alberto112
Cabo
Parte 9
Daniela tenía la mirada fija en Juan mientras se bajaba el vestido y luego procedía a desarrarse la parte superior del bikini. Me sorprendió su poca timidez, no sé si sería producto del alcohol o esta situación de domincación había despertado algo en ella. Se quedó totalmente desnuda en frente del jacuzzi, Juan estaba recorriendola con la mirada de arriba a abajo y la verdad yo también, esta era la segunda vez que la tenía desnuda cerca de mí.
- "Jenny parate a su costado" ordenó Juan. Jenny no perdió tiempo y salió del jacuzzi para pararse al costado de Daniela.
- "Wow, qué ricos cuerpos tienen ambas, no crees Alberto?"
- "Claro que si, la vamos a pasar muy rico todos" dije muy excitado
Y es que realmente el cuerpo de ambas era muy excitante, más aun cuando las teníamos una al lado de la otra para poder comparar. Las dos de cuerpo totalmente natural. Ambas tenía un cuerpo tonificado, se notaba que en el caso de Jenny era por su afición al gimnasio, mientras que en el caso de Daniela era simplemente producto de la edad y que realmente se cuidaba. Las tetas de Daniela eran sin duda más grandes que las de Jenny, pero a pesar de eso eran firmes y adornadas con unos pezones rosados hermosos de aureolas medianas. La cola de ambas era respingada y paradita, a pesar de sus buenas tetas, Daniela no era plana por atrás realmente tenía bueno culo. Jennifer en cambio tenia un culo un poco más pequeño, pero super duro por el gimnasio. Y finalmente las conchitas... la de Jennifer la he gozado muchas veces y tengo claro que tiene los labios un poco salidos, si bien está más trajinada de todas formas aprieta y siempre la tiene muy bien afeitada, no al 100% porque siempre se deja un rayita de pelos arriba. La de Daniela era territorio nuevo para mi, la vi desnuda el día anterior en la ducha pero no me dejó apreciar ese manjar a detalle y ahora tampoco la tenía tan cerca, solo podía saber que estaba 100% depilada, sin ningún vello.
Juan seguía dentro del jacuzzi observandolas, mientras que yo estaba más hacia el costado de ellas por lo que podía apreciar como la mano de Jenny le sobaba la espalda a Daniela suavemente e iba bajando hasta su cola, pasandole la mano por sus nalgas. Yo sabía las intenciones de Jenny, ya más de una vez me había dicho que quería experimentar con una chica, lo había hecho hace muchos años y fue una experiencia agredable. Además, sabía que Daniela le parecía sumamente atractiva y el hecho de que sea chibola inocente era aun más excitante para todos. Para mi sorpresa, Daniela no rechazó el contacto y se quedó inmovil.
Toda esta imagen de ambas chicas paradas desnudas pasó en pocos minutos; sin emabargo, para mi se hizo eterno admirar esos bellos cuerpos, invitando al placer y a disfrutar. Mi momento de fantasía fue interrumpido por Juan quien se paró subitamente del jacuzzi e invitó a ambas chicas a meterse con él. Cuando se levantó, se pudo apreciar la excitacion del viejo y debo reconocer que esa verga no tenía nada de pequeña. Yo la tenía más larga de todas maneras, él tendría cerca de 15cm aprox, pero la tenía demasiado gruesa y eso la hacía muy imponente. Fuera de bromas parecia esas latas de gaseosa.
Las chicas se impactaron al verlo erecto, mientras Jenny dio un paso hacia adelante para regresar al jacuzzi, Daniela más bien dio un paso hacia atrás cuando vio al viejo con la verga parada invitandola a acercarse. Yo no perdí tiempo, me saqué rápidamente la ropa de baño y me acerqué a Daniela, tanbién con la verga apuntando al techo. La agarré por la cintura y la acompañé al jacuzzi, eso la hizo sentir en más confianza y nos metimos los cuatro.
El jacuzzi era espacioso así que estabamos cómodos, cada uno de los hombres estabamos uno frente al otro con las mujeres a nuestro costado. Juan había abierto una botella de champagna así que continuamos tomando unos tragos, pero en una situación más caliente. Por momentos Juan y Jenny se ponían a chapar y se observaba la mano de Juan agarrandole las tetas. Hasta ahora el viejo se estaba centrando en Jenny y me estaba dejando a Daniela para mi solo. A pesar que se le notaba menos tímida, podía notar que no estaba del todo cómoda con la situación. Mientras ellos chapaban, nosotros conversábamos. Yo la tenía abrazada por la cintura debajo del agua y por momentos le sobaba la pierna, cerca al culo. Ella por su lado, por momentos me agarraba la pierna, pero timidamente aun.
