Así es cofrade, no desmontó casi nada del Velascato e introdujo algunas medidas izquierdistas cuyas consecuencias las hemos estamos pagando hasta este Domingo último (F-O-N-A-V-I)...
Creo que te voy a tener que matricular en un curso intensivo de Historia, mi estimado amigo...
Permiteme, mi estimado cofrade, refrescarte un tanto la memoria.
¿Te recuerda algo el nombre “Operación Condor”?
No, no es cierto?..hasta acá te escuche.
La Operación Condor fue una estrategia de nivel internacional, utilizada por los gobiernos militares de la década de los 70 a fin de desaparecer, con el apoyo, auspicio y encubrimiento de los cuadros de derecha más siniestros del continente, a líderes de otras tendencia que estorbaban sus planes de adueñamiento del espectro político de esta parte del mundo.
Fue así como asesinaron en Washington al chileno Orlando Letelier, ex canciller del gobierno de Allende, y en Buenos Aires al general Carlos Prat, antecesor de Pinochet, asesinatos por los cuales fue acusado y procesado el ex jefe de la siniestra DINA chilena Manuel Contreras. O como se dieron los miles de asesinatos ocurridos durante la dictadura de Stroessner en Paraguay y que constan en los Archivos del Horror de Paraguay (algo así como nuestro, satanizado por la derecha, Museo de la Memoria). O como se dio el famoso caso de los Zaffaroni, pareja incomoda para la dictadura de Videla y que fueron secuestrados y desaparecidos en Uruguay y cuya hija años después fue encontrada en poder de una secretaria del servicio de inteligencia argentino. O como cuando agentes de inteligencia uruguayos secuestraron en Brasil a una pareja de opositores de la dictadura charrúa conocido en los anales de la historia negra de Brasil como “O sequestro dos uruguaios” y que fracasara y quedara en escandalosa evidencia por la oportuna intervención de periodistas brasileros amigos de la pareja. O el asesinato del ex presidente boliviano Juan Jose Torres en argentina durante la dictadura boliche de Hugo Banzer. Casos como esos son muchísimos y faltarían paginas del foro para hablar de ellos. Por ejemplo el caso conocidísimo a nivel internacional del dirigente del MIR chileno Edgardo Enriquez desaparecido en Argentina…. etc, etc, etc.
Te preguntaras ¿y esto que tiene que ver? Pues si tiene que ver mi estimado CaballeroDeLaClaseOciosa, aunque tu memoria sea tan oportuna para traicionarte. Tiene que ver porque la dictadura de Morales Bermudez también jugó un rol activo en esa Operación Condor. Allí está el rapto del exiliado argentino Carlos Maguid, quien a pesar de estar alejado de toda actividad partidaria fue apresado por el SIE del ejército y entregado a un comando militar argentino en el Grupo 8 y posteriormente desaparecido en el trayecto del viaje a Argentina. Nunca se volvió a saber de él. Allí está el caso tal vez más emblemático de la participación de la dictadura peruana en ese malhadado programa continental: el de los ciudadanos argentinos María Inés Raverta, Julio César Ramírez y Noemí Giannotti de Molfino, por agentes de inteligencia gauchos. Los dos primeros, como era de esperarse, desaparecieron para siempre, mientras que la señora Gianotti de Molfino fue llevada a España donde fue asesinada. Años después, un agente revelaría en entrevista pública que todo fue planeado por el jefe de nuestra SIE como una necesidad de colaborar con la red de asesinos uniformados de Argentina.
Y a todo esto…quienes fueron los más fervorosos y entusiastas con todos estos casos de desapariciones forzadas y asesinatos…? Pues…la derecha y sus más eximios representantes, quienes por otra parte, saltaron hasta el techo, se jalaron las trenzas y lanzaron amenazas y maldiciones cuando se involucró a Morales Bermudez y a su tristemente celebre ministro del Interior "el gaucho" Cisneros Vizquerra en dichos casos.
Por ello, leerte ahora acercar a niveles cuasi filiales al felón Morales Bermudez con su antecesor Velasco Alvarado (quien tampoco es santo de mi devoción), me resulta poco menos que amnésico de tu parte.
Esa derecha que aplaudió a los más horrendos asesinatos llevados a cabo en el continente y que brindo con dictadores y sicopatas es tan digna de repudio como la izquierda cavernaria que aun cree en que el poder se toma por las armas. Ningún extremo es bienvenido para un país que se dice esperanzado en un futuro mejor. Estoy seguro que no es a esa derecha a la que tu tanto elevas plegarias mi estimado Caballero, así como no lo hago yo con la izquierda retrograda y cavernícola.
Pero las cosas si se recuerdan…hay que recordarlas bien pues.
Chaufa.