Placer 20
Cabo
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Me convocaron para trabajar en una municipalidad, increíblemente como Asistente de una Gerencia, tengo varios años de experiencia incluso como Gerente, pero como chamba es chamba acepté.
Llego al trabajo y resulta que mi jefa era aún una estudiante universitaria, en política se manejan los favores y resulta que este era uno de esos casos, la Gerenta era casi como 20 años menor que yo y por su juventud estaba en la plenitud de su vida, una niña de pelo lacio, de aprox. 1.68 cm (yo mido 1.78) unas lindas caderas y un pecho mediano pero muy marcado con algunas prendas porque sabía vestir bien.
Resulta que varios asuntos de la oficina los manejaba mejor que ella, porque la experiencia no se gana de un día para otro y se notaba en la labor diaria, habían oportunidades que ella se restringia a pedírmelo, pero cierto día le genere confianza y entre diálogos le hice saber que no dude en pedirme el apoyo que fuera necesario, que para eso estaba y que por último ambos aprenderiamos, eso parece haber roto el hielo, porque a los días intentaba hacerme bromas como más íntimas (que porqué no salia a las fiestas - porque era mandarina o demasiado mandado por mi mujer) -pero es que en verdad mi tiempo de diversión ya había pasado y en mi época de juventud lo había hecho bien, pero además estaba por culminar mi segunda carrera universitaria y eso me tomaba dedicación a la Tesis y esas cosas-, cierto día había que hacer lo informes de fin de año y teníamos que quedarnos haciendo sobretiempo por las noches y aun así no se avanzaba, habían tardes que yo llevaba la cena y en otras lo hacía ella, trabajamos a puerta cerrada, teníamos un hervidor para hacer el café, resulta que en una de esas noches, la noto llorosa en su escritorio (frente al mio) trato de hacerle sentir bien y la abrazo y ne dice que su novio (al que yo no conocía) le terminó porque no le dedica tiempo (y era obvio porqué por su cargo ella estaba mucho tiempo dedicada a la labor) y que incluso le habia tenido celos con los compañeros de trabajo entre ellos conmigo. Le di ánimos y consejos de buena intención, que el mundo no se acababa por eso que ella era joven y muy guapa y cosas así, que su proyecto de vida le traería muchas oportunidades, no intentaba caerle bien, porque ni siquiera imagine tener su admiración y menos otras intenciones, porque por su edad y guapura podría tener al quien quisiera de hombre, pero luego me hablo y me dijo que mejor ella sería mi asistenta y que ella me admiraba, por mi experiencia y mi dedicación a mi familia, y cuando menos me di cuenta me besó, a lo que inicialmente no pude reaccionar, pero en cuestión de segundos la agarré del cuello con ambas manos y correspondí como debe responder un verdadero varón, pero a los segundos le pedí disculpas por lo sucedido, que no volverá a repetirse, tenía que manejarlo con prudencia porque hay cada cosa que se ve sobre todo en la cuestión pública, podía perder el empleo o hasta ser denunciado y es que no podía creer lo que podía haber captado su atención, en verdad era muy atractiva.
Pasaron los días y tuvimos que acudir a un compartir de un compañero de trabajo por su cumpleaños, una cena que había organizado la secretaria, cenamos y muchos se fueron y los pocos que no quedamos empezamos a bailar y brindar, y ella me llegó a decir al oído "te quedas o te vas, o sino también para irme", le dije que me quedaba, a los pocos minutos coincidimos en los servicios higiénicos y me dice que porque le huía que sentía que ya nada era igual desde el suceso, le dije que era su percepción, pero que yo la respetaba, hablamos cosas así y en eso cómo dos polos de un imán nos atraimos y nos besamos frenéticamente.