En un momento, veo que Juan le decía algo al oído a Jenny y ella le contestó:
- "Sientate en el borde que quiero probar esa verga gorda"
Rápidamente Juan se levantó, se sentó al borde del jacuzzi y abrió un poco las piernas. Su verga emergió del agua a pocos centímetros de todos nosotros y Jenny se la metió a la boca sin dudarlo. Era evidente que no le entraba, hacia un esfuerzo por bajar lo que podía, pero era muy gruesa así que se dedicó principalmente a chuparle la cabeza. Juan estaba gozando y era claro que Jenny ya estaba totalmente inmersa en la situación y dispuesta a gozar. Además, ya nos habíamos tomado varias cervezas y un par de botellas de champagna así que todos estabamos bien picados. Fue excitante ver cómo Jenny le chupaba al pinga a ese viejo arrecho, los estuvimos mirando por un par de minutos hasta que ya no podía más. Le dije a Daniela al oído:
- "Creo que ya es hora de hacerte mia" le dije y la agarré fuerte de la cintura y la trepé encima mio.
Ella dio un suspiro, pero colaboró en acomodarse. Mis manos estaban alrededor de su cintura y rozando sus nalgas. Mientras que sus brazos se posaron alrededor de mi cuello. Nuestros labios estaban a escasos centímetros, nos estabamos mirando a los ojos mientras en paralelo escuchabamos los gemidos de Juan y Jenny en el oral. No perdimos más tiempo y nos dimos un beso largo y apasionado. Yo le agarraba cada vez más fuerte las nalgas mientras que ella se movía arriba y abajo, mi verga no estaba adentro pero sí rozaba con su clitoris y ella lo estaba disfrutando.
- "Tócame todo lo que quieras, hoy día seré toda tuya sin remordimientos" me dijo entre besos
Daniela tenía la mirada fija en Juan mientras se bajaba el vestido y luego procedía a desarrarse la parte superior del bikini. Me sorprendió su poca timidez, no sé si sería producto del alcohol o esta situación de domincación había despertado algo en ella. Se quedó totalmente desnuda en frente del jacuzzi, Juan estaba recorriendola con la mirada de arriba a abajo y la verdad yo también, esta era la segunda vez que la tenía desnuda cerca de mí.
- "Jenny parate a su costado" ordenó Juan. Jenny no perdió tiempo y salió del jacuzzi para pararse al costado de Daniela.
- "Wow, qué ricos cuerpos tienen ambas, no crees Alberto?"
- "Claro que si, la vamos a pasar muy rico todos" dije muy excitado
Y es que realmente el cuerpo de ambas era muy excitante, más aun cuando las teníamos una al lado de la otra para poder comparar. Las dos de cuerpo totalmente natural. Ambas tenía un cuerpo tonificado, se notaba que en el caso de Jenny era por su afición al gimnasio, mientras que en el caso de Daniela era simplemente producto de la edad y que realmente se cuidaba. Las tetas de Daniela eran sin duda más grandes que las de Jenny, pero a pesar de eso eran firmes y adornadas con unos pezones rosados hermosos de aureolas medianas. La cola de ambas era respingada y paradita, a pesar de sus buenas tetas, Daniela no era plana por atrás realmente tenía bueno culo. Jennifer en cambio tenia un culo un poco más pequeño, pero super duro por el gimnasio. Y finalmente las conchitas... la de Jennifer la he gozado muchas veces y tengo claro que tiene los labios un poco salidos, si bien está más trajinada de todas formas aprieta y siempre la tiene muy bien afeitada, no al 100% porque siempre se deja un rayita de pelos arriba. La de Daniela era territorio nuevo para mi, la vi desnuda el día anterior en la ducha pero no me dejó apreciar ese manjar a detalle y ahora tampoco la tenía tan cerca, solo podía saber que estaba 100% depilada, sin ningún vello.
