Lo que un hombre no encuentra en casa, lo busca en la calle...y la mujer también

adrianvelasquez

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‎16 Years of Service‎
Por años, la vida kine la he llevado solapa. Conocí a decenas de mujeres. Algunas de las que me arrepiento, pero algunas que son unas divas. Tal vez por eso me acostumbré a tirar con plata, y la primera vez que me ofrecieron sexo gratis con todo lo que quería, lo dudé.
Acostumbrado a grabar kines, mis secretarias me empezaron a gustar. Desarrollé mi gusto por las pantimedias, las adoro, y más cuando la dama tiene un tremendo rabaso. Mi última secre, que ahorita está de licencia, me contaba que varias veces habían querido levantarsela. La clásica. Pero un día, un colega mio, fuera de horas de trabajo, intentó llevarla a "comer". La mayor parte de MILFs se ufanan de eso, pero no. Esta vez no. Ella no atracó. Pasó una hora en las que me iba a casa cuando me llama.
-Por fa, puedes recogerme?
-Claro.
Dentro de mi me recordaba que No debo enamorarme de mi amante. Pero al recordar los besos negros que le zampo no la pensé dos veces. Tenía la verga erecta. Fumé unos cigarros en el carro mientras surcaba medio surco para llegar a la victoria.
Ella no había llegado a su casa. Estaba tomandose un café en la esquina. Le timbré desde el carro y ella me respondió que salía. Me vio, subio al carro, con el culaso que la caracterizaba y empezó a llorar.
-Tu colega me quiso tirar. Le dije que no. Se fue molesto. Y no quiero ir a mi casa. ¿Por qué tengo tan mala suerte en el amor?
-Pero tú eres una mujer excelente, perfecta. Si fuera tu marido te estaría dando todo el día. Te llevaría a pasear. Te mereces algo mejor.
-Es que él no me toca. No quiere sexo conmigo. Ya no me mira ningún hombre.
-Pero si tu eres una belleza. Mirate. Ojalá te mires como te miro.
La besé mientras le sobaba las tetas. me encanta cuando se le paran los pezones. La mano al culo. Lenguaso, y arrancar.
-¿A donde vas?
-Vamos al hotel.
-Pero tengo que ir a mi casa.
-Primero te mojas, una hora, y llegas a tu casa a las 8. Dices que no pasaba el carro.
Ella sollozaba porque en el fondo quería que se la tiren. Quería que me la tire. Es que ellas escogen. Y era cierto. Su marido no la tocaba. El pata es recontra estirado. No tiene plata pero es soberbio. Tiene un tatuaje en el brazo. Estuvo en un penal (le puede pasar a cualquiera), pero no tiene trabajo. Ella lo mantiene. Tienen tres hijos juntos. Yo me gané cuando en una fiesta de su barrio, la llevé hasta su casa, y se le acercaron dos vecinos a querer darle. No los separé pero me puse como chaleco. Su marido estaba ebrio en la escalera de la quinta. La moví para que no lo toque pero ella me dijo que la acompañe para darme "unos papeles". Subí, pensando encontrar a sus hijos en la casa. No estaban. Al entrar, ella llamó en voz alta pero nada. Giró y me chapó mientras le metía mano a la raja y al culo. Entonces le alcé la falda, le moví el calzón y empezamos a tirar en su casa. Ella abría la boca gimiendo. estaba caliente. Yo más. Pero tocaron la puerta. Eran sus hijos. Esconder la verga sin que haga carpa es dicícil. Cogí un folder y me fui. Los chibolos ingresaron. Al bajar, esquivé a su marido.

Esta vez, enrumbabamos al Glamour. Caleta. Ella me sobaba la verga. Bajé, pero la puse adelante para disimular. Al subir, le metí los dedos en el jean. Qué importa. Me gusta verla gemir.
Lo que hicimos lo saben todos. Las fotos están ahí. Pero al terminar el polvo, ella me dijo que le gustaba que la desee.
-Es rico, doctor. Muy rico. Sé que me mira el culo.- me la chapé.
-Y como no verte si eres riquísima. - le hice una sopa al paso. Su beso negro.-Apuesto que tu marido no te besa el culo.
-No. No le gusta. - me miró a los ojos y me besó - pero usted es el primero al que le di mi culito. Nadie lo ha probado.
-No me dijgas "doctor", trátame de "tú".
-No puedo. Mejor así.

Luego lo volvimos a hacer, y nos duchamos. La paletee, y nos fuimos a su casa. Llegó a las 9pm. D
-Diles que fue el trafico.

Al día siguiente, vi pasar a su marido. Ella llegó más empinada que nunca, pero me acerqué para decirle, que no se ponga tacos hoy.
-No muestres mucho. No sea que el huevón de mi colega piense que le estas coqueteando.
Ella volteó y me dijo:
-¿Celoso?
 
Grande compañero... haciendo justicia a las féminas... siga beneficiando... es un deber humanitario que todo hombre debe cumplir
 
Estimado, cifra me gustó mucho su relato, una combinación de análisis de la situación y aprovechar los momentos. Gracias por compartirlo.
 
Interesante relato mi estimado, está para más. Y no se olvide de las fotos.
Y el concepto de su título es parecido al que tengo y es lo que siempre le digo a mí pareja:
“Si no encuentro comida en casa la busco en la calle”.
 
Gratamente sorprendido con tu relato y la historia de la secretaria, pero cuentanos desde el princio desde que la comenzaste a afanar
 
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