Hablando de hermanas lacteas...
Una vez llegué a ese local de Veneto primer piso, costado del restaurante para empujarle el trozo a Luisa la escurridiza que algunos recordaran. Una chibola trigueña de Ica con unas patazas y uno de los mejores rabos que he visto en Lima Centro. Al comienzo no atracaba ni manual pero felizmente se cruzó en el camino de Sandrita (Nazarenas) otra chibola que se ABRIO campo en el mundo cacheril y que conocí y atoré antes que a Luisa.
La cosa es que llegué y las encontré a las dos. Ni yo sabia que se conocian ni ellas sabian que la otra me conocía. La sorpresa fue tripartita y hubo un breve silencio con miradas entre los tres, momento incomodo. De pronto Sandrita rompe el hielo diciendole a Luisa "no me digas que somos hermanas de leche!" y luego vino la risa entre los tres. Luisa estaba un poco arrochada porque era nueva en el mundo cacheril. Aprovechando el buen momento les propuse un trio, a lo que Sandrita accedió con ilusión (porque tambien le gustaban las flacas) pero Luisa se sintió corta aun para entrarle a ese tema. Estaba tiernita y dando sus primero pinitos.
Felizmente, meses despues en una soleada tarde de verano en el sotano de Nazarenas pude darme ese gusto con las dos juntas.
Luisa desapareció del mapa y no se nada de ella hace años y a Sandra la vi caminando por Abancay el año pasado y da pena decir que esta matada. Esas tetas bonitas y firmes que disfruté ahora se notan flacidas y si a eso le sumamos una fea panza y un cacharro trasnochado peor aun.
Ya me pusieron nostalgico.
Saludos
R.