Indagando en su pasado...oscuro

Entendible por más mente abierta que tengas que cuando te queman las dudas o el cerebro poco a poco se va convirtiendo en algo tóxico y te entiendo muy bien, conocí una flaca en una conocida universidad privada en la Molina, ella trabajaba ahí en el área de post grado, delgada de cabello lasio largo negro muy bien cuidado, de senos pequeños una buena cinturita, pero de buenas caderas un señor culo y piernas gruesas, 1.67 de altura, salimos por un tiempo y llegamos a ser enamorados, a primera impresión era muy rescatada y hasta sería, nuestro primer encuentro sexual me sorprendió porque en el sexo era bastante abierta de mente abierta,se notaba la gran experiencia en el sexo oral con garganta profunda y chupada de huevos, daba unos movimientos circulares de campeonato, pedía a gritos nalgadas fuertes, aquí háre una aclaración ( veo que los relatos exageran en sus medidas de penes al decir que lo tienen normal, y citan 18cm, según estudios científicos en esta parte de continente de 3 a 8 es un micro pene de 8 a 12 pene chico, de 12 a 15 un pene normal, de 15 a 18 un pene grande y de ahí hacia arriba ya un mega pene, decir 18 que es normal está fuera de contexto, 18cm es normal pero en África o países caribeños, que son los más aventajados en ese aspecto, es conocido si eres de descendencia negra es probable que seas pingon, así como para los asiáticos 8 o 10 es normal) en mi caso tengo 16cm pero en esta flaca prácticamente bailaba mi pene, tenía sus labios vaginales bien pronunciados como dicen cresta de gallo, cuando teníamos sexo se trasformaba completamente, hasta en su vocabulario bastante sucio y bulgar, pero no me molestaba era una experiencia nueva para mi, también me quemaba el cerebro en pensar en su pasado y esto pasa cuando estás enamorado y piensas en una relación seria, y que posiblemente sea la madre de tus hijos, si solo pensaras en vacilón del momento por lógica está idea no cruza por nuestra mente, llegamos a tener sexo a diario algunas veces mañana y noche, fue ella misma que en su cumpleaños después de celebrar con las amistades y ya en un hotel, estábamos teniendo sexo como siempre y ella me sorprendió al agarrar mi pene y metérselo a su culo, en posición perrito y entro normal sin esfuerzo, está relación me ocasionó problemas laborales, trabajaba para una trasnacional y tenía un futuro más que alentador, tuve que volver a esforzarme laboralmente y recobrar la confianza de los jefes, pero para lograrlo le quité tiempo al sexo y relación, esto termino por las sospechas que tenía o dudas que me llevaron a indagar su pasado, y por palabras de ella que muchas veces me decía en pleno sexo que ya no podía dejar de tener sexo un día conmigo, comencé implantando le una aplicación a su celular para yo poder ver sus redes sociales chats, dónde descubrí muchas cosas de ella, parte de su pasado que es pasado, pero que me era infiel que eso sí importaba, y me era infiel con su ex que trabajaba con ella eran compañeros, en ese momento recién me enteré de eso que su compañero era su ex, ese ex tenía ya otra pareja y al parecer su centro laboral era su centro de juegos de ellos, es más el pata hasta la celaba con algunos decanos, el párrafo que al leer más me marco fue: cuando el le decía que solo sólo su concha aguantaba a su pene, también vi mucho coqueteó con otros tipos que al parecer era decanos, chats en doble sentido subidos de tono, en un chat quedaron en verse saliendo del trabajo con su ex, en la rotonda de la Molina fui con el carro de un compañero y se vieron y deferente se fueron a un Telo, salieron después de una hora ni bien se despidieron me llamo, esa noche no la vi pero si quede a la siguiente en mi depa, fue la última noche que pase con ella, creo que hasta fui algo brusco o violento en el sexo con ella, pero fue mi ira contenida recuerdo que hasta le metí el pico de la botella por su culo mientras yo la penetraba vaginalmente, al día siguiente la termine mediante un mensaje de WhatsApp, con la excusa de que escogía mi trabajo y no tenía tiempo para ella, apesar de sus llamadas o buscarme no le di cara, más que nada para no decirle las cosas y humillarla no va conmigo eso, pero está aplicación lo tuve por buen tiempo en mi celular, viendo de vez en cuando sus perradas más que nada cuando el corazón me quería traicionar, hoy ya no lo tengo porque cambie de celular y resetie ese celular donde estaba, por eso te entiendo y ofrecerte disculpas por invadir tú relatos que está muy interesante.
Que fuerte también su historia cofrade, si es una tortura, lo reconozco
 
