Castillo resultó una decepción más de los políticos peruanos, eso pasa por no tener una ideología definida, solo fue un oportunista más. Llegó con la izquierda al gobierno y tuvo como asesores de cabecera a derechairos como Pacheco, Silva, entre otros. Por eso es importante la formación política e odeológica para tener un rumbo definido y no tener oportunistas y comodines que ingresan con un plan y terminan con otro, al final el perjudicado es el país.