Sampietri
General
Hola,me permito participar en éste tópico argumentando que el principal móbil para tener necesidad de creer en la existencia de Dios es :EL DOLOR.Mientras seamos seres sometidos a éste determinante en nuestras vidas seguiremos buscandolo todos los días de nuestras vidas.Si por decir nos hicieran por prescripción médica una limpieza de nuestro conducto seminal por medio de una sonda(suele hacerse además)ésa sola experiencia con un agudo e intenso dolor a pesar de la anestesia nos hace sentir tan desprotegidos,tan débiles de por nuestra propia naturaleza no poder soportar o hasta ignorar el rigor o el precio que debemos pagar por ser herederos de la naturaleza de seres humanos que envuelve nuestras almas.Qué diferente es vivir el día a día encapsulados en trivialidades apretando un botón y viviendo rodeados de comodidades hasta absurdas a veces que lo que tratan de hacer más bien es dirigirnos hacia convertirnos en consumidores y vivir el día a día através de nuestros sentidos olvidando hasta que llegamos a la longevidad que querramos aceptarlo o no ,no sabemos de donde venimos ni hacia donde vamos,simplemente estamos acá y ante una disyuntiva que es inmemorable en la mente del hombre sólo queda en éstos casos hacer uso de nuestra parte espiritual y no cognitiva.La fé,más que la capacidad de razonar es lo que nos distingue de los animales.Ellos matan pero por hambre o defensa.El ser humano mata tomando conciencia de ello y si llegamos a aspectos psicóticos hasta es capaz usando la imaginación de cortar a pedacitos a su víctima por intereses mezquinos que nunca van a justificar que derrame la sangre de otro semejante.Ante ésto no es mejor tener presente a Dios,no somos capaces de administrar nuestro libre albedrío sin una guiá espiritual los tiempos son cambiantes pero los defectos en el ser humano son los mismos a través de las épocas y Dios es el único que a pesar de tantas ofensas,desatinos,guerras y en fin ése razonamiento académico muy elitista y demás pero que deshumaniza al hombre y lo carcome por dentro haciendo su vida un lastre sin la presencia de Dios en sus vidas.