Entendible por más mente abierta que tengas que cuando te queman las dudas o el cerebro poco a poco se va convirtiendo en algo tóxico y te entiendo muy bien, conocí una flaca en una conocida universidad privada en la Molina, ella trabajaba ahí en el área de post grado, delgada de cabello lasio largo negro muy bien cuidado, de senos pequeños una buena cinturita, pero de buenas caderas un señor culo y piernas gruesas, 1.67 de altura, salimos por un tiempo y llegamos a ser enamorados, a primera impresión era muy rescatada y hasta sería, nuestro primer encuentro sexual me sorprendió porque en el sexo era bastante abierta de mente abierta,se notaba la gran experiencia en el sexo oral con garganta profunda y chupada de huevos, daba unos movimientos circulares de campeonato, pedía a gritos nalgadas fuertes, aquí háre una aclaración ( veo que los relatos exageran en sus medidas de penes al decir que lo tienen normal, y citan 18cm, según estudios científicos en esta parte de continente de 3 a 8 es un micro pene de 8 a 12 pene chico, de 12 a 15 un pene normal, de 15 a 18 un pene grande y de ahí hacia arriba ya un mega pene, decir 18 que es normal está fuera de contexto, 18cm es normal pero en África o países caribeños, que son los más aventajados en ese aspecto, es conocido si eres de descendencia negra es probable que seas pingon, así como para los asiáticos 8 o 10 es normal) en mi caso tengo 16cm pero en esta flaca prácticamente bailaba mi pene, tenía sus labios vaginales bien pronunciados como dicen cresta de gallo, cuando teníamos sexo se trasformaba completamente, hasta en su vocabulario bastante sucio y bulgar, pero no me molestaba era una experiencia nueva para mi, también me quemaba el cerebro en pensar en su pasado y esto pasa cuando estás enamorado y piensas en una relación seria, y que posiblemente sea la madre de tus hijos, si solo pensaras en vacilón del momento por lógica está idea no cruza por nuestra mente, llegamos a tener sexo a diario algunas veces mañana y noche, fue ella misma que en su cumpleaños después de celebrar con las amistades y ya en un hotel, estábamos teniendo sexo como siempre y ella me sorprendió al agarrar mi pene y metérselo a su culo, en posición perrito y entro normal sin esfuerzo, está relación me ocasionó problemas laborales, trabajaba para una trasnacional y tenía un futuro más que alentador, tuve que volver a esforzarme laboralmente y recobrar la confianza de los jefes, pero para lograrlo le quité tiempo al sexo y relación, esto termino por las sospechas que tenía o dudas que me llevaron a indagar su pasado, y por palabras de ella que muchas veces me decía en pleno sexo que ya no podía dejar de tener sexo un día conmigo, comencé implantando le una aplicación a su celular para yo poder ver sus redes sociales chats, dónde descubrí muchas cosas de ella, parte de su pasado que es pasado, pero que me era infiel que eso sí importaba, y me era infiel con su ex que trabajaba con ella eran compañeros, en ese momento recién me enteré de eso que su compañero era su ex, ese ex tenía ya otra pareja y al parecer su centro laboral era su centro de juegos de ellos, es más el pata hasta la celaba con algunos decanos, el párrafo que al leer más me marco fue: cuando el le decía que solo sólo su concha aguantaba a su pene, también vi mucho coqueteó con otros tipos que al parecer era decanos, chats en doble sentido subidos de tono, en un chat quedaron en verse saliendo del trabajo con su ex, en la rotonda de la Molina fui con el carro de un compañero y se vieron y deferente se fueron a un Telo, salieron después de una hora ni bien se despidieron me llamo, esa noche no la vi pero si quede a la siguiente en mi depa, fue la última noche que pase con ella, creo que hasta fui algo brusco o violento en el sexo con ella, pero fue mi ira contenida recuerdo que hasta le metí el pico de la botella por su culo mientras yo la penetraba vaginalmente, al día siguiente la termine mediante un mensaje de WhatsApp, con la excusa de que escogía mi trabajo y no tenía tiempo para ella, apesar de sus llamadas o buscarme no le di cara, más que nada para no decirle las cosas y humillarla no va conmigo eso, pero está aplicación lo tuve por buen tiempo en mi celular, viendo de vez en cuando sus perradas más que nada cuando el corazón me quería traicionar, hoy ya no lo tengo porque cambie de celular y resetie ese celular donde estaba, por eso te entiendo y ofrecerte disculpas por invadir tú relatos que está muy interesante.

