“Noble oficio, rara vocación, todas menos mi madre y mi hermana, Magdalenas, Mesalinas, Jeniffers, Vanessas, Emmanuelles, pobres por necesidad, ricas por morbo, casadas por poderes, viudas sin haberes, peripatéticas, rubias de bote, paños de lágrimas, refugium pecatorum, solteras sin dote...