Eduardo Zamora
Recluta
Conozco a Martina desde la secundaria, para hacer más exacto nos conocimos en el último año, siempre fue simpática, cabello medio ondulado y fuertecita, no era delgada pero tampoco llenita, tenía sus formas pero entrada en carnes a pesar de ser chibola, desde siempre le gusté (no soy un Ken pero había algo en mí que siempre le atrajo). Nunca le hice caso porque estabas detrás de una bandida que me volvía loco pero que era una terrible, muchos muchos años después, luego de haber perdido totalmente contacto recibo una llamada perdida por wsp, inocentemente pregunté
Yo: Hola? Tú eres? Tengo una llamada perdida
Martina: Hola Eduardo, q ya no te acuerdas de mí? Seguramente borraste mi número, soy Martina
Yo: Holaaa Martina, a los años, sí, cambié de cel y se borraron varios números, q ha sido de tu vida?
A lo q ella empezó a contarme sobre su vida y cómo pocos años después del cole estaba ya conviviendo con un tombo q le quería dar vuelta desde q estaba en el cole ella, y al parecer ya había logrado su objetivo, había pasado un tiempo viviendo en Puerto Maldonado porque al patita lo habían destacado para allá, y q por amor lo había seguido pero q ahora ya había vuelto para sacar sus papeles de la universidad, como nunca me interesó pues ya no seguí con la conversación y solo la tenía la conversación como para no aburrirme, hasta q por cosas de la vida me comentó su triste historia, su tombo llegaba tiempo engañándola con una flaca de por allá y que aparte de eso había habido un tremendo chongo por puerto Maldonado, ustedes saben pueblo chico infierno grande y que por eso tuve q venirse a Lima huyendo de esa realidad. Siempre veía sus estados q estaba toneando con amigos y así y siempre me escribía, empezó mostrándome fotos suyas con ropa como preguntándome q tal le quedaba tal prenda y luego iba tomándose fotos enseñándome cada vez más, hasta q un día en tragos le dije “ya mucha ropa en tus fotos, mándame una en la que estés peladita” y sin poner peros me mandó una, debo decir q se mantiene ni tan llenita ni tal delgadita, como dije al inicio, es llenita con forma, tenía unas tremendas tetazas que siempre me llamaron la atención y es bonita de rostro, tiene ese cabello medio endulafo que me excita cuando se lacea, se lo he dicho “es como si tuvieras dos mujeres, una ondulada y otra lacia” los chats empezaron a hacerse más continuos hasta q quedamos en tomarnos un vinito un viernes yo después de un peloteo
Yo: Hola? Tú eres? Tengo una llamada perdida
Martina: Hola Eduardo, q ya no te acuerdas de mí? Seguramente borraste mi número, soy Martina
Yo: Holaaa Martina, a los años, sí, cambié de cel y se borraron varios números, q ha sido de tu vida?
A lo q ella empezó a contarme sobre su vida y cómo pocos años después del cole estaba ya conviviendo con un tombo q le quería dar vuelta desde q estaba en el cole ella, y al parecer ya había logrado su objetivo, había pasado un tiempo viviendo en Puerto Maldonado porque al patita lo habían destacado para allá, y q por amor lo había seguido pero q ahora ya había vuelto para sacar sus papeles de la universidad, como nunca me interesó pues ya no seguí con la conversación y solo la tenía la conversación como para no aburrirme, hasta q por cosas de la vida me comentó su triste historia, su tombo llegaba tiempo engañándola con una flaca de por allá y que aparte de eso había habido un tremendo chongo por puerto Maldonado, ustedes saben pueblo chico infierno grande y que por eso tuve q venirse a Lima huyendo de esa realidad. Siempre veía sus estados q estaba toneando con amigos y así y siempre me escribía, empezó mostrándome fotos suyas con ropa como preguntándome q tal le quedaba tal prenda y luego iba tomándose fotos enseñándome cada vez más, hasta q un día en tragos le dije “ya mucha ropa en tus fotos, mándame una en la que estés peladita” y sin poner peros me mandó una, debo decir q se mantiene ni tan llenita ni tal delgadita, como dije al inicio, es llenita con forma, tenía unas tremendas tetazas que siempre me llamaron la atención y es bonita de rostro, tiene ese cabello medio endulafo que me excita cuando se lacea, se lo he dicho “es como si tuvieras dos mujeres, una ondulada y otra lacia” los chats empezaron a hacerse más continuos hasta q quedamos en tomarnos un vinito un viernes yo después de un peloteo