Comparto un fragmento que leí en un documento de la Universidad de Guadalajara, cuestionable en algunas cosas, pero ahí les va por si en algo ayuda:
Es por medio de los sentidos por donde entra el amor: “La cuestión del enamoramiento no es más que un procesamiento químico de señales que vienen del exterior”, pero el amor no entra de igual manera por cualquiera de los sentidos, y no todos tienen la misma importancia. y no todos tienen la misma importancia.
Según la maestra Silvia Josefina, el amor se percibe de manera inconsciente, y el sentido por el que entra principalmente es el olfato.
“El olfato llega directamente a los núcleos cerebrales profundos y crea un efecto, entonces el cerebro no se da cuenta de que está oliendo algo. No lo piensa, no lo concientiza, por eso el amor es inconsciente, no elegimos enamorarnos, uno se enamora y no hay remedio”.
En cuanto al resto de los sentidos, comenta la especialista, el que tiene más importancia después del olfato es la vista, porque “si no te gusta lo que ves, pues no te enamoras”, aunque aún así hay ocasiones en las que surge la interrogante de quienes se enamoran de alguien pero no saben exactamente qué les gusta de esa persona. Es precisamente el olor.
El siguiente sentido -según la jerarquía para la percepción del enamoramiento en el cerebro- es el tacto y, por último, el gusto, que es cuando ya se tiene más interacción con la persona. Es por eso que el amor a primera vista puede existir. Aunque no exista convivencia con la persona, puede surgir el enamoramiento, pues según la ciencia basta mirar y oler.
El único sentido que no tiene participación en el enamoramiento, asegura la maestra López Pérez, es el oído: “generalmente el cerebro te pide ver a la persona, y olerla inconscientemente, pero no te interesa mucho lo que diga”.
Otra cuestión poco romántica que se expuso en la conferencia fue que el efecto del enamoramiento sólo dura cuatro años. Las promesas de amor eterno no tienen validez para la ciencia. “El cerebro no puede durar eternamente en la misma situación sobreexcitada, como decimos los neurobiólogos, entonces se tiene que liberar el estímulo poco a poco hasta que el amor apasionado y profundo llega a un término”.
¿Qué pasa entonces con los matrimonios que duran años? Asegura la especialista que eso sucede de manera consciente, el cerebro elige quedarse con esa persona porque ya considera que es quien le conviene, pero ya no es de manera inconsciente, como lo es con el amor arrebatado y pasional.
En otro lado leí es un estado patológico caracterizado por una disminución de Serotonina (un neurotransmisor) a nivel cerebral, lo que conduce a un incremento de la sensibilidad emocional e inestabilidad (Extraido de Yahoo Respuestas)
En otro lado encontré el coctel de dopamina, oxitocina entre otras:
En un principio se da la atracción, el flechazo, ese momento en elque dos personas se miran y "uis, siento maripositas en el estómago". En ese momento, el cerebro produce cantidades ingentes de feniletilamina, un compuesto de la familia de las anfetaminas que, curiosamente, se encuentra en cantidades generosas en el chocolate ( de ahí que cuando se rompa una relación sea un recurso muy socorrido, junto con las tarrinas de medio litro de helado, aunque se duda que haya cantidad suficiente para provocar ese efecto y quizá sea más efecto placebo que otra cosa). La feniletilamina causa la euforia y laexcitación inicial, ese estremecimiento que nos entra cada vez que vemos a la persona que nos atrae, esas maripositas en el estómago. Además, da comienzo a todo el proceso: se segregancantidades mayores de dopamina que es la encargada de los mecanismos de refuerzo que nos llevan a repetir aquello que nos da placer, como besar a nuestra pareja, nos motiva a estar más tiempo con ella, además de prolongar esa sensación de placer, emoción y euforia junto con estar más pendiente de todo lo que atañe a nuestra media mandarinita; la adrenalina, que nos pone el corazón acelerado en cuanto vemos a nuestro cariñín o nos hace ponernos a dar saltitos por la habitación como quinceañeras cuando recibimos un sms del cariñín dichoso, además de disminuir drásticamente el apetito y dar una vitalidad increíble. También se dispara la oxitocina, encargada del deseo sexual y del estrechamiento de los lazos afectivos. Todos estos neurotransmisores combinados forman un cóctel explosivo que hace que nos tiremos horas hablando y "sumergidos en las mieles del amor y la pasión", por decirlo poéticamente, sin cansarnos ni tener sueño. La vasopresina también hace de las suyas, y es que está muy relacionada también con el enamoramiento y los lazos afectivos, al igual que la oxitocina. Y que no se nos olvide latestosterona, incitadora del deseo sexual.
Sin embargo, esa borrachera amorosa no dura toda la vida, sino que llega un momento en el que nos hacemos resistente a ese cóctel explosivo, que los receptores que hay en el cerebro para esos neurotransmisores se saturan y no dan más de sí, con lo que la respuesta es menor o nula. Es entonces cuando hacen su efecto las endorfinas, que son las que nos dan esa sensación de sosiego, de calma, de estabilidad, pasando del enamoramiento explosivo y brutal al amor tranquilo y sereno. También conservan un papel importante en esta fase la oxitocina y la vasopresina, encargadas como hemos mencionado de los lazos afectivos.