Llevo concurriendo a este night aprox de 3 años esporadicamente , cuando aun era de un solo piso y la entrada estaba 25 y el polaco 50 ahi conoci diversas kines realmente bonitas , paloma creo que esos fueron sus mejores años quisas en ese entonces el rostro mas bonitos de las cucas pero hoy no por que ahora usa demasiado maquillaje para tapar las amanecidas encima
Cuántos recuerdos me trajo este post...
Si bien no soy un cucardero antiguo y empedernido, hace aproximadamente cinco años fue la primera vez que fui a las cucardas.
La primera vez que llegue, todo era pequeño pero bien arreglado. No había aire acondicionado y el calor se mezclaba con mis impulsos, y a pesar que en mis primeras incursiones me levantaba chicas bonitas, en esos tiempos no preguntaba nombres, pero le sacaba el jugo a cada una de las bandidas que me atendian, tanto así que llegue a hacerme pata de varias flacas y nunca tuve que pagar ni un sol más para que me atiendan bien.
Ultimamente de las flacas bonitas que he visto por las cucardas, creo que de forma integral (cuerpo y cara) están en primer lugar angelin y muñeca (la flaca colombiana de cabello lacio negro).
Con estas dos chicas he tenido anécdotas que si las llegara a contar, me reconocerían, ya que tengo conocimiento que revisan el foro como otras flacas de las cucardas.
Pero si vamos a hablar de la mejor flaca que he visto y para mi es una top de la cual lamento no tener su número ni su correo, es de SANDRA.
La encontré un sábado en la noche de noviembre o diciembre del año pasado y me deslumbró. Recuerdo que llegué un poco cansado del trabajo a la cucardas como a las siete de la noche, e inmediatamente me llamó la atención que una puerta (la que se ubica al frente del escenario del primer piso) se abria y se cerraba inmediatamente.
Como buen cazador, decidí esperar recuperar fuerzas y estuve caminando buscando a karina, una morochita de la selva que también esta buenaza y a la cual no veo hace un buen tiempo. Y como no la encontraba, me senté a tomar un trago conversando con un conocido al cual encontré en el bar; hasta que de un momento a otro apareció ella en su puerta, una preciosa pucallpina de piel blanca, de 23 años y de un metro sesenta, que tenía las medidas perfectas y de adorno sensual unas orejas de conejita en la cabeza.
Ya eran aproximadamente las una y media de la mañana y la mayoria de personas estaban cansadas y se veían pura gente en espera de recuperar fuerzas y/o tomando con sus conocidos, mientras a paso lento me acerqué a ella. La tome de la mano, que dicho sea de paso era bien delicada, y le dije como se llamaba, me dijo que Sandra y no le pregunté nada más.
Una vez adentro la desvestí lentamente, mientras le pregunté de donde era, su edad y que música le gustaba. Acaricié sus cabellos y luego puse mis dedos por sus labios hasta dibujarle una sonrisa. Pasaron apenas unos minutos y la flaca comenzo a darme unas caricias bravazas mientras las palmas de sus manos y las mías estaban una con otra. Hicimos como cinco poses y en todas ellas, procuré aguantar mis impulsos y hacerla seguir mi ritmo para que ese momento mágico no acabe. Fueron veinte minutos eternos y gloriosos, hasta que termine en el clásico misionero.
Una vez que termine y mientras me cambiaba, seguía conversando con la flaca que para mi era la más linda que he visto en toda mi vida. Una vez que estuve listo, ella me arregló la corbata y me dió un beso que nos volvió a calentar a ambos, y con una sonrisa coqueta me dijo que había sido la primera vez que había sentido cosquillas cuando hacía el amor. Le dije que tal vez sea por mi barbilla, y se sonrió, y correspondí el beso con otro mucho más intenso tomándola suavemente de la nuca, hasta que pude ver que ella cerró los ojos y comenzó a quitar mi correa con su mano derecha. Le dije que ya no tenía dinero, pero ella me dijo que el servicio "era completo".
Y bueno ante la insistencia, mis ansias y recordando que tenía un preservativo en mi billetera vacía, iniciamos el segundo round, que sin duda ha quedado grabado en mi memoria como uno de los mejores encuentros que he tenido. Un amigo, me dijo que la flaca solamente trabajó tres días en las cucardas, pero yo aún a veces cuando asisto, doy paseos completos al primer y segundo piso esperando encontrarla.
Y si algún día la ven por las cucardas, no olviden en mandarme un mensaje privado. Estaré eternamente agradecido al que me informe sobre ella.