Acabo de terminar de leer "Conversación en la catedral" de mario Vargas Llosa. ¡Que tal conversación se mandaron Santiago (Zavalita) y Ambrosio!
Lo que no logré entender fue, ¿cuando realmente se jodió Santiago? y porqué ese odio o resentimiento visceral a su familia y a su "clase" lo que le lleva incluso a renunciar a cualquier herencia de su familia a pesar que su sueldito de periodista le hacía pasar apurois a él y a Ana, su esposa.
En cuanto a Cayo (Cayo Bermudez) me parece que el personaje no brilló tanto. El fue el director de gobierno de Odría (en la novela claro y en la vida real, vendría ser Alejandro Esparza Zañartu), un paralelo al jefe del SIN, o también a Vladimiro Montesinos. Haciendo un comparativo entre él y otro personaje de otra novela del mismo autor, Jhony Abbes García (Jefe del SIN dominicano en la "Fiesta del Chivo"), pues me quedo con él segundo. En esa novela, Jhony Abbes cobra vida propia. La frialdad con la que se maneja y maneja el tema de la seguridad y todos los fraudes para encubrir las barbaries de la dictadura Trujillista, son impresionantes, muy bien elaborado el personaje. En contraste Cayo Bermudez, en mi opinión, nunca escapa de las manos del narrador, algunas veces su personaje se torna hasta cómico.
Debo decir también que me topé sin querer queriendo con un personaje, Aída, cuyo nombre en la vida real es muy conocido para mí. Pero lo más sorprendente de esto es que algunas características del personaje increiblemente coinciden con el personaje de la vida real. Y bueno, si tengo que elegir a mi personaje favorito, pues estaría entre Santiago, su esposa Ana y Aída, me quedo con la última.
La recomiendo plenamente, como casi toda la novela es una conversación, pues los diálogos entre los personajes la hacen muy fácil de leer.
Saludos a todos.
Amado García Guerrero