A ti no te gusta el billete? Es obvio que a todos nos gusta tener plata y no hay que juzgar eso, esta implícito en el ser humano, salvo que vivas en el Tíbet con Dalai Lama. Ahora si pone el dinero como una condicion para "enamorarse", es distinto y aprovecharse de un templado, menos que menos, eso es tener falta de ética profesional ( hey, no se rían, considero que debe haber códigos y éticas para este tipo de negocio, eso lo hace una verdadera escort o dama de compañía. Ya si me meten con el rango bajo de kines donde no hay respeto a nada y todo vale, ya se atienen a las consecuencias y si se enamoran, no se lamenten de su mal gusto o mala elección.
A todos los enamorados hagan la prueba de querer verla sin dinero de por medio y esa será la verdadera "prueba de amor" y podrán sacar sus conclusiones.
Y por último, a las ex kines que se dan sus escapadas, no digo que esté bien, pero no se equipara acaso con las escapadas que hacen los kineros? Si es así, pues son tal para cual y sin sacadas de cara en nada, disfruten déjense de telenovelas.
Completamente de acuerdo, compañera
@bomboncita. Muchos prejuicios. Una kine es una mujer más, y como tal, puede tener los mismos defectos que una mujer que no es kine: ser mentirosa, calculadora, materialista, etc. Pero también puede tener las mismas virtudes que el resto de mujeres: ser sincera, trabajadora (solo kinea porque por X motivos necesita dinero para emprender algo), empática, honesta, servicial, etc. Por ejemplo, puedes estar con una chica que nunca kineó, pero sin haberlo hecho, te saca la vuelta con quien puede, mientras que puede ocurrir que estés con una ex-kine y sea tal su amor, que no te engaña nunca. Todo es posible, así que ponerle etiquetas a las personas no es más que mentirnos a nosotros mismos.
En mi caso, que haría si por algún motivo siento que me estoy enamorando de una kine. Bueno, como dice la cofra
@bomboncita , la invitaría a salir sin la promesa de ningún pago ni nada, solo en plan de pasarla bien. Si acepta, seguimos pa'lante. Sino, pues quizá ella no esté interesada, o no le guste, o teme que la engañe para que me de un polvo gratis, o en efecto, es materialista. Tantas posibles razones, y todas válidas. Ya queda en uno aceptarlas o no.
Recalco nuevamente que en esta vida no valen los prejuicios ni las etiquetas. Mente abierta a todo, y que sean bienvenidas las experiencias, ya sean malas o buenas, porque si todo fuera perfecto en la vida, dejaría de ser divertido vivirla.