interxxx
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Soy muy asiduo al foro, tanto para revisar que es de algunas kines con las que me he atendido, como para ver si es que hay algún nuevo material y obviamente leer los comentarios de los cofrades, para ver si esta kine se apunta en mi lista negra, últimamente ya no me atiendo tan seguido como antes, debido a mi relación que ya va por el año, y es bien difícil poder hacer alguna escapada, lo hago cuando se va de viaje o por motivos de trabajo de ella y me quedo solo.
Ahora ultimo he empezado a leer los relatos eroticos de varios cofrades y de verdad que me sorprendió bastante la forma en que relatan los encuentros y obviamente creándome dudas de los relatos, ya que para empezar dudo mucho que las mujeres se regalen así tan fácil, y que acepten sin más hacer sexo oral, sexo anal, una vaciada en la cara o que se la traguen, tal vez sea mi falta de labia para con las chicas o no, o mi falta de experiencia, eso sí he encontrado una ex enamorada que se dejaba hacer de todo hasta le gustaba tragarse mi leche, pero eso lo contare más adelante.
Así que me pregunte si yo podría relatar alguna historia igual, o bueno parecida, y sacando algunos cálculos tengo mi recorrido con flacas y también con kines, pero no tanto soy del tipo que a una chica en la calle me la cruzo y me la levanto o en una disco, soy lo que se podría decir muy tímido, creo que es falta de confianza, autoestima, por varias razones que iré contando poco a poco.
Así que lo se me ocurrió contar fue mi historial con las mujeres, aquellas que me robaron el corazón y me las pude levantar o casi levantar, así como mi periodo de Príncipe Vengador (Explicare luego él porque del Príncipe), así que ahí vamos.
Para poder empezar este primer relato tengo que hacer una pequeña introducción para que sepan un poco el ambiente.
Mis padres son divorciados, casi cuando cumplí un año se divorciaron, mi padre es un vago, nunca se hizo responsable de su familia, pero siempre saca pecho de orgullo cuando habla de su hijo, mi viejita fue quien me sacó adelante a base de mucho esfuerzo, casi cuando tenía tres años conoció a quien yo considero mi papa, no será perfecto, pero es honrado y full chamba, bueno mi papa, tiene su familia en otro distrito, así que en las vacaciones de verano, me mandaban para allá para que no me aburra, ya que allí tenía tres primos, una prima de mi edad, un primo un año mayor, y otra prima ya 4 o 5 años mayor que yo, a la que llamaremos Fabiola.
Como no había una cama disponible y por ser yo de aprox 8 años de edad dormía con mi prima Fabiola, la verdad es que no me acuerdo como empezó todo, pero la cosa es que todas las noches parábamos chapando, y no eran solo besitos, había harta lengua, sus pechos, me los banqueteaba, ella es de pechos grandes, en si me la paletaba completa, a veces durante el día en que nos encontrábamos solos, le metía su chape o le agarraba sus tetazas y me las comía, de ahí creo que nació mi instinto tetomaníaco.
Una noche que estábamos en pleno chape ya súper calientes me dice: Méteme tu pipili en mi poto entenderán que yo tenía 8 años y ella tal vez sus 13 o 14, así que entenderan por que me hablada de ese modo, yo en esa época no sabía de qué se trataba el sexo, pensaba que solo era chapes, así que yo muy obediente, saque mi pipili y se lo puse en su poto, algo así como punteando, luego me dijo que mejor no, así que me lo guarde, y desde esa vez nunca mas me lo pidió, seguíamos chapando, pero no sé el por qué se echó para atrás, ella sabía lo que íbamos a hacer, pero no sé, le habrá entrado cargo de conciencia o tal vez pensó que sus padres o mi otra tía (que es bien metiche) iban a escuchar, ya luego yo crecí, y deje de ir en vacaciones a su casa, nunca hemos hablado del tema, nunca más volvió a pasar, ahora ella está casada y tiene dos hijos, siempre nos vemos en reuniones de familia, y entre nosotros todo normal, como primos que somos, pero ese tema nunca se tocó, yo a veces recuerdo y dije que idiota, si hubiera sabido lo que se ahora, le hubiera dado vuelta como pollo a la brasa, pero solo era un niño, en teoría inocente.