Son terribles las flacas y bueno según mi experiencia , flaca que quiere sexo a cada rato si no se lo das busca a otro...
 
Como comprenderán, estaba en shock por lo que me acababa de decir Lucero. Así que sólo atiné a bajar del taxi sostener a puerta para ella y luego caminar hacia el hotel. Luego de pedir la llave, subimos a la habitación, ninguno dijo nada hasta estar dentro. Entonces ella me cogió de la mano y me llevó a la cama, me quitó el saco, los zapatos, se quitó los zapatos y el ligero abrigo que traía. Me quitó la corbata muy hábilmente y me tumbó a la cama abriéndome la camisa y besándome apasionadamente. Mientras me besaba me metió la mano y me pajeaba por dentro del pantalón.
Yo estaba encendidísimo, no habíamos hablado de la propuesta así que yo la di por desestimada, sin embargo, una llamada al anexo de la habitación me cortó todo y me preocupó. No esperábamos ninguna llamada y no habíamos pedido nada, sosteniendo la mirada en mis ojos, fue retrocediendo mientras me besaba el cuerpo, hasta que se retiró por completo, cogió el teléfono, me seguía mirando a los ojos con lujuria, asentía mientras oía lo que le decían y de pronto confirmó “que suban por favor”.
Yo me paré de inmediato y fui a su encuentro, ella hizo lo mismo, me abrazó de la cintura, pegó su rostro a mi pecho, no dijo nada por unos segundos y yo pregunté… qué es esto? Quiénes están subiendo? Ella me abrazó más fuerte y me lo pidió, como lo hizo aquella vez… “Por favor, hagamos esto, yo le dije a mi ex y su flaca que podían venir, que pasaría lo que tuviera que pasar para que los cuatro podamos avanzar con nuestras vidas sin mirar atrás”. Yo la separé de mí, la miré a los ojos y con rostro furioso le dije nuevamente que no les debíamos nada, que no teníamos que arreglar nada por ellos, que ellos vean su tema. Lucero respondió.. “esto no es por ellos, es por mí, por ti, por nosotros”. Entonces le recriminé, que sería por ella! Que yo no pedí esto. Entonces alejándose hacia la puerta como para esperar a nuestras visitas, me dijo.. “crees que no te vi mirarle las tetas a ella? Crees que no me di cuenta que le comías el escote con la mirada? Sé que tú la deseas, siempre dijiste que tengo el mejor culo que te has tirado, pero puedo deducir que jamás has tenido unas tetas como las de ella, así como yo nunca he sentido una verga como la de él, hazlo por nosotros, no por ellos!”.
Yo me quedé callado, no era el motivo correcto ni la manera para hacerlo, pero Lucero tenía razón, esa flaca tenía unas ubres impresionantes y en ese momento gran parte de mí deseaba comerme esos mangos. Al fin tocaron a la puerta, ella abrió lentamente la puerta y de inmediato yo la cerré. Y le dije al oído, si esto tiene que pasar, que sea por mí, mi condición es que tú no tengas nada con tu ex… entonces ella lo pensó unos segundos y respondió… “que pase lo que tú quieras que pase, no haré más de lo que tú me permitas”. Lo repensé unos segundos, la respuesta no era del todo contundente, pero estaba embriagado imaginando esas tetazas al desnudo, así que abrí la puerta y ellos pasaron.
La flaca pasó primero, totalmente canchera, nadie saludó ni dijo nada. El ex de Lucero le metió una barrida a ella con la mirada y se cogió la entrepierna como acomodándose la verga, maldije el gesto, pero entonces me distraje por la flaca, que ya había recorrido la habitación. Se pasó al lado del pequeño sillón doble que había a un costado, se quitó los zapatos y el saquito que llevaba encima, nuevamente ante mí ese par de tetazas decoraban la habitación, que bestia para tener esos mangos. Cerré la puerta y nos dirigimos todos al mismo sitio.
