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Gracias man, pronto publicaré el relato de una empleada que tuve.Que buen relato cofra, muy buena analizada
Hace poco vi a la chibola (ya no tan chibola, ya debe tener algo de 26 o 27 años) en un centro comercial de Surco y seguía fuertota, no le pude hacer el habla porque iba de la mano con su pareja y un peque. Pero, siendo sincero, ese culo aun sigue intacto.Muy buen relato cofra, y esa chibola por lo visto enciende pasiones.
Saludos.
Hace poco vi a la chibola (ya no tan chibola, ya debe tener algo de 26 o 27 años) en un centro comercial de Surco y seguía fuertota, no le pude hacer el habla porque iba de la mano con su pareja y un peque. Pero, siendo sincero, ese culo aun sigue intacto.
Saludos y ya se viene el relato de mi empleada charapa.
Si algún día me la vuelvo a cruzar y estoy solo como ahora, me mando con todo, a ver que pasa.Cuando las agarras chibolas y t las coges bien...nunca se olvidan...y solitas t buscan para una buena culeada de calidad....incluso a veces pasado el tiempo...siempre kedamos en su inconsciente como el cacheraso q se comieron ;-)
Ya no man, pero el destino es impredecibleQue buen relato cofra, sin duda usted es un viejo cazador que no deja que una presa se escape...la volvió a ver después de ese encuentro ?
Después de ese día yo sabía que tenía que dejar ir a ese culo, era muy chibola para mi y en el fondo sabía que solo había cachado conmigo por curiosidad, ella solo quería saber como tiraba el que hacía gritar a su hermana cuando sus padres no estaban.
Este es el final, espero compartir nuevas historias pronto.
Saludos
Me levanté antes de las 5 y fui a la bajada de la playa con mi camioneta, estuve esperando un buen rato hasta que apareció y ni bien la vi, arranque y avance hasta su costado y le dije sube Mell. Ella no lo dudo ni un segundo y ya estaba sentada en el asiento del copiloto, acerqué mi rostro para saludarla y la muy perra me mando un chape con todo y lengua que lo sentí hasta en mi garganta. Definitivamente quería cachar, de inmediato me dirigí a un telo cerca y ya en la habitación casi sin mediar palabras, me comenzó a besar como si no hubiera un mañana, yo no desaproveché la oportunidad y la pegue a mi cuerpo para que sintiera a mi muchacho que ya estaba fierro. La desnude rápidamente y la levante en peso para luego tirarla en la cama, le metí una chupada de concha que todos sus jugos rebalsaban y también lubricaron su culo. Gente no me aguanté y le lamí el culo a esa rica perra chibola, la hice gemir de placer y al incorporarme vi como blanqueaba los ojos en señal de que ya quería tener adentro mi pinga. Se la metí de golpe y hasta el fondo, la flaca gritó y casi araña mi espalda, estaba gozando la muy perra. Le di un buen rato en misionero hasta que sentí que su concha se había adaptado a mi pinga y ahí la puse en perrito para darle a mil por hora, ella no paraba de gritar y gemir, estaba poseída, hasta que se desvaneció en la cama y supe que había llegado, pues quedo hecha un trapo sobre la cama, mientras yo le decía al oído que era una deliciosa perra cachera y que en un rato más se tomará todo mi leche.
Cuando volvió en si, me dijo "Tenía unas ganas de verte y tú ni me escribías, eres un malo" yo le respondí "Pero si te escribía y lo leía tu enamorado, te podías meter en problemas y yo no quería eso para ti" la barajee y luego comencé a amasarle el culo nuevamente, ella ya sabía lo que se venía y solo atinó a empinar más el culo, mientras yo procedía a lamer ese rico ano de chibola. Gente no aguanté más y le puse la punta de mi pinga en la entrada de su culazo, ella lanzó un gemido profundo y poco a poco mi pinga iba entrando ese culazo que ajustaba más que su concha. Primero fui gentil con su ano, pero una vez que se acomodo bien mi pinga, me desconocí, la puse en media tijera y se la metí hasta el fondo, la muy perra gritaba y quería arañarme, pero no podía porque la tenía bien sujeta a mi cuerpo. Fue tan profunda la metida que hasta podía sentir como su concha chorreaba liquidos sobre mis piernas, hasta que en un momento sentí como convulsionaba y luego se desplomaba sin fuerza, la muy perra había llegado analmente.
Me fui a la ducha y la dejé tirada en la cama, me lavé bien y regrese para ponerle mi pinga en la boca y hacer que cumpla su promesa de tomarse toda mi leche, ella solo atinó a chuparla y a jugar con mis bolas mientras yo disfruta de su lengua, así estuvo cerca de 15 minutos hasta que se me vino todo el semen en su boca y ella sin dudarlo se lo trago hasta la última gota. Se había convertido en mi mujer y ella lo sabía.
Esa mañana se pasó volando y cuando nos dimos cuenta eran casi las 12 así que pedí un delivery y almorzamos juntos para luego seguir cachando a full, no voy a mentir, yo solo me vacié tres veces, ese es mi ritmo, no doy más; pero, esa chibola llego 5 veces ese día y lo disfruto como una perra en celo.
Después de ese día yo sabía que tenía que dejar ir a ese culo, era muy chibola para mi y en el fondo sabía que solo había cachado conmigo por curiosidad, ella solo quería saber como tiraba el que hacía gritar a su hermana cuando sus padres no estaban.
Este es el final, espero compartir nuevas historias pronto.
Saludos
Man, los hechos de ese relato sucedieron hace más o menos 9 años atrás, obviamente tengo otro número de cell, y no he tenido contacto con ella hace mucho. La última vez que la vi fue de casualidad en un centro comercial y ella no me vio. Solo espero que el destino la vuelva a poner en mi camino, pero solo para el goce, nunca para nada más que eso. Si eso llega a suceder algún día, prometo contarlo en un nuevo relato.Ufff cofra que buen relato, usted si es un capo, le dio sus buenas culeadas a la chibola y supo que era momento de retirarse; estoy muy seguro que ella volvera a llamarlo pronto y espero que no desaproveche para que así nos cuente un nuevo relato al respecto...