorzar estaba culminando)
D: ENTIENDO, que debes regresar a tu trabajo.... Vamos para que me dejen entrar contigo y luego ya vas a tu trabajo.
I: Ok Dalia no hay problema...
Y antes de despedirnos me da en un papel su número de celular y me deja un beso muy cerca a la comisura de los labios....
D: Chau, llámame, me quedaré una semana acá y luego me regreso a Huánuco.
I:Ok, te contacto (con una cara de poker face única)
Continuará
a una dulce chica de Huánuco, resulta que en el hospital en el que trabajo, llega una Srta. de aproximadamente 21 años, ojos claros; 1.62 de estatura, piel clara algo bronceada y con pecas en los hombros, delgada con una busto de 34c aproximadamente, y un bonito derriere resguardado por un leggins estampado jean, que hacía ver una retaguardia de aproximadamente 100-105cm.
El contexto fue el siguiente, ella desesperada debido a que no encontraba el DNI de su familiar enfermo y no la dejaban entrar, solo atiné a decirle al encargado de seguridad lo siguiente:
I: Es mi prima, por fa paisa, déjala pasar.
S: Ok maestro-me hace un guiño con gesto complicidad- Dejen pasar a la prima del jefe.
Ella solo dice gracias con una sonrisa, que contenía dos hileras perladas y brillantes.
Mientras movía la silla de ruedas con su familiar, un anciano de 76 años, con antecedentes X y que precisaba atención urgente, pues logré notar un hilo dental, que hacía resaltar su hermoso culito.
Luego de un rato tocan a mi oficina, que habían dejado mal un consultorio y que se requería de mi presencia, me apersono y resulta que la encuentro nuevamente y su familiar sucio de sangre, orina y demás. Se apreciaba un charco de vómito oscuro. El señor se denotaba pálido y solo atiné a mandar al diablo la limpieza y como me conocen las enfermeras solo dije:
I: por fa licen` puede pasarle suero está pálido y el corazón le late fuerte
L: ¿ Y el doctor?
Tanto ella y yo encogimos hombros, lo pasamos a observación.
Luego de ese evento, decidí ir al consultorio y hacer mi trabajo. Luego de 30 minutos, ella se acerca y me dice
-Hola, gracias por todo, ya se queda mi madre y hermano, yo me voy retirando, por cierto me llamo Dalia.
-Un gusto Dalia, solo cumplía con mi trabajo. Mi nombre es Icelos.
D: Bueno Icelos, un gusto conocerte, espero si se presenta algún problema poder contar con tu ayuda, ya que lamentablemente el DNI de mi papá está deteriorado.
I: No hay problema Dalia, te veo un poco pálida ¿Sucede algo?
D: Es que no he comido, soy un poco eticosa, mi familia ya comió, pero yo no, tengo miedo me caiga mal, tú entiendes, cierto?
I: Pues mira, por acá hay sitios donde podrías comer, con seguridad si gustas te llevo, total es mi hora de almuerzo.
D: Ok, claro me gustaría comer segura.
I: Ok vamos.
Vamos caminando y la verdad que era una delicia verla caminar y conversar, me era difícil no verle el escote, me imaginé que era sonrosada ella toda, en mi mente ya mis manos la habían tomado y mi líbido crecía. Total era una bella mujer.
I: Listo llegamos, aquí podrás comer tranquila, sin riesgos, te dejo, siempre como solo y no deseo incomodarte.
D: No pues, no te pases negro... Ejem Icelos, quise decir.
I: No hay problema, estoy acostumbrado y me gusta que me digan negro.
D: Acompáñame a comer pues.
I: Ok, está bien, si no incomodo.
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Ella me contaba sobre sus cosas, decepciones sobre el tratamiento de su padre, un novio que le fue infiel y que por ahora ella era "un alma libre", me preguntó que como era posible que un tipo de 40... tantos siglos, estuviese solo y sin hijos y que no la floree, ya que lo habían intentado... Le gustaban canosos y me miraba.
Yo mantuve la calma y le dije:
I: Yo nací para trabajar, comer, beber y.... Tú sabes el resto.
D: Jajajajajajaja, eres un alma libre entonces? Me comprendes por que no quiero nada serio, negro.
I: Pues sí... (Yo algo impaciente pues mi hora de almorzar estaba culminando)
D: ENTIENDO, que debes regresar a tu trabajo.... Vamos para que me dejen entrar contigo y luego ya vas a tu trabajo.
I: Ok Dalia no hay problema...
Y antes de despedirnos me da en un papel su número de celular y me deja un beso muy cerca a la comisura de los labios....
D: Chau, llámame, me quedaré una semana acá y luego me regreso a Huánuco.
I:Ok, te contacto (con una cara de poker face única)
Continuará