La flaca, algo seria nos miró al ex de Lucero y a mí y nos dijo, “pendejos! Ustedes se cacharon a esta perra como quisieron, no sé quién empezó todo ni cómo, porque este idiota según él ni se acuerda, pero sí sé que éste se la clavó por la concha mientras tú te la tirabas por el culo!”. Le pedí que se calmara y entonces me preguntó, “cómo tú estás tan tranquilo?”. Y luego puso las reglas del juego, era toda una experta o al menos eso aparentaba. “Hoy voy me van a cachar ustedes dos a mí, pero será como yo quiera que sea y esta perrita de aquí ni siquiera tendría por qué mirar, porque yo tampoco estuve presente”. Recordé cómo me sentí mientras Lucero le agarraba la verga a su ex, mientras se la chupaba, mientras lo cabalgaba, cómo la disfrutaba moviéndose y cómo me pedía que me largara para que pudiera liberarse aún más; debo confesar que la furia me invadió en ese momento, me olvidé un poco de los sentimientos románticos y le dije a la flaca, que Lucero se quedaba, a ver cómo ella y yo tirábamos. Y volteando a Lucero le dije, no te pediré que te vayas como tú lo hiciste, pero si tú quieres esto, yo no me voy a contener nada y lo voy a gozar como me de la gana, si en algún momento sientes que no lo soportas, por tu voluntad te podrás ir.
La flaca se sorprendió de oírme decir esto, así que dijo “Ya está. Y mirando a su flaco, le dijo. Tú ni te muevas de ahí hasta que yo te diga”. Los cuatro estábamos bastante ebrios, pero enteros. Lucero y su ex se sentaron en el pequeño sillón, uno en cada extremo. La flaca se me acercó mirándome a los ojos, me tomó por el cuello como colgándose y empezó a besarme, eran besos con lengua y mordidas, sorprendentemente sentí que me resultaban cercanos, no fríos como de una completa extraña. Estuvimos besándonos unos minutos, cada vez más intensos, yo la cogía de la cintura y empecé a subir mis manos por su espalda desnuda, acariciándola. Ella ahora bajaba una mano hacia mi pecho y metía la otra dentro de mi pantalón, lo abrió y bajó la cremallera, dejándolo caer y tuvo mejor acceso a mi miembro que ya estaba fierro. Metió la mano dentro de mi ropa interior, me sacó la verga y empezó a masturbarme.
Yo la acerqué más y pegué nuestros cuerpos, ahora ella podía sentir mi miembro sobre su vestido y yo sentí ese par de tetazas, tenía la camisa abierta así que sentí perfectamente cómo se apretaban esos melones, tan suaves pero firmes, enormes, no flácidos sino llenos, se sentían demasiado cargados, podía sentir el roce de sus pezones, completamente erectos, sabía que esa sería una zona de su cuerpo que seguramente la haría explotar. Me atreví a más, una mano ahora se deslizaba hacia abajo, recorriendo su espalda descubierta y entrando en el vestido, seguí bajando y me sorprendí de no sentir nada de tela, llegué a la raja de su culo y retirando mis besos la miré a los ojos, entonces ella se mordió el labio inferior y siguió comiéndome la boca, la muy perra no tenía puesta ropa interior. Entonces mi mano urgó más, hice el esfuerzo de agacharme más, mi dedo medio se metió entre sus nalgas en busca de su ano y cuando lo encontré empecé a frotarlo. Ella gimió en mi oído y me dijo… “cariño, la tienes bien gorda, como me gustan, hoy te pertenezco y debemos desquitarnos”.
Tenía la pinga durísima y quería comerme ya esas tetotas, pero como cuando algo te gusta tanto, lo dejas como plato de fondo, entonces ella se separó, retrocedió un par de pasos. Yo me quité la camisa y me bajé la ropa interior hasta quedar completamente desnudo. No había reparado en los otros dos, el ex de Lucero se sobaba la verga sobre el pantalón y ella se puso de pie, intentó quitarse el vestido pero no pudo, entonces él se puso de pie. Primero se desnudó por completo, dejando escapar nuevamente esa enorme verga. Lucero de espaldas a él no la vio, él se acercó por detrás, lo suficiente para bajarle la cremallera del vestido hasta la cintura, tocando creo yo más de lo necesario y agarrándola fuerte de la cadera. Ella retrocedió un paso y cuando cayó el vestido ví que la verga de su ex le golpeaba la espalda baja, entonces ella llevó una mano hacia ella hasta tocar el glande, empapándose del pre seminal que ya goteaba, lanzó un gemido algo modesto, sobó un poco la verga y cerró los ojos, mientras la flaca le decía… “suficiente perra!, siéntese cada uno en su sitio”, pensé yo! Que tipa para dominarnos así. Lucero soltó la verga de su ex, terminó de desvestirse y cada uno se sentó en su lado.