Ahora ultimo he empezado a leer los relatos eroticos de varios cofrades y de verdad que me sorprendió bastante la forma en que relatan los encuentros y obviamente creándome dudas de los relatos, ya que para empezar dudo mucho que las mujeres se regalen así tan fácil, y que acepten sin más hacer sexo oral, sexo anal, una vaciada en la cara o que se la traguen, tal vez sea mi falta de labia para con las chicas o no, o mi falta de experiencia, eso sí he encontrado una ex enamorada que se dejaba hacer de todo hasta le gustaba tragarse mi leche, pero eso lo contare más adelante.
Así que me pregunte si yo podría relatar alguna historia igual, o bueno parecida, y sacando algunos cálculos tengo mi recorrido con flacas y también con kines, pero no tanto soy del tipo que a una chica en la calle me la cruzo y me la levanto o en una disco, soy lo que se podría decir muy tímido, creo que es falta de confianza, autoestima, por varias razones que iré contando poco a poco.
Así que lo se me ocurrió contar fue mi historial con las mujeres, aquellas que me robaron el corazón y me las pude levantar o casi levantar, así como mi periodo de Príncipe Vengador (Explicare luego él porque del Príncipe), así que ahí vamos.
Para poder empezar este primer relato tengo que hacer una pequeña introducción para que sepan un poco el ambiente.
Mis padres son divorciados, casi cuando cumplí un año se divorciaron, mi padre es un vago, nunca se hizo responsable de su familia, pero siempre saca pecho de orgullo cuando habla de su hijo, mi viejita fue quien me sacó adelante a base de mucho esfuerzo, casi cuando tenía tres años conoció a quien yo considero mi papa, no será perfecto, pero es honrado y full chamba, bueno mi papa, tiene su familia en otro distrito, así que en las vacaciones de verano, me mandaban para allá para que no me aburra, ya que allí tenía tres primos, una prima de mi edad, un primo un año mayor, y otra prima ya 4 o 5 años mayor que yo, a la que llamaremos Fabiola.
Como no había una cama disponible y por ser yo de aprox 8 años de edad dormía con mi prima Fabiola, la verdad es que no me acuerdo como empezó todo, pero la cosa es que todas las noches parábamos chapando, y no eran solo besitos, había harta lengua, sus pechos, me los banqueteaba, ella es de pechos grandes, en si me la paletaba completa, a veces durante el día en que nos encontrábamos solos, le metía su chape o le agarraba sus tetazas y me las comía, de ahí creo que nació mi instinto tetomaníaco.
Una noche que estábamos en pleno chape ya súper calientes me dice: Méteme tu pipili en mi poto entenderán que yo tenía 8 años y ella tal vez sus 13 o 14, así que entenderan por que me hablada de ese modo, yo en esa época no sabía de qué se trataba el sexo, pensaba que solo era chapes, así que yo muy obediente, saque mi pipili y se lo puse en su poto, algo así como punteando, luego me dijo que mejor no, así que me lo guarde, y desde esa vez nunca mas me lo pidió, seguíamos chapando, pero no sé el por qué se echó para atrás, ella sabía lo que íbamos a hacer, pero no sé, le habrá entrado cargo de conciencia o tal vez pensó que sus padres o mi otra tía (que es bien metiche) iban a escuchar, ya luego yo crecí, y deje de ir en vacaciones a su casa, nunca hemos hablado del tema, nunca más volvió a pasar, ahora ella está casada y tiene dos hijos, siempre nos vemos en reuniones de familia, y entre nosotros todo normal, como primos que somos, pero ese tema nunca se tocó, yo a veces recuerdo y dije que idiota, si hubiera sabido lo que se ahora, le hubiera dado vuelta como pollo a la brasa, pero solo era un niño, en teoría inocente.
