EL HAZZARD
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18 Years of Service
El patin amenaza nacionalizarse mexicano.
Cada vez más hombre que niño, Emilio llega a la cita acompañado por su mamá que, ahora, con 17 años, le llega al hombro. Su crecimiento físico es evidente. El ajedrecístico, no tanto. Lo han sacado del equipo olímpico y le han suspendido las ayudas que recibía por no cumplir con liquidar los viáticos de sus viajes a tiempo.
¿Crees que la federación te trata distinto que a los demás ajedrecistas?
Sí, en cierta forma. Igual, me ha causado gracia que digan ahora que me van a sacar del equipo olímpico, porque para empezar no vamos a ir a la olimpiada.
¿Reconoces alguna responsabilidad? La FPA dice que no cumpliste con las liquidaciones de tus viajes...
Presentamos una denuncia en la que señalo que los documentos se extraviaron porque mi madre fue víctima de un robo. Entonces había que detallar en qué se gastó el dinero y ya se hizo. Yo he pedido viajes para torneos en Canadá, Estados Unidos y solo salió uno, el de Costa Rica, porque estaban en falta. Pedí presupuestos para viajar a Cuba y a México no lo consiguieron supuestamente por falta de rendición de cuentas. Cuando quieren, sale en cinco días y cuando no quieren, nunca.
¿Consideras que no estás compitiendo lo suficiente?
Al año debería jugar entre 15 o 20 y hasta ahora llevo seis. Siento que me estoy oxidando. Hay jugadores de mi generación que jugaban menos que yo hace unos años y ahora me sacan más de 100 puntos ELO. Es que tienen apoyo y juegan suficientes torneos. Pero en la federación me ponen trabas y llegan a sugerir que soy el responsable de que Perú no viaje a la olimpiada, es decir
¿Por qué afirman eso?
Dicen que como soy el ajedrecista que tiene más acceso a la prensa, aprovecho para hacerle cargamontón a la federación, y los empresarios ven eso con malos ojos y por eso no apoyan. Yo no hago cargamontón, solo reclamo por las injusticias que cometen conmigo.
¿Qué injusticias?
Por ejemplo, que no den trámite a los oficios que mando, o que mi título de gran maestro todavía no salga. Debió salir en el congreso de mayo de la FIDE (Federación Internacional de Ajedrez) y ahora dicen que saldrá en noviembre. Son tan ineptos que en el documento que presentaron para solicitar mi título se equivocaron al consignar mi fecha de nacimiento. ¿Y si la FIDE lo rechaza? Tendría que esperar al menos seis meses más.
¿Algo más?
Cada vez que tengo un inconveniente, como el año pasado en Cali, traen a colación el pasado. Perdí el pasaje y empezaron a decir que otra vez me había quedado por una chica. Siempre me sacan eso.
¿Y hay algo de cierto?
Eso ya está superado, ya lo dije antes. Ahora tengo una novia, se llama Caissa [nombre de la diosa del ajedrez]. Mis otras 'novias' son mi mamá, mi abuela que me crio, mis tías. Ahora me siento más estable. Que se agarren de mi pasado para reclamarme por un pasaje perdido me incomoda. Yo puedo ser irresponsable en muchas cosas, pero tengo muy claro lo que es mi deporte.
¿Y qué quieres hacer de aquí en adelante?
Quiero ver la forma de seguir escalando y acá en Perú no puedo. Necesito jugar torneos. Actualmente ya no soy el número dos de Perú. Christian Cruz, un chico muy talentoso que vive en España, me ha superado. Para que veas la diferencia: yo he jugado ocho partidas entre julio y octubre. Él, 54.
¿Y tú crees que a otros sí los ayudan?
Bueno, Julio Granda no se puede quejar, siempre lo han apoyado. Yo he sido primero del mundo en mi categoría durante un año entero y nada. Cuando obtuve el título de gran maestro, tampoco, apenas un reconocimiento público de Arturo Woodman. He tenido varios logros y siento indiferencia. He recibido propuestas de México y de España para que cuando alcance la mayoría de edad me vaya a vivir a esos países. Me dicen que si lo hago no me va a faltar nada. Siguen en pie, pero no es lo mismo jugar por tu país que defender una bandera extranjera. En fin, espero que las cosas cambien para bien.