La flaca me miró a los ojos, llevó sus manos a sus hombros y con una mirada arrecha, completamente entregada y mordiéndose el labio, deslizó las tiras del vestido por sobre los hombros hasta que cayó al suelo, lentamente puesto que esos senos enormes y parados hicieron más larga la caída. Un unísono.. Miiieeeerdaaa! Se oyó en la habitación, Lucero y yo mirábamos admirados aquel cuerpo perfecto. Que bruta para tener esas tetas! Pensé, eran enormes, redondas, cargadas, con la piel firme y recogida hacia arriba, sus aureolas eran claras y grandes, acorde con el tamaño de los senos que las contenían y sus pezones….dios! eran duros!, erectos! Ni muy grandes para parece raros, ni muy pequeños para que se pierdan en esa inmensidad... simplemente perfectos. La caída de sus tetas era natural y llegaba bastante abajo, pero por el tamaño no por la flacidez. Vientre plano, cintura delgada, caderas normales, ni anchas ni muy angostas, estaba totalmente depilada abajo, lo que me sorprendió excitó aún más. Se dio una pequeña vuelta para mostrar todo su material y pude ver esas piernas tonificadas, seguro haría mucho ejercicio. Su trasero, si bien no era el tarraso descomunal de Lucero, estaba por encima del promedio, Nalgas carnosas, firmes, duras y bien ejercitadas. Toda su piel parecía tersa y en ese momento incluso me pareció que brillaba.
Lucero soltó un “qué pendejo eres!” mientras miraba a la flaca, no sabía si me lo decía a mí por lo que estaba apunto de disfrutar pero a pedido de ella, o a su ex, como reclamándole que se encontró un cuerpo perfecto y le sacó la vuelta disfrutando de él. Aún embobado por lo que veía, decidí caminar hacia ella, sólo un par de pasos nos separaban, entonces sentí que me cogían la pierna, era Lucero, que sentada muy cerca de mí se estiró para detenerme. Giré para mirarla a los ojos, como diciéndole, que eso había sido lo que ella quería, sólo duró un momento, me soltó y me dejó ir.
Me acerqué a la flaca y le pegué un chape húmedo y caliente, la cogí detrás del cuello con una mano y la otra se iba hacia una de sus tetas, ya quería devorarla ahí mismo, luego con mis dos manos fui amasando, sobando y apretando cada una de sus tetazas, hasta que ella puso un dedo en mi boca y fue bajando sus besos hacia mi pecho, vientre y finalmente mi verga. Giré nuevamente a verlos, Lucero nos miraba con atención mientras llevaba su mano a su entrepierna y su ex se masturbaba lentamente. La flaca me dio uno besos y lametones por todo el tronco y glande de la verga, luego se acomodó mejor, se separó ese par de melones que tenía, me escupió la pinga y se acercó rodeando mi verga con sus tetas. Era una imagen descomunal desde arriba, ella miró hacia arriba, se mordió el labio y antes de empezar su felación giró y se dirigió a Lucero… “que te quede claro que tú empezaste esto, si tú no has sido capaz de dejar de pensar en la verga de ese idiota a tu lado, créeme cuando te digo que tu noviecito no podrá dejar de pensar en la manada que estoy a punto de hacerle. He estado con muchos hombres y jamás he encontrado uno que no haya querido repetir una chupada de verga conmigo”.
Lucero no dijo nada, yo volví a mirar a la flaca, ella me miró con lujuria y empezó a hacerme una paja de campeonato.
Continuará…
 
