Lean esta entrevista de El Comercio al chileno Manuel Urrutia (Gerente General de Frecuencia Latina), y coincidiran conmigo en que Frecuencia Latina ya fue.
¿Qué criterios pesaron para que Butters quedara fuera?
El canal pasó de tener una hora de información al día a tener casi cinco, por tanto, los requerimientos del departamento de noticias crecieron. Phillip es un gran periodista, pero no se amoldaba al nuevo perfil noticioso que se buscaba. Gustavo Barnechea va con nuestros requerimientos.
¿Ya ha decidido si “Trampolín latino” continuará en el 2010?
En junio [del 2009] tuve una primera reunión con
Carlos Álvarez y le dije que después de mirar los números de audiencia, financieros, comerciales y costos, “Trampolín latino” podía no seguir en el canal. Esa misma conversación la volvimos a tener hasta fin de año. No es una sorpresa para el señor Álvarez que “Trampolín…” no vaya a continuar. El proyecto no es viable. El canal ha sido generoso al darle esta posibilidad. Se hizo porque había un sentido social detrás de esto, pero ya cumplió una etapa.
¿Cómo toma que algunas figuras, tras reunirse con usted, digan que tendrán una conversación final con el dueño de la televisora?
La última palabra en este canal sobre lo que se programa o no y los proyectos que se hacen o no la tengo yo. Yo le dije a Álvarez que el proyecto se acababa el 31 de diciembre; si él quiere puede hablar con el Papa, pero el programa no va más. Así como el señor Butters conversó con todo el mundo, igual el contrato llegó a su fin. No es un tema de poder, sino de encargo. Si el dueño va a tomar la decisión final, ¿entonces para qué me contrató?
¿Cuál es la versión oficial sobre la supuesta renuncia de su gerente comercial, Javier Carmona?
Eso no solo es ridículo, sino que es falso. No sé quién es el que filtra esta información ni por qué lo hace. Carmona ni ha renunciado al canal ni ha enviado una carta de renuncia ni —que yo sepa— está en sus planes renunciar. Hay alguien interesado en tejer el mito de que acá nos llevamos pésimo y no es así. Hago un mea culpa. No soy la persona más fácil, probablemente. Pero, bueno, este no es un negocio fácil.
Se habla de una supuesta enemistad entre su esposa, Janine Leal, y la pareja de Carmona, Tula Rodríguez…
Sobre eso no tengo nada que decir. Nunca he hablado de mi vida privada, ni de mi esposa. No lo hago y no lo haré.
¿Cuál es su apuesta televisiva para este año?
En febrero iremos con producción nacional de 5:50 a.m. a 2:30 p.m. y de 9 p.m. a la medianoche. Este año, de seguro el canal va a tener proyectos de programas de cara a las elecciones [municipales], lo estamos conversando, aún no hemos decidido quiénes los conducirán. Se ha hablado mucho de “frecuencia chilena”, pero debo aclarar que yo hago televisión para peruanos. Frecuencia Latina es peruana hasta la médula. Somos el canal del vóley, y no hay nada más peruano que eso.
Que se ha creido este imbecil?
Juan Camaney