Cada vez más hombre que niño, Emilio llega a la cita acompañado por su mamá que, ahora, con 17 años, le llega al hombro. Su crecimiento físico es evidente. El ajedrecístico, no tanto. Lo han sacado del equipo olímpico y le han suspendido las ayudas que recibía por no cumplir con liquidar los viáticos de sus viajes a tiempo.
¿Crees que la federación te trata distinto que a los demás ajedrecistas?
Sí, en cierta forma. Igual, me ha causado gracia que digan ahora que me van a sacar del equipo olímpico, porque para empezar no vamos a ir a la olimpiada.
¿Reconoces alguna responsabilidad? La FPA dice que no cumpliste con las liquidaciones de tus viajes...
Presentamos una denuncia en la que señalo que los documentos se extraviaron porque mi madre fue víctima de un robo. Entonces había que detallar en qué se gastó el dinero y ya se hizo. Yo he pedido viajes para torneos en Canadá, Estados Unidos y solo salió uno, el de Costa Rica, porque estaban en falta. Pedí presupuestos para viajar a Cuba y a México no lo consiguieron supuestamente por falta de rendición de cuentas. Cuando quieren, sale en cinco días y cuando no quieren, nunca.
¿Consideras que no estás compitiendo lo suficiente?
Al año debería jugar entre 15 o 20 y hasta ahora llevo seis. Siento que me estoy oxidando. Hay jugadores de mi generación que jugaban menos que yo hace unos años y ahora me sacan más de 100 puntos ELO. Es que tienen apoyo y juegan suficientes torneos. Pero en la federación me ponen trabas y llegan a sugerir que soy el responsable de que Perú no viaje a la olimpiada, es decir
¿Por qué afirman eso?
Dicen que como soy el ajedrecista que tiene más acceso a la prensa, aprovecho para hacerle cargamontón a la federación, y los empresarios ven eso con malos ojos y por eso no apoyan. Yo no hago cargamontón, solo reclamo por las injusticias que cometen conmigo.
¿Qué injusticias?
Por ejemplo, que no den trámite a los oficios que mando, o que mi título de gran maestro todavía no salga. Debió salir en el congreso de mayo de la FIDE (Federación Internacional de Ajedrez) y ahora dicen que saldrá en noviembre. Son tan ineptos que en el documento que presentaron para solicitar mi título se equivocaron al consignar mi fecha de nacimiento. ¿Y si la FIDE lo rechaza? Tendría que esperar al menos seis meses más.
¿Algo más?
Cada vez que tengo un inconveniente, como el año pasado en Cali, traen a colación el pasado. Perdí el pasaje y empezaron a decir que otra vez me había quedado por una chica. Siempre me sacan eso.
¿Y hay algo de cierto?
Eso ya está superado, ya lo dije antes. Ahora tengo una novia, se llama Caissa [nombre de la diosa del ajedrez]. Mis otras 'novias' son mi mamá, mi abuela que me crio, mis tías. Ahora me siento más estable. Que se agarren de mi pasado para reclamarme por un pasaje perdido me incomoda. Yo puedo ser irresponsable en muchas cosas, pero tengo muy claro lo que es mi deporte.
¿Y qué quieres hacer de aquí en adelante?
Quiero ver la forma de seguir escalando y acá en Perú no puedo. Necesito jugar torneos. Actualmente ya no soy el número dos de Perú. Christian Cruz, un chico muy talentoso que vive en España, me ha superado. Para que veas la diferencia: yo he jugado ocho partidas entre julio y octubre. Él, 54.
¿Y tú crees que a otros sí los ayudan?
Bueno, Julio Granda no se puede quejar, siempre lo han apoyado. Yo he sido primero del mundo en mi categoría durante un año entero y nada. Cuando obtuve el título de gran maestro, tampoco, apenas un reconocimiento público de Arturo Woodman. He tenido varios logros y siento indiferencia. He recibido propuestas de México y de España para que cuando alcance la mayoría de edad me vaya a vivir a esos países. Me dicen que si lo hago no me va a faltar nada. Siguen en pie, pero no es lo mismo jugar por tu país que defender una bandera extranjera. En fin, espero que las cosas cambien para bien.