.. . “crees que no te vi mirarle las tetas a ella? Crees que no me di cuenta que le comías el escote con la mirada? Sé que tú la deseas, siempre dijiste que tengo el mejor culo que te has tirado, pero puedo deducir que jamás has tenido unas tetas como las de ella, así como yo nunca he sentido una verga como la de él, hazlo por nosotros, no por ellos!”... Así como yo... Que wevada la flaca para decir eso, hazlo x nosotros Wtf igual sigue con el relato cofra que estoy más enganchado
 
Que tal morbo csm, me metí tanto en el relato que lucero me dio cólera tb, pero leo ahora que tu le darás a sentir lo mismo que te hizo ella, la verdad una de mis fantasías es pues un trío con dos mujeres no con una mujer y dos hombres jajaja
 
Que tal morbo csm, me metí tanto en el relato que lucero me dio cólera tb, pero leo ahora que tu le darás a sentir lo mismo que te hizo ella, la verdad una de mis fantasías es pues un trío con dos mujeres no con una mujer y dos hombres jajaja
Gracias por el interés cofra, creo que ese trío MHM lo queremos todos
 
Continuación..

La flaca estaba realmente arrecha, su mirada era de perra total. Con sus manos cogió cada uno de sus melones y los dirigió y apretó rodeando mi verga que estaba durísima y apuntando al techo. Al inicio sólo me apretó la pinga como cobijándola, apretaba y soltaba, quería que esto durara y yo lo recordara por siempre, estaba seguro que no querría que fuera algo rápido, aunque yo andaba con la leche alborotada en los porongos.

Hizo un esfuerzo para lamerme el glande que se perdía entre ese par de tetazas colosales. Empezó a subir y bajar mientras apretaba lo más fuerte que podía y mi glande chocaba su lengua y labios. La sensación de ser rodeado por esos mangasos tan gordos, tan firmes, tan parados, era alucinante. Me tenía que aguantar mucho para no descargarla toda. No sé cuanto tiempo estuvo así, bajando y subiendo bastante lento pero muy apretado, de rato en rato escupía entre sus senos para que mi verga se deslizara con mayor facilidad, por ratos soltaba y por ratos apretaba mucho más.

Yo estaba en la gloria, con los ojos entre cerrados, apenas mirándola que por momentos miraba hacia arriba como preguntando si me gustaba y yo sólo asentía con la cabeza. No podía evitarlo, mi pingan empezó a moverse y reaccionar, yo iba sintiendo que estaba llegando al climax. Entonces la flaca se detuvo, dejó caer sus tetas a los lados, era arrechante ver cómo le rebotaban en el pecho. Metió su mano por debajo para agarrarme las bolas y me metió un apretón a la próstata y un par de cachetadas a mi glande, que me hicieron bajar del éxtasis y aterrizar nuevamente en frente suyo, de hecho la conocía muy bien.

Ahora recogía con uno de sus brazos las dos tetas para hacerlas ver más hinchadas, más apetecibles. Con la otra mano me agarró la herramienta y empezó a masturbarme con más fuerza y velocidad, mientras se metía el glande en la boca. Succionaba como una aspiradora y con la lengua daba lametones a mi glande. Me apretaba fuerte la verga, se la sacó de la boca, me miró y dijo… “Uuuffffff la tienes bien rica cariño, me gustan gordas como la tuya, me encanta recorrer tus venas hinchadas con mi lengua!!”. Se lo metió de nuevo en la boca y ahora empezaba a gemir, yo hacía lo propio.

