Pequé de arrecho y no me arrepiento

Te tirarias a la mujer de tu pata

  • si

    Votos: 29 54,7%
  • no

    Votos: 21 39,6%
  • les propondrías un trío

    Votos: 3 5,7%

  • Votantes totales
    53
Buen relato
Hola a todos los cófrades los que me leen saben que tengo mis límites: No tengo sexo con casadas, evito comprometerme, tríos, orgías no van conmigo.
Pues les contaré que hoy precisamente hoy, rompí con una de mis principales reglas, por arrecho,
si ya habrán leído que mi líbido me ha metido en problemas antes, como romper mi regla de no
acostarme con las colegas del trabajo.
Bien todo empezó con una mujer de 36 años, casada, blancona, 1.67 m de estatura, delgada, un buen derriere y unos pechos 36b, bastante duritas, estaba en forma, su cabello largo sedoso y rubio (al pomo) hacían de ella un conjunto exquisito envuelto un vestido sastre ajustado en las caderas y en los pechos, aroma a jazmín, constantemente con sus halls negros en la boca.
Es gerente en mi trabajo, como sabrán soy supervisor del área de mantenimiento, y vengo trabajando con ella
desde hace 1 año ya, confianza y todo conservando el respeto y la distancia, casada con mi jefe inmediato llamado Josué de 40 años, moreno como yo 1.80 en forma. Yo en mi mente siempre los había visto como la pareja feliz, el ejemplo a seguir.
Resulta que desde hace tiempo, ella estaba algo distraída y muchas veces dejaba escapar insatisfacción a través
de unos suspiros quedos luego de la planeación de actividades.
I: Muy bien Sr. Nadia (le llamaré así) entonces la programación es así para el mes de Junio, haré los turnos nocturnos que hagan falta para apoyar a la tropa ( así llamamos de cariño a los (as) conserjes)
N: Ok, ok
I: Aquí entre nos, estás bien?? Te noto rara
N: Nada sigamos trabajando.
No insistí y continué con mis asuntos.
Y justo a tres días de nuestra charla, se vino la fiesta de la institución, obligado tenía que ir. Fui sencillo, ella llegó con Josué bien vestidos ambos, ella con un enterizo color rojo bastante llamativo y que se modelaba a sus pechos y su derriere denotándose acá un hilo bien tentador que separaba de forma armónica sus bien tonificadas nalgas, ella con una sonrisa blanca, amplia , con un lunar coqueto en la comisura de los labios
En fin muchos la miraban con deseos y ganas.
Yo me encontraba charlando con otras mujeres, las había de todo tipo sobretodo 2 colegas una morocha y una chinita de huánuco: 1.50mts 38 b de brasiere en putivestido negro, panties negras y un abrigo muy coqueto... La morocha en pantalón de vestir gris, blusa beige cabellos ensortijado ojos grandes y unos labios gruesos y una pinta de mamona de campeonato ambas de 33 y 26 años respectivamente.
Yo de hecho que le iba a la morocha, pese a que era de mi vuelo (1.75)... Hummmm ella me devolvía la mirada... ajá... De forma bastante notoria, que incluso la chinita que se llamaba Milena dijo
M: Icelos ya pues cuando me sacas a bailar, una muchacha guapa vestida bien linda no se puede quedar sin bailar...
I: Soy tronco, recuerdas?
Silvia la morocha me dice al oído: Eres tronco para todo ???
I: Jajajajajaja. ya veremos, vamos a bailar todos
Y hemos estado bailando entre los tres hasta que más gente se unió a la pachanga.
En eso justo cuando Silvia y yo entramos a ese umbral de tócame que tócame con una salsa romántica... Se aparece Nadia majestuosa en su vestir pero su mirar apagado y me dijo con los ojos que necesitaba charlar.
Luego de hacer lo posible de decirle a Silvia que me espere, me fui a charlar con ella.
Tras lo cual mi morena de oro no quedó muy contenta... Pero en fin.
Nadia luego de ir a la oficina me contaría algo respecto a Josué que me dejaría perplejo
y sería también la causa del por qué ella actualmente es mi amante...
Continuará
 
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