emanuelson
Coronel
12 Years of Service
Todo comenzó cuando mi amiga Francesca, me presentó a su causa, Yomayra, una morenita flaquita, bien rica con lentes, bien formadita, yo le notaba el culote que se manejaba con buzo, nomás, paradito y durito. Bueno, resulta que nos presentaron empezamos a conversar por Whatsapp, era súper linda, pícara, alegre, atenta conmigo, le empecé a invitar para pasear y ella me aceptaba normal. Me abrazaba cuando nos encontrábamos, y yo uff, volaba con su cinturita al abrazarla, con lo suave y delicada que era, su pelo, su olor, su cuerpito fragil. Hasta que un día yo celebré mi cumpleaños y la invité, y ella vino, estuvimos conversando, bailando y chupando. Y bueno se me pasaron las copas, ella ya se había ido, y huasca le dije, que era muy bonita y yo estaba agradecido por su amistad, que cualquier hombre estaría orgulloso de estar con ella y me desviví en darle halagos, cuando ella tal vez, solo me respondía por compromiso y por no bloquearme, porque la estaba incomodando. Los días siguientes a ese episodio, la noté muy fría conmigo, demasiado distante, me evitaba, ya no me abrazaba al vernos, se despedía cortante, ya no era ella, la que me buscaba la conversación en el WhatsApp, sino yo, trataba de hacerle la conversa y me respondía fría, si o no y nada más, ya nuestras conversaciones no eran bonitas ni pícaras como antes. Así que bueno un día que nos vimos, aproveché en pedirle disculpas por las cosas que le dije el día de mi cumpleaños y que tal vez se me pasó la mano en el cariño de borracho. Pero que si la apreciaba mucho y esas cosas, tratando de justificar mi pendejada, ahí ella no me dijo nada, solamente que normal, que no había problema, pero que no confunda las cosas y que las tenga claras. Y bueno un día me invitaron a una fiesta de un amigo en común, que se iba a Costa Rica a chambear y por eso le organizaron esa fiesta de despedida. Y ahí sin querer escuché que ella hablaba de mí, porque yo había salido a fumar a la azotea, y ahí Ella Le contaba a una amiga suya, estaban de espaldas, no sé si no se dió cuenta de que yo estaba ahí o lo hizo a propósito, para yo poder escuchar, no lo sé, pero le decía, como yo la empecé a acosar y que yo había malinterpretado las cosas, que ella no quería nada con un tipo como yo, que, qué cosa me habría creído, que yo era un confianzudo y un mandado, que no se diferenciar las cosas, que el error fue de ella, que ella jamás tendría nada con alguien como yo, etc, etc. Me hice el huevón, el que no había escuchado, ni visto nada. Salí de la fiesta despidiéndome de la manera más cordial, de todos y me fui. Cuando llegue a mi casa, maldije a todo el mundo y renegue, en mi bronca agarré mi cel y borre nuestras conversaciones de facebook, de WhatsApp, la eliminé de todas las redes y dije, es la última vez que vas a saber de este "acosador", hoy fue la última vez que te molesté con mis tonterías. Tomé unos tragos hasta quedarme dormido y en realidad estaba muy molesto por todo lo que había escuchado. Esas dos semanas fueron difíciles para mí, me estaba enamorando de ella, la recordaba en su lado más dulce, abrazándome, conversando tierna y pícaramente por Whatsapp y extrañaba hacer eso, quería recuperar su número y escribirle, o ir a su casa a buscarla, pero no lo hice por orgullo y dignidad. Y pasó el tiempo, como dos meses sin hablar nada, ni vernos. ( Continuará...)
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