Esa misma tarde mi esposa había hecho un viaje de trabajo y se fue con mis dos hijos, así que no había preocupación por llegar rápido a casa, me quedé a seguir brindando, pero tenía que controlarme porque el pueblo era pequeño y de borracho podía hacer cualquier cosa, en eso como a las 10 pm me llama con la mirada y me lleva cerca a la cocina donde ya no había nadie, porque ya la señora atendía en el bar. Me dice que le atraigo y que no piense ser utilizado que muy pronto ella se iría del trabajo porque priorizará su estudio y que alguien de la municipalidad le había condicionado su compañía íntima y que ella no aceptaba eso, para eso ella llevaba un pantalón jeans de esos que están de moda (anchos y rasgados) un polito de algodón con encajes en los hombros y una casaquita de cuero abierto, y el pelo suelto, se le veia especialmente guapa; al tomarla de la cintura no pude resistirme a su belleza y juventud y la besé, ella me dice "jamás antes me habían besado así" y empecé a recorrer con mi mano su cuerpo, como queriendo encontrar algo.
Estuvimos casi como media hora así, hasta que ella me deja ahí exhausto y vuelve a la fiesta y todos pensaban que ya nos habíamos ido, ella saca cara por mi y me disculpa ante los demás, y también se despide, por un momento pensé que se iba dejándome ahí, llegó al rato y con un me dice para salir por la puerta lateral y nos fuimos a su cuarto que quedaba a unas cuantas casas de ahí (era la unica en el primer piso) habían más inquilinos, pero del segundo piso para arriba.
Apenas llegamos al cuarto como dos adolescentes nos besabamos y nos desvestimos yo sacaba lentamente ese pantalon que ella sabia que me atraía porque las veces que iba puesto a la oficina seguro ella notó que atraía mi mirada, para mi era un lujo tocar su cuerpo desnudo, sobre todo contemplar sus caderas con su piel blanquita y bien cuidada, su rico perfume, empecé a chupar y lamer sus senos con sumo cuidado y delicadeza y eso a ella se notaba que le excitaba porque cerraba sus ojos y se arqueaba aún encima de mí.
No quise perderme ningún detalle y comencé a besar todo su cuerpo, sus pantorrillas, su muslo, su barriga, su cuello y nuevamente llegaba a sus labios para terminar en sus orejas a juguetear con mi lengua, mientras mi mano jugueteaba con su pelo y las de ella masajeaba toda mi espalda.
Llego al trabajo y resulta que mi jefa era aún una estudiante universitaria, en política se manejan los favores y resulta que este era uno de esos casos, la Gerenta era casi como 20 años menor que yo y por su juventud estaba en la plenitud de su vida, una niña de pelo lacio, de aprox. 1.68 cm (yo mido 1.78) unas lindas caderas y un pecho mediano pero muy marcado con algunas prendas porque sabía vestir bien.
Resulta que varios asuntos de la oficina los manejaba mejor que ella, porque la experiencia no se gana de un día para otro y se notaba en la labor diaria, habían oportunidades que ella se restringia a pedírmelo, pero cierto día le genere confianza y entre diálogos le hice saber que no dude en pedirme el apoyo que fuera necesario, que para eso estaba y que por último ambos aprenderiamos, eso parece haber roto el hielo, porque a los días intentaba hacerme bromas como más íntimas (que porqué no salia a las fiestas - porque era mandarina o demasiado mandado por mi mujer) -pero es que en verdad mi tiempo de diversión ya había pasado y en mi época de juventud lo había hecho bien, pero además estaba por culminar mi segunda carrera universitaria y eso me tomaba dedicación a la Tesis y esas cosas-, cierto día había que hacer lo informes de fin de año y teníamos que quedarnos haciendo sobretiempo por las noches y aun así no se avanzaba, habían tardes que yo llevaba la cena y en otras lo hacía ella, trabajamos a puerta cerrada, teníamos un hervidor para hacer el café, resulta que en una de esas noches, la noto llorosa en su escritorio (frente al mio) trato de hacerle sentir bien y la abrazo y ne dice que su novio (al que yo no conocía) le terminó porque no le dedica tiempo (y era obvio porqué por su cargo ella estaba mucho tiempo dedicada a la labor) y que incluso le habia tenido celos con los compañeros de trabajo entre ellos conmigo. Le di ánimos y consejos de buena intención, que el mundo no se acababa por eso que ella era joven y muy guapa y cosas así, que su proyecto de vida le traería muchas oportunidades, no intentaba caerle bien, porque ni siquiera imagine tener su admiración y menos otras intenciones, porque por su edad y guapura podría tener al quien quisiera de hombre, pero luego me hablo y me dijo que mejor ella sería mi asistenta y que ella me admiraba, por mi experiencia y mi dedicación a mi familia, y cuando menos me di cuenta me besó, a lo que inicialmente no pude reaccionar, pero en cuestión de segundos la agarré del cuello con ambas manos y correspondí como debe responder un verdadero varón, pero a los segundos le pedí disculpas por lo sucedido, que no volverá a repetirse, tenía que manejarlo con prudencia porque hay cada cosa que se ve sobre todo en la cuestión pública, podía perder el empleo o hasta ser denunciado y es que no podía creer lo que podía haber captado su atención, en verdad era muy atractiva.
