Darkzininho
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13 Years of Service
En esta vida y en la otra, las apariencias continuarán rigiendo las conductas de muchas personas, pero la verdad que guarda cada persona es única y usualmente la comparten con pocas personas o incluso con una sola.
En ese ámbito es que la mujer me resulta muchas veces un misterio, a veces una caja de Pandora o en un otras un libro abierto, muy abierto. Mas lo que si puedo concluir es que mientras mas mujeres conoce uno en la vida, mas se cuestiona uno sobre los secretos que guardan ellas...
En fin, Graciela era por decirlo así una mujer atípica, una de aquellas damas que uno las ve pasar por la calle y quizá no provoque ni una solo sentimiento...es decir, pasaría tan indiferente a los ojos de cualquiera.
Tenia un poco mas de 35 años, y se había convertido en padre y madre de Minerva una niña de 13 años, que era todo lo contrario de su madre, muy vivaracha, alegre y siempre sonriente.
A Graciela, esta vida le había jugado las cartas como pudo, expatriada de su tierra natal (chiclayo) por rumores, que después descubriría que fueron bien fundados, de asentó en lima en compañía de una prima. Aquí en la fría capital encontró al que pudiese decir fue el amor de su vida, aquel pudiente limeño que se encandiló de ella y la pidió en matrimonio...ademas de hacerle una hija.
Aunque la felicidad no dura para siempre...reza el verso, la de Graciela...duro muy poco, meses después de su boda enviudo...quedando sola con la niña en el vientre y con el respaldo económico que le dejo el marido...
XXXX: lo extrañas?
Le pregunte, mientras le recorría con los dedos el seno izquierdo...
GRACIELA: ...No!
Respondió sin muchas ganas, y con una frialdad de tempano...
GRACIELA: Son cosas que pasan...
"Cosas que pasan"... la mire fijamente y me cuestionaba acaso.
XXXX: Será esta la misma mujer de hace 2 meses?...
Ni siquiera pude responderme mi propio cuestionamiento, así que solo atine a recostarme sobre la cama...
Graciela, había empezado ya la limpieza de su cuerpo... Salida de la ducha llevaba consigo ese aroma fresco del agua, sobre su piel blanca, en ese ínterin vi poco a poco el proceso de limpieza...desde la toalla blanca hasta el uso de las cremas para la piel...
Es un proceso que aunque parezca insano, me deleita, mucho diria yo... y en esta mujer aun mas... Finalmente se enfundo el vestido, ajusto la cintura, acomodo los senos y se puso el saco largo...
GRACIELA: ...pero te vas a quedar ahí desnudo, o es que quieres seguir cachando?...
XXXX: ...tu que crees?
mi musa, me miro con esos ojos tan pícaros como desconcertantes...se mordió los labios y se recostó junto a mi...
...Por la ventana ya se deslizaban los primeros rayos matutinos del amanecer limeño...
En ese ámbito es que la mujer me resulta muchas veces un misterio, a veces una caja de Pandora o en un otras un libro abierto, muy abierto. Mas lo que si puedo concluir es que mientras mas mujeres conoce uno en la vida, mas se cuestiona uno sobre los secretos que guardan ellas...
En fin, Graciela era por decirlo así una mujer atípica, una de aquellas damas que uno las ve pasar por la calle y quizá no provoque ni una solo sentimiento...es decir, pasaría tan indiferente a los ojos de cualquiera.
Tenia un poco mas de 35 años, y se había convertido en padre y madre de Minerva una niña de 13 años, que era todo lo contrario de su madre, muy vivaracha, alegre y siempre sonriente.
A Graciela, esta vida le había jugado las cartas como pudo, expatriada de su tierra natal (chiclayo) por rumores, que después descubriría que fueron bien fundados, de asentó en lima en compañía de una prima. Aquí en la fría capital encontró al que pudiese decir fue el amor de su vida, aquel pudiente limeño que se encandiló de ella y la pidió en matrimonio...ademas de hacerle una hija.
Aunque la felicidad no dura para siempre...reza el verso, la de Graciela...duro muy poco, meses después de su boda enviudo...quedando sola con la niña en el vientre y con el respaldo económico que le dejo el marido...
XXXX: lo extrañas?
Le pregunte, mientras le recorría con los dedos el seno izquierdo...
GRACIELA: ...No!
Respondió sin muchas ganas, y con una frialdad de tempano...
GRACIELA: Son cosas que pasan...
"Cosas que pasan"... la mire fijamente y me cuestionaba acaso.
XXXX: Será esta la misma mujer de hace 2 meses?...
Ni siquiera pude responderme mi propio cuestionamiento, así que solo atine a recostarme sobre la cama...
Graciela, había empezado ya la limpieza de su cuerpo... Salida de la ducha llevaba consigo ese aroma fresco del agua, sobre su piel blanca, en ese ínterin vi poco a poco el proceso de limpieza...desde la toalla blanca hasta el uso de las cremas para la piel...
Es un proceso que aunque parezca insano, me deleita, mucho diria yo... y en esta mujer aun mas... Finalmente se enfundo el vestido, ajusto la cintura, acomodo los senos y se puso el saco largo...
GRACIELA: ...pero te vas a quedar ahí desnudo, o es que quieres seguir cachando?...
XXXX: ...tu que crees?
mi musa, me miro con esos ojos tan pícaros como desconcertantes...se mordió los labios y se recostó junto a mi...
...Por la ventana ya se deslizaban los primeros rayos matutinos del amanecer limeño...