Y la respuesta sería "Ojalá" para que vuelvan las opciones kineras de antaño, el servicio dedicado, los cafichos que a lo mucho llamaban por teléfono o las cuidaban por ahí entre las sombras, cuando uno pedía una kine y llegaba ella; cuando nuestras kines independientes eran independientes sin mafias ni vainas por ahí que las fastidien; cuando lo ofrecido en su mayoria se cumplía, y cuando teníamos libremente por aquí opciones como las adorables colochas o las entregadas ecuatorianas trabajando sin mayor problema que de vez en cuando cuidarse de los serenazgos. Esto mismo se extrapola a temas como la capacidad de cuaquier hijo de vecino de abrir un negocio propio sin tener que preocuparse por cupos, extorsiones y sicariato (el círculo vicioso que a ellos en su tierra los llevó a la miseria por la que tuvieron que abandonar su propio país)
Esto es muy cierto, la ola migratoria en Vzla empezó allá por el 2009, cuando salía la gente que podía, claramente viendo que el país empezaba a irse por el drenaje y tenían los medios como para mantener un negocio por allá y salir a empezar de nuevo, pero con otro negocio, en países como Perú o Ecuador; Argentina era también un destino en ese momento atractivo. Luego vino la ola migratoria del 2015, y finalmente la del 2017, esta última siendo masiva y moviendo ya las agujas en la frontera, esta fue la ola migratoria de la que mucha gente recién "se dió cuenta" en la que venían profesionales jóvenes, o gente con estudios truncos a seguir su línea por aquí; evidentemente ya luego a comienzos del 2019 y 2020 estabamos tristemente plagados de miseria y violencia, y estas 2 últimas se han reproducido y traido crías en los últimos 4 años hasta ponernos en la situación actual: Más de 2 millones de ciudadanos del país de Maduro y sus rojos habitan en territorio nacional, buena parte de ellos sin tributar, pero exigiendo al gobierno local que se haga cargo de sus problemas políticos mientras ellos buscan cualquier excusa para embriagarse y bailar, como en su "protesta contra los resultados de las elecciones" en la Costa Verde, lo cual desde luego para nada sorprende.
Es bastante evidente que el perfil de quienes "se informan" en esas plataformas son los que se compran cualquier cuento que les pongan al frente y son la carne de cañón, en su mayoría nóveles en casi cualquier materia, que fácilmente pueden ser convencidos de lo que sea, pasando por ir a tal o cual lugar de viaje, poner de moda un restaurante o discoteca, hasta entregar el poto y mucho peor que ello, el voto. Lamentablemente son cada día más el grueso de la población, precisamente como mencionas por resultado de ese embrutecimiento colectivo que busca la izquierda, precisamente para tener más zánganos y parásitos dependiendo de los bonos, las canastas básicas y los subsidios. Una triste realidad que golpea a toda la región sudamericana.
Pasando a temas de mejor color, vendrán rusas y ucraniananas a kinear con esta temporada de circos?
Ahí sí hay carne de la buena....