Para evitar dejar de lado "importantes propuestas" se organiza el debate la última semana, cuando ya está decidido quienes pueden pasar a la segunda vuelta y quienes no. Para el presente caso, el debate pudo haber sido entre Keiko, Vero, PPK y Barnechea. Los demás simplemente ya no tienen nada que hacer y su presencia sólo sirve para entorpecer el debate. Es discriminador, sí, pero el elector gana y eso es lo único que importa.
Hablando de casos de democracias consolidadas, por ejemplo en el Reino Unido los debates son entre conservadores y laboristas, alguna vez los liberal-demócratas, y punto. No se convocan a los UKIP, ni a los partidos regionales, ni a otros minoritarios, y nadie se escandaliza. Son realistas, pues.
Tu propuesta de varios debates me temo que es poco realista. Dudo que los candidatos acepten limitar su accionar de campaña, al verse constreñidos a asistir a "n" debates organizados por el JNE, que por otro lado dudo que tengan la audiencia de un único gran debate, se harían rutinarios.
Finalmente, te diría que el único debate viable en unas elecciones tipo las peruanas, es el de la segunda vuelta.