Pasaron los días y tuvimos que acudir a un compartir de un compañero de trabajo por su cumpleaños, una cena que había organizado la secretaria, cenamos y muchos se fueron y los pocos que no quedamos empezamos a bailar y brindar, y ella me llegó a decir al oído "te quedas o te vas, o sino también para irme", le dije que me quedaba, a los pocos minutos coincidimos en los servicios higiénicos y me dice que porque le huía que sentía que ya nada era igual desde el suceso, le dije que era su percepción, pero que yo la respetaba, hablamos cosas así y en eso cómo dos polos de un imán nos atraimos y nos besamos frenéticamente.
Esa misma tarde mi esposa había hecho un viaje de trabajo y se fue con mis dos hijos, así que no había preocupación por llegar rápido a casa, me quedé a seguir brindando, pero tenía que controlarme porque el pueblo era pequeño y de borracho podía hacer cualquier cosa, en eso como a las 10 pm me llama con la mirada y me lleva cerca a la cocina donde ya no había nadie, porque ya la señora atendía en el bar. Me dice que le atraigo y que no piense ser utilizado que muy pronto ella se iría del trabajo porque priorizará su estudio y que alguien de la municipalidad le había condicionado su compañía íntima y que ella no aceptaba eso, para eso ella llevaba un pantalón jeans de esos que están de moda (anchos y rasgados) un polito de algodón con encajes en los hombros y una casaquita de cuero abierto, y el pelo suelto, se le veia especialmente guapa; al tomarla de la cintura no pude resistirme a su belleza y juventud y la besé, ella me dice "jamás antes me habían besado así" y empecé a recorrer con mi mano su cuerpo, como queriendo encontrar algo.
Estuvimos casi como media hora así, hasta que ella me deja ahí exhausto y vuelve a la fiesta y todos pensaban que ya nos habíamos ido, ella saca cara por mi y me disculpa ante los demás, y también se despide, por un momento pensé que se iba dejándome ahí, llegó al rato y con un me dice para salir por la puerta lateral y nos fuimos a su cuarto que quedaba a unas cuantas casas de ahí (era la unica en el primer piso) habían más inquilinos, pero del segundo piso para arriba.
Apenas llegamos al cuarto como dos adolescentes nos besabamos y nos desvestimos yo sacaba lentamente ese pantalon que ella sabia que me atraía porque las veces que iba puesto a la oficina seguro ella notó que atraía mi mirada, para mi era un lujo tocar su cuerpo desnudo, sobre todo contemplar sus caderas con su piel blanquita y bien cuidada, su rico perfume, empecé a chupar y lamer sus senos con sumo cuidado y delicadeza y eso a ella se notaba que le excitaba porque cerraba sus ojos y se arqueaba aún encima de mí.
No quise perderme ningún detalle y comencé a besar todo su cuerpo, sus pantorrillas, su muslo, su barriga, su cuello y nuevamente llegaba a sus labios para terminar en sus orejas a juguetear con mi lengua, mientras mi mano jugueteaba con su pelo y las de ella masajeaba toda mi espalda.
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