García impuso su capricho
El llamado Cristo del Pacífico, una réplica de la efigie del Corcovado de Río de Janeiro, se terminó de instalar ayer por capricho del presidente
Alan García, mientras el historiador Nelson Manrique, quien integró una comisión de personalidades que vio la intangibilidad de la zona por encargo del Instituto Nacional de Cultura en 1995, afirmó que el mandatario ha incurrido en un despropósito y no puede disponer espacios públicos como quiere.
Un presidente de la República no puede disponer del espacio publico de esta manera, como quiere, sostuvo al tiempo de señalar que el mandatario tiene que consultar con el pueblo antes hacerlo y no pretender justificarse con eso de que quería darle a
Lima una sorpresa.
Manrique señaló que es un despropósito que se haya instalado el Cristo en el Morro Solar porque la comisión que él integró resolvió que todo el lugar histórico, toda su formación geológica, es absolutamente intangible, en
memoria a los héroes que allí pelearon contra la invasión
Chilena y que en el lugar no pueden haber monumentos que nada tienen que ver con rendir homenaje a los hombres que dieron la vida por el país.
El Ministerio de Cultura pretendió a su vez justificar lo que muchos consideran un capricho presidencial alegando que es un homenaje a los caídos que combatieron en el Morro Solar, algo que no mencionó el presidente al anunciar su inconsulta decisión, financiada por la empresa constructora brasileña Odebrecht y otras compañías privadas, más un aporte de 100 mil soles de García que según versión oficial correspondería al 10 por ciento de sus sueldos de cinco años de presidente.
Recordó que en la lucha del Instituto Nacional de Cultura por el Morro contra la empresa constructora Gremco, que pretendía edificar un conjunto habitacional en ese lugar, el presidente García estuvo a favor del ente estatal e inclusive el 2008 presentó un proyecto de ley para declarar intangible el lugar histórico.
Manrique dijo además que existen irregularidades en los trámites para colocar el monumento en el Morro, por lo cual pidió investigación. No se consultó a los arquitectos y el ministro de Cultura Juan Ossio dio su autorización sin haber visto ni una foto del Cristo, aseveró.
Mientras tanto, en las redes sociales numerosos ciudadanos han expresado su indignación y han llamado a movilizarse contra la instalación de la mole de 37 metros de alto, prevista para mañana viernes.
La instalación del monumento fue anunciada el viernes último, lo que generó críticas de diversos sectores y, sin embargo, está listo ya para su inauguración este 29 de junio.
La premier Rosario Fernández aseguró que la obra tiene autorización de la Municipalidad de
Chorrillos, cuyo alcalde Augusto Miyashiro había sido condecorado por el gobierno.
Por su parte, la alcaldesa de
Lima,
Susana Villarán, señaló que no fue consultada ni informada. La bahía tiene un paisaje que se malogra con una estatua de 37 metros que se pone de la noche a la mañana sin consultar a nadie, reiteró la alcaldesa.
Reacciones
Según la historiadora Mariana Mould de Pease, la decisión unilateral del presidente García es gravísima porque ignoró la legislación y los protocolos existentes de protección del medioambiente y de una zona con una identidad definida.
El historiador Antonio Zapata comentó que lo ideal habría sido convocar a un concurso público lo que no se hizo porque, según el ministro de Cultura, se trata de un regalo de una empresa brasileña y del mismo presidente
Alan García.
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, y a pesar de ello luego los impuestos pagarán su mantenimiento. Lo q importa es q ese proyecto no es ético.