Juan seguía dentro del jacuzzi observandolas, mientras que yo estaba más hacia el costado de ellas por lo que podía apreciar como la mano de Jenny le sobaba la espalda a Daniela suavemente e iba bajando hasta su cola, pasandole la mano por sus nalgas. Yo sabía las intenciones de Jenny, ya más de una vez me había dicho que quería experimentar con una chica, lo había hecho hace muchos años y fue una experiencia agredable. Además, sabía que Daniela le parecía sumamente atractiva y el hecho de que sea chibola inocente era aun más excitante para todos. Para mi sorpresa, Daniela no rechazó el contacto y se quedó inmovil.
Toda esta imagen de ambas chicas paradas desnudas pasó en pocos minutos; sin emabargo, para mi se hizo eterno admirar esos bellos cuerpos, invitando al placer y a disfrutar. Mi momento de fantasía fue interrumpido por Juan quien se paró subitamente del jacuzzi e invitó a ambas chicas a meterse con él. Cuando se levantó, se pudo apreciar la excitacion del viejo y debo reconocer que esa verga no tenía nada de pequeña. Yo la tenía más larga de todas maneras, él tendría cerca de 15cm aprox, pero la tenía demasiado gruesa y eso la hacía muy imponente. Fuera de bromas parecia esas latas de gaseosa.
Las chicas se impactaron al verlo erecto, mientras Jenny dio un paso hacia adelante para regresar al jacuzzi, Daniela más bien dio un paso hacia atrás cuando vio al viejo con la verga parada invitandola a acercarse. Yo no perdí tiempo, me saqué rápidamente la ropa de baño y me acerqué a Daniela, tanbién con la verga apuntando al techo. La agarré por la cintura y la acompañé al jacuzzi, eso la hizo sentir en más confianza y nos metimos los cuatro.
El jacuzzi era espacioso así que estabamos cómodos, cada uno de los hombres estabamos uno frente al otro con las mujeres a nuestro costado. Juan había abierto una botella de champagna así que continuamos tomando unos tragos, pero en una situación más caliente. Por momentos Juan y Jenny se ponían a chapar y se observaba la mano de Juan agarrandole las tetas. Hasta ahora el viejo se estaba centrando en Jenny y me estaba dejando a Daniela para mi solo. A pesar que se le notaba menos tímida, podía notar que no estaba del todo cómoda con la situación. Mientras ellos chapaban, nosotros conversábamos. Yo la tenía abrazada por la cintura debajo del agua y por momentos le sobaba la pierna, cerca al culo. Ella por su lado, por momentos me agarraba la pierna, pero timidamente aun.
En un momento, veo que Juan le decía algo al oído a Jenny y ella le contestó:
- "Sientate en el borde que quiero probar esa verga gorda"
Rápidamente Juan se levantó, se sentó al borde del jacuzzi y abrió un poco las piernas. Su verga emergió del agua a pocos centímetros de todos nosotros y Jenny se la metió a la boca sin dudarlo. Era evidente que no le entraba, hacia un esfuerzo por bajar lo que podía, pero era muy gruesa así que se dedicó principalmente a chuparle la cabeza. Juan estaba gozando y era claro que Jenny ya estaba totalmente inmersa en la situación y dispuesta a gozar. Además, ya nos habíamos tomado varias cervezas y un par de botellas de champagna así que todos estabamos bien picados. Fue excitante ver cómo Jenny le chupaba al pinga a ese viejo arrecho, los estuvimos mirando por un par de minutos hasta que ya no podía más. Le dije a Daniela al oído:
- "Creo que ya es hora de hacerte mia" le dije y la agarré fuerte de la cintura y la trepé encima mio.
Ella dio un suspiro, pero colaboró en acomodarse. Mis manos estaban alrededor de su cintura y rozando sus nalgas. Mientras que sus brazos se posaron alrededor de mi cuello. Nuestros labios estaban a escasos centímetros, nos estabamos mirando a los ojos mientras en paralelo escuchabamos los gemidos de Juan y Jenny en el oral. No perdimos más tiempo y nos dimos un beso largo y apasionado. Yo le agarraba cada vez más fuerte las nalgas mientras que ella se movía arriba y abajo, mi verga no estaba adentro pero sí rozaba con su clitoris y ella lo estaba disfrutando.
- "Tócame todo lo que quieras, hoy día seré toda tuya sin remordimientos" me dijo entre besos