emanuelson
Coronel
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Gracias por la espera, pero es que no tuve tiempo para seguir contando la historia. Bueno Resulta que Yesenia llegó cerca a las 7, se hizo esperar. Pensé en algún momento que ya no vendría o que se había arrepentido, pero llegó, estaba muy nerviosa, y trató de convencerme de que le de el préstamo a cambio de nada y que me lo devolvería. A lo que le dije, Mira Yesenia, 100 soles es lo máximo que yo te puedo dar, así sin nada, me firmas un documento y te los doy donde dices cuando me vas a pagar y que sea en una fecha en la que tú vas a poder, porque no me gusta estar cobrando ni perdiendo mi tiempo. Te doy hasta un mes y me devuelves lo mismo, sin intereses ni nada. La verdad ya me había llegado al pinch... Tanta cucufateria y remilgos de esa flaca. Así que por último le dije. Bueno lo tomas o lo dejas, porque esto es un endeudamiento para mí, yo me he endeudado y no te lo puedo dar, así nomás porque para mí no valdría la pena, disculpa, si? - Ay joven, Por que es así, me dijo, Yo le juro que se los pago. - Y por qué es tan dificil para ti? Pues, le dije, es tener sexo y ya? No te pido que te cases conmigo, ni nos saludamos , ni nos conocemos , si quieres en la calle. Pero ya, yo te dije, lo que se puede y no se puede. Ya depende de ti, quiero que sepas que no te estoy obligando, es decisión tuya. - Por qué se aprovecha de mi necesidad, me dijo? No sea malito y presteme. Naca, la pirinaca, me cerré. Por qué es así? Me decía. - Porque me gustas muchísimo, le dije, eres muy bonita y desde que te Vi, no he dejado de pensar en ti. - Pero Ud sabe que tengo, mi esposo. - Bueno, ya te dije, Yesenia. No te obligo, le dije. Y la verdad tanta negatividad ya me había puesto de mal humor, quería que se vaya, ya de mi depa, muchas vueltas csm. - No lo haría, si no lo necesitara tanto me dijo, ya pues hay que hacerlo, estaré con Ud. -Le di el dinero y empecé a besarla,. Al principio la sentí fría como sin querer besarme, como esquivadome. Pero yo no desistí de seguirla besando, sin sacarle mi boca. Hasta que ella me empezó a corresponder con su lengüita, cerrando sus ojos y de la misma manera, mientras yo me la manoseaba, a mi antojo, le tocaba todo, sobretodo sus tetas, se las aplastaba, se las manoseaba con mis manos, le metía el dedo al culo por el pantalón y trataba de abrirselo. Yo estaba como si fuera un adolescente desesperado por follar por primera vez. La arrincone contra la pared, presionandola, mordiendole las orejas, apretándole las tetas y pegándola hacia mí, con mis manos, de su cintura, La punteaba y le sobaba todo ese culo a mi gusto. Hasta que se le salió sin querer un. Ay que rico. Aaaah..... Y eso me excitó muchísimo. Se me puso a fierro, a mil por hora. Le quite la ropa, yo también me quité la ropa y no dejaba de besarla, le mame sus tetas a mi gusto, esos pezones negritos, de la morocha. Y le decía: Te gusta esto, Yesi? Te gusta? Así que te chupe tus tetas? Ajá, me decía la bandida... Y me besaba bien rico. Ahora era ella la que estaba mojadita. Yo le metí el dedito a esa rajita y estaba bien mojadita, bien lubricadita. Y aunque olía a pescadito le metí una lengueteada bravaza abriéndole su conchita con mis manos, cacherita la bandida, esa conchita ya tenía su kilometraje. Chúpamela mi amor, le dije, con esa boquita rica que tienes, se agachó y se la metió a la boca despacio y me la empezo a mamar, al principio lentamente como sin ganas, más me la pajeaba que chuparla, pero de ahí se transformó y empezó a darme una rica chupada hasta el fondo, tragandose toda mi verga y diciéndome cachame por la boca mi amor, empujamela, y