En otra chance, el gusto fue de conocer una mujer madura nacida en la tierra de Montaner, fue un choque y fuga del cual ambos nos beneficiamos, creo que más yo que ella, la mujer ( Dana para proteger su identidad), tenía 43 años, una anatomía que para su edad otras mujeres moririan por tener, unas piernas, que hacian reventar a cualquier jean, y un señor culo, eso fue lo primero que vi cuando la conocí, era una vendedora en un mercado donde compré medias un día, para hacer que el contacto sea más frecuente le saqué el fono para preguntarle si iba a estar el día que le volvía a ver en su puesto, pues adrede hice la compra en 2 bloques, así lo hice la llamé para sacarle información de hasta que hora estaría y fui a su punto de venta.
Ese día se había vestido mejor que el día anterior, era un leggins deportivo que no tapaba el enorme culo que tenía, su piel blanca y esas piernas me hacian pensar que esta madura estaba para otro mundial y como tenía otras prendas que despues le compraria, se las compré y así hicimos amistad, me contaba que el puesto no era de ella sino de un viejo medio mañuco que solo quería mirarla o tenerla cerca para excitarse, que era madre soltera, tuvo una hija a los 25 años allá en su país,donde era empresaria de ropa, llegó a tener hasta su propia tienda y su minifabrica de confeccion de prendas para mujeres, pero que todo lo destruyó la dictadura y tuvo que buscar otros horizontes.
Como nos hicimos amigos, me invitó a una fiesta con sus paisanos en una casa que alquilaban, por momentos me dejaba en claro que no quería alguien con quien rehacer su vida, que se sentía toda una leona en la vida y que sola se quedaría, y que no permitiría que otro pendejo se aproveche de ella, osea era toda una hembra que se respeta, empoderada, superencabronada, que ningún forajido la pondría de nuevo en pollito tomando agua, y esto para mí era más placentero que mirar el ocaso alla en Máncora o comer los chifles de mi tierra. El día del tono, Dana fue con un polo que no tapaba sus tetas enormes, un short jean que dejaba ver sus buenas yucas, pero como buen panetón todino venía con su todinito, la hija de Dana , para proteger su identidad , Feli, 18 recien cumpliditos, pero con una cara de pendeja que con la mirada no más te hacía eyacular, cuando Dana me la presentó yo pensaba si a esta jerma con lo que ajusta te haría venir en una, con esa carita te deja sin prostata, y su buen cuerpo para su edad, ya se convertía en la reina de buenas pajas despues.
Pero como buen cazador, primero fui por la mamá, pero debo decir que la hija fue quien me ligó sin que yo pidiera, hasta la misma Feli se dio cuenta que me gustaba más su mamá que ella, Dana tomaba y bailaba con otro de sus paisas, yo lo hacía con Feli, que a cada rato me coqueteaba, como para no quedarme solo me puse a tomar y a charlar con Feli, que tampoco era 1000 metros abajo de su mami, tambien estaba rica, su carita me gustaba, pasaba la hora y anochecio, Feli vio que su mamá ya estaba sazonada, pero seguia disfrutando de la fiesta, Feli en medio baile muy pegadita a mí, me roba un pico, no correspondí por supuesto pero luego me entró unas ganas de chaparmela, total su mamá ya estaba picadaza y vi que un chamo perreaba con ella, osea Dana ya estaba lejos de mi alcance, con Feli me fui a la calle un rato y ahí nos dimos un beso, la agarraba como a mi flaca, pasaban los carros y no nos importaba, sin roche me la tiraba si hubiese algún hostal ahí cerca pero para piña no lo había, solo que ya Dana mostraba que el alcohol se le había subido a la cabeza y los vecinos ya daban señal que la reunion no era tan bien vista por ellos con eso de: Larguense a su pais a hacer bulla. Fue el momento propicio para irnos de la fiesta, Dana Feli y yo fuimos a su cuarto donde vivian, pagué el taxi y las llevé, era sábado y total no perdería nada, Feli al ver que su mamá estaba tumbada por el alcohol, movió a su mamá a un rincón de la cama y me echó, ahí hicimos el amor, Feli decía que no había tenido sexo pero no era verdad, tenía mucha experiencia chupando vergas, es más vio la mía paradaza y dijo que estaba en el promedio de tamaños que le metieron antes, osea ya era a su edad una veterana de guerra, su vagina ajustaba que barbaro, era un estrangulamiento terrible, se daba ricos sentones sus tetas tambien estaban lactables, y el resto de su cuerpo muy bueno, pero verla su carita mordiendose los labios y apretandome hizo que me vaciara en su vientre, la eché rapido para aventarle el engrudo.
Era algo fuera de pronostico, yo ahí echado con Feli y su mamá a quien me quería tirar estaba tambien ahí dormida, Feli que no sé cuantos orgasmos tuvo hasta ese polvo, se quedó dormidaza, como en coma, yo estaba más vivo, pero en minutos despertó Dana y me increpó que por qué me tiré a su hija, solo me acerqué a su oido y le dije: Bien que quieres que te haga lo mismo, automaticamente me llevó al baño, puso seguro y me bajó el pantalón, me estimulaba el pene hasta que me lo dejó como poste, una succionada de nueces que me descolocó, yo solo la tomaba de la cabeza con ella ahí sentada en el water, me hacía explotar de placer, quise que fueramos al cuarto a cachar pero ella quiso que sea ahí en lo estrecho del baño, se bajó su short y su calzón y me la caché, Dana decía algo cierto, hace mucho pero mucho tiempo no probaba pene, su vagina era una catarata, se mojaba, Dana de instante en instante temblaba, le daba como ataques de placer, su culo temblaba y de su vagina caia liquido a frecuencia cortisima. Se sujetaba de mi brazo izquierdo y con el otro se apoyaba en el water, unas 5 veces ella tuvo esos ataques como de cuando llegaba al orgasmo, gemía pero logré taparle la boca con su calzón para que Feli no nos escuche, llegaba el momento de venirme y se lo dije a Dana, ella se puso de rodillas y recibió toda mi leche en su cara.
Salimos del baño en silencio, Feli se había despertado y nos vio salir juntos del baño, prendió la luz y se asó. Dias despues, recibi a Dana en mi cuarto, ya por esa epoca yo era el dueño de la jato y si quería me la cachaba en la azotea, ahí fuimos a “conversar” pero nos metimos un rapidito ahí, viendo desde arriba mi distrito y sus avenidas, le di una guita que ella me pidio para pagar su alquiler del cuarto, no le renté cuarto porque me joderían la vida cuando me aburra de las dos, de la madre o la hija. Feli también se hizo presente en mi cubil, según ella su mami no sabía pero fue a buscarme, por cojudeces que las de su edad quieren, el jean al cuete o las putisandalias esas con pelusa que les gusta a las chamas, hice una proforma como siempre al mínimo para no gastar tanto y le di su guita luego de tirarmela en mi cuarto, que rico apretaba Feli, mi pene terminaba como si lo hubiese sacado de una bolsa ajustada, cuando dejamos de vernos le di a ambas su guita por haberse portado bien con papi.