user46
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Bueno, como alguien retomó los temas de "primera vez", me vino a la memoria la primera vez que clave a una hembrita por el ortencio.
Afortunadamente, como deben ser las primeras veces, fue con una firme.
Fue hace algunos años cuando recien empecé en mi chamba, entre en un proyecto para una importante empreza internacional que tenía sedes en Centro América. No voy a ser muy preciso en lugares ni fechas, pues todavía sigo en la misma chamba y puede ser que algún forista trabaje conmigo y me reconozca. Bueno, resulta que por esos tiempos yo era tranquilazo, es decir, no frecuentaba kines, y en una de las épocas en las que mandaron por un par de meses a una ciudad pequeña de Centro América ahi en la oficina conocí una flaquita de 18 años, buenaza, con un tarrazo de campeonato (caribeña, ustedes saben), que estaba iniciándose como recepcionista. Resulta que con salidas en grupo nos hicimos patas y cuando regresé a Lima mantuvimos el contacto y nos hicimos enamorados por e-mail, por eso ya cuando volví después de 3 meses fuimos directo al acto, como la empresa de nuestro cliente me daba un departamento, ahi nomás le aplicaba, todavía todo por conducto regular. Al regresar a Lima, después de mes y medio, tenía que pasar un par de noches en la capital de dicho país, para tomar el avión hacia Lima, esta compañía me puso (como era su costumbre) en el mejor hotel del país (incluso varias veces que tope con que el presidente de ese paía estaba en el mismo hotel durante mi estadía) y en una de las mejores habitaciones, de manera que le dije a la flaca que me acompañe, ahi se que la dejé super impresionada, por ser de provincia y chibola, nunca había tenido ésa experiencia, ya en la última noche como que la convencí para darle por el cochinito, pues me traía loco, parece que esta chica cagaba flores, pues lo tenía rosadito, lo malo es que no teníamos lubricante y yo soy mas o menos "grueso" (por lo menos, por encima del promedio), ella atracó pero al sentir la pegada le dolió mucho asi que no insistí, quería darmela de gentleman, pero me quedé con unas ganas....Por eso, a los 2 meses que me mandarón de regreso, lo primero que puse en mi equipaje fue una galonera de love lub. Llegué, y me esperó en el aeropuerto y de ahí defrente a darle, le sugerí hacerlo por atrás per no atracó, por la mala experiencia pasada. Pero gracias a la suerte que tenemos los cacheros, a los 3 días le vino la regla y yo le salí con el drama que sólo me iba a quedar poco tiempo que patatí patatán, cuando la ví como que dudando saqué el love lub tamaño familiar, hicimos una prueba preliminar (sólo la puntita) y atracó. Put...re, fue maravilloso, pase 4 días (mientras le duró la regla) dándole a ese culazo (culo caribeño) rosadito, en todas las poses y de todas las formas posibles, fue lo máximo. Al principio costó, por las dimensiones de mi muñeco y de su inexperiencia, pero la chibolita aguantó como los valientes, después ella misma pedía gritos y el analítico empezó a formar parte infaltable de nuestra rutina amatoria.
Bueno sres, fue una especie de catarsis contarle esta experiencia, creo que hoy soy Scarlet.
Salhumedos.
Afortunadamente, como deben ser las primeras veces, fue con una firme.
Fue hace algunos años cuando recien empecé en mi chamba, entre en un proyecto para una importante empreza internacional que tenía sedes en Centro América. No voy a ser muy preciso en lugares ni fechas, pues todavía sigo en la misma chamba y puede ser que algún forista trabaje conmigo y me reconozca. Bueno, resulta que por esos tiempos yo era tranquilazo, es decir, no frecuentaba kines, y en una de las épocas en las que mandaron por un par de meses a una ciudad pequeña de Centro América ahi en la oficina conocí una flaquita de 18 años, buenaza, con un tarrazo de campeonato (caribeña, ustedes saben), que estaba iniciándose como recepcionista. Resulta que con salidas en grupo nos hicimos patas y cuando regresé a Lima mantuvimos el contacto y nos hicimos enamorados por e-mail, por eso ya cuando volví después de 3 meses fuimos directo al acto, como la empresa de nuestro cliente me daba un departamento, ahi nomás le aplicaba, todavía todo por conducto regular. Al regresar a Lima, después de mes y medio, tenía que pasar un par de noches en la capital de dicho país, para tomar el avión hacia Lima, esta compañía me puso (como era su costumbre) en el mejor hotel del país (incluso varias veces que tope con que el presidente de ese paía estaba en el mismo hotel durante mi estadía) y en una de las mejores habitaciones, de manera que le dije a la flaca que me acompañe, ahi se que la dejé super impresionada, por ser de provincia y chibola, nunca había tenido ésa experiencia, ya en la última noche como que la convencí para darle por el cochinito, pues me traía loco, parece que esta chica cagaba flores, pues lo tenía rosadito, lo malo es que no teníamos lubricante y yo soy mas o menos "grueso" (por lo menos, por encima del promedio), ella atracó pero al sentir la pegada le dolió mucho asi que no insistí, quería darmela de gentleman, pero me quedé con unas ganas....Por eso, a los 2 meses que me mandarón de regreso, lo primero que puse en mi equipaje fue una galonera de love lub. Llegué, y me esperó en el aeropuerto y de ahí defrente a darle, le sugerí hacerlo por atrás per no atracó, por la mala experiencia pasada. Pero gracias a la suerte que tenemos los cacheros, a los 3 días le vino la regla y yo le salí con el drama que sólo me iba a quedar poco tiempo que patatí patatán, cuando la ví como que dudando saqué el love lub tamaño familiar, hicimos una prueba preliminar (sólo la puntita) y atracó. Put...re, fue maravilloso, pase 4 días (mientras le duró la regla) dándole a ese culazo (culo caribeño) rosadito, en todas las poses y de todas las formas posibles, fue lo máximo. Al principio costó, por las dimensiones de mi muñeco y de su inexperiencia, pero la chibolita aguantó como los valientes, después ella misma pedía gritos y el analítico empezó a formar parte infaltable de nuestra rutina amatoria.
Bueno sres, fue una especie de catarsis contarle esta experiencia, creo que hoy soy Scarlet.
Salhumedos.