Había olvidado por un rato que no estábamos solos, giré hacia Lucero y ella no perdía detalle de lo que me hacía la flaca, pero ahora tenía la mano sobre la pierna de su ex. Él seguía pajeándose, ahora más desesperado, sin decir nada. Lucero le sobaba la pierna desde la rodilla hasta muy cerca de la entrepierna, pero según veía, no se atrevía a tocarlo aún. Volví a mirar a la flaca, que también los veía, ella no dijo nada. Pero se acomodó nuevamente para ofrecerme ese par de melones, me rodeó otra vez la verga, que estaba recontra mojada por la chupada que me había dado y me dijo… “ahora quiero que me caches este par de tetas con toda tu fuerza. Viólame las tetas, apodérate de ellas, haz lo que quieras, te las entrego para que las disfrutes. De ahora hasta que lo decidamos los dos, no te diré que no a nada!”. ! Yo estaba en las nubes, agarré sus tetas y las apreté hacia mi pinga, ella llevó sus manos a su culo y a su clítoris, sus hermosos senos no me dejaban ver más abajo, pero imaginé que se estaba masturbando y tal vez metiéndose un dedo en el culo.

La cogí con fuerza y empecé a cacharla, subiendo cada vez más de intensidad, bajaba mi pinga todo lo que podía y se la metía hacia arriba, a través de ese canal que formaban sus montañas de carne dura y firmes, naturales. Yo estaba arrechísimo, metía y sacaba sin compasión, ella tenía los senos rojos de tanta fricción y continuaba escupiendo su canal todo lo que podía, mi glande entraba en su boca cuando llega arriba y ella lo lamía, lo besaba lo mojaba como podía, gemía muy fuerte y pedía más… “sí, así dame! Dame así!, entra fuerte, aprétame las tetas! Me estás violando perro! Haz lo que quieras! Cáchame las tetas así!”. Entonces se volteó hacia Lucero y le dijo.. “perra, que rica tiene la pinga tu noviecito!, me está desgarrando la piel de las tetas! Esto es algo que tú jamás sentirás con esos limones que tienes!”, nadie más decía nada.

Yo estaba concentrado en tirarme esas tetas, pero la flaca quería provocar más a Lucero. Así que volteó hacia ella y le dijo… “vamos! Agárrale la verga a ese idiota! Cógele la pinga, eso es lo que quieres no? Eso es lo que deseas no? No me importa ahora y creo que a tu noviecito tampoco, pero eso es lo más que tendrás!”. Yo levanté la mirada, ví como Lucero se acercaba a su ex, le agarraba la verga con las dos manos, se arrodilló frente a él y empezó a masturbarlo. Podía ver que ella se acercaba para chuparle la verga pero él no la dejaba, eso me sorprendió pero me aliviaba también. Lucero estaría muriéndose de ganas de meterse eso a la boca seguramente, que se lo restringieran la estará haciendo sufrir seguramente.

La flaca me aguantaba como profesional, yo sentía que ya no podía más, empecé a gemir y gemir en señal que me venía. La flaca se hizo a un lado, me agarró la verga con las dos manos, me sostuvo los huevos con una y me pajeaba con fuerza con la otra, mientras me succionaba el glande como queriendo ordeñarme. Ya no aguantaba más y cuando empecé a soltar mi semen, la flaca se echó para atrás ligeramente, algo de mi leche entró en su boca, el resto se lo tiré sobre las tetas, ella misma dirigió las descargas hacia sus senos y aún cuando había terminado de vaciarme del todo, seguía sobando mi pinga por todas sus tetas, por sus aureolas, sus pezones y sus globos de carne.

Yo estaba relajadísimo, había descargado con ganas un montón de lecha caliente y espesa sobre esos pechos hermosos y arrechantes. Entonces la flaca se paró, me dio un beso en la boca, se fue al sillón y apartó a Lucero de su ex, le agarró la verga y estando así con toda mi leche en la boca y el pecho, empezó a chuparle la pinga con tanta fuerza que sólo un momento después el tipo se descargó también en su boca y ella se tomó todo, diciendo… “uuuufffff que ricas leches me he tomado, estos demasiado arrecha y quiero más”. Se volvió a poner de pie, su flaco se acomodó en el sillón, algo más relajado y Lucero con cara de incertidumbre se quedó sorprendida, seguramente ella quería esa leche y querría también llegar al orgasmo, pero la flaca no la dejó, se acercó a mí nuevamente, que seguía de pie y me dijo al oído.. “cariño, me encantó tu leche, quiero que me des mucho más. Hoy voy a ser tu perra cachera por todo el tiempo que quieras, voy a limpiarme y vengo por ti, porque esto no ha terminado…y ahora me toca venirme a mí” …
 
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