yo se la empujaba así hasta hacerla atorar que rico fue eso. La subí a la cama y la voltee nos metimos un delicioso 69. Le metí lengüita a esa conchita y también a su culito, y le quise meter el dedo, pero no me dejó, diciendo que le dolía. Pero que rico anito, estaba bien cerradito chiquitito, selladito, no se abría ni cuando le pasaba lengua, estuvimos así como 5 minutos full 69 y casi me corro en su boca porque esas mamadas me encantaban, la voltee y me hice una rica rusa en sus tetas. Y ella se sorprendió un poco, creo que no le habían hecho eso, pero siguió ahí y yo se la quería meter ya, a fondo y quise clavarla así a peluche, pero ella me dijo, Tiene preservativo? Pónganse preservativo. - Así nomas le dije, es más rico. Pero se cerró y me obligó a ponerme el cochino Condorito. Bueno me lo puse y le hice cabalgar rico. Mamandole sus tetas, abriendole las nalgotas, dándole palmas en las nalgas y ella me empezó a besar rico, diciéndome te gusta? Mi amor? Estás disfrutando? Si mi reina, le decía yo, que rica mamasota eres .. y ella se movía rico, parecía que me iba a romper el pene de la fricción. De ahí se dió unos sentones. Que me dejó muerto de placer mientras la aferraba hacia mí. Luego de eso me subí encima de ella y le di en misionero, y ahí si me dijo, que rico, mi amor, mientras yo le besaba el cuello, las orejas, su cara y nos lamiamos y se le escapó un hazme tuya, Juan, mi Juan, así, así mi amor, que rico ... Y yo normal porque me.lo estaba gozando rico. Y se me vino mi leche bien espesa y caliente dentro del condón. Y la bandida se empezó a vestir. Le insistí, le suplique un polvito más, pero ella se cerró, me dijo, yo ya cumplí joven, así que no me quedo otro remedio que hacer la finta del contrato de préstamo para que me devuelva las 100 Lucas, es más hasta le ofrecí que ya no me de nada, pero que lo hagamos por segunda vez y ella me dió de mi propia medicina, se cerró y me dijo:. -No se preocupe en cuanto pueda yo le pago sus 100 soles, Gracias. Y se fue así, fría, dejándome en pindinga y con muchas ganas de más rico sexo, y sin pulsearle ese anito selladito, que tenía. A pesar de que yo esperaba más y de hecho mucho más, fue riquísima esa experiencia. Sobretodo cuando a ella se le escaparon sus reacciones de placer naturales y sin fingir, cuando quizá me dijo el nombre de su marido. Cuando me dijo sin querer, ay que rico. Pero bueno ella la tenía clara. Y como dice cumplió, se acostó conmigo y yo cometí el error de no especificarle cómo y qué cosas quería que hiciera. Pero aún tengo esos besos, esas lamidas, el sabor de su conchita en mi boca, ese anito selladito y delicioso en mi mente. Y aunque Yesenia está un poquito gordita y con sobrepeso, tiene estrías en la panza, tiene un señor culote, bien grande y esponjoso, durito cuando lo acaricias, tiene unas tetas caiditas, pero bien suaves y con aureolas grandes, y pezones negritos, riquísimos, porque dió de lactar. Sus pies son muy sexys a pesar de que tiene dos callos grandes tipo bolita, en ambos dedos medios. Y bueno, no es muy bonita, pero sus dientes chuecos, su forma de hablar soplando, su dejo chiclayano, y esa lengüita, esos besos que da, hacen estremecer a cualquiera. Fue un riquísimo polvo a pesar de que para mí se quedó incompleto. Ya pondré una fotito de ella para que la vean, la baje de su facebook. Tiene 29 años, es del 91. Y realmente que suerte tiene su marido, de comerse a esa rica hembra siempre. Envidia de la sana siento. Ojalá y se repita, algún encuentro más con ella. En fin, me lo pasé muy bien. Gracias por leerme y espero les haya gustado la historia. The End.
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