christianhs
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Buenas tardes estimados cofrades, después de tiempo retomo con uds, en realidad tuve muchas cosas en la cabeza, desde la muerte de mi chimbotana no tuve ganas de nada.
Pase momentos feos, me quede sin chamba, pase penurias y encima mi duelo me tenían alejado del mundo y con pocas ganas de seguir la vida, pero tiempo después la suerte me comenzó a sonreír, comencé a trabajar en una importante cervecería y conocí gente nueva, me fui distrayendo y conocí a una gerenta de un banco de la tierra del chavo.
Todo esto mediante el badoo, nos hicimos patas, pasamos a whatssapearnos casi todo el día y al fin llegamos a vernos personalmente un día en un importante centro comercial en San Miguel, ese día no paso nada solo conversamos, salimos a comer algo, pero nos mirábamos y hasta llegamos a besarnos, pero no llego a mas.
EL DÍA DEL ENTIERRO
Bueno una semana después de vernos y conversar, hablar del beso quedamos en vernos un día de semana y comer un cevichito, bueno recuerdo un jueves día de su descanso nos vimos en un distrito populoso del cono este y fuimos a una cevicheria, tomamos unas chelas, comimos rico y nos mirábamos con deseo, sin decirnos nada fuimos a un boulevard y un telo bien lindo entramos, pude verla y era una diosa de ébano, ella mide 1.70 es negrita con labios carnosos, trenzas rasta y pechos enormes copa 40, piernas bien torneadas y un trasero de infarto, nos besábamos con pasión, me quito la camisa y me besaba el torso desnudo, bajaba hacia mi vientre y yo parado contemplando todo tras el espejo, me bajo el pantalon lentamente mientras mordía mi verga por encima del boxer y me jalaba las bolas, me miraba con lujuria mientras me mordía la verga con ternura y cierta sensualidad, se paro y se quito el vestido, se quedo con un conjunto rojo un brasier finísimo y un hilo rojo que se perdía, al ver su hilo estaba completamente mojado y sus pezones erectos, nos fuimos besando y entrelazar nuestras lenguas, le quite el brasier y sus enormes globos me invitaban a morderlos, masajearlos, chuparlos, estaba demasiado embriagado de su piel morena y de sus gemidos, ella volvió a bajar y me quito el boxer, junto sus enormes pechos, los junto y comenzó hacerme una de las mejores pajas rusas que me han hecho en mi vida, cada que la cabeza de mi verga salia de sus pechos ella lo succionaba y le pasaba la lengua, no se aguanto mas y me la chupaba, lo escupía y me masturbaba y de nuevo se lo metía a la boca, se golpeaba los pechos con mi verga, lo miraba y se lo volvía a meter a la boca mientras me jalaba las bolas, sentía tanto placer y cierto dolor que realmente era una mezcla muy rica, ella arrodillada mi mirándose al espejo la excitaba mas, el morbo y nuestro libido ponía el ambiente mas que erótico, me tiro al suelo, no sin antes tirar una almohada para que me acomode y puso su enorme culo en mi cara y comencé a lamerse esa clítoris gruesa, salida y mojada que olía a hembra y me invitaba a probarla, le lamí la clítoris mientras mis dedos exploraban su interior, ella se volvió loca comenzó a gritar y se volvió a prender de mi verga, el silencio de la habitación solo era acompañada de intercambios gemidos, sonidos de nuestros sexos al ser lamidos y succionados y el calor de la tarde hacia que fuésemos mas salvajes, ambos mirábamos ese espectáculo tras un enorme espejo y eso nos excitaba mas, sentía como se contraía y se venia una y otra vez, me mojaba la barbilla y aprovechaba para lubricar su culazo y meter un dedo y morder ese agujerito que se notaba tenia cierto recorrido, ella se dio un senton y todo mi dedo medio fue literalmente devorado por ese culo y se movía como loca, mientras mi lengua se metía a su conchita, no pudo mas y se vino mientras me masturbaba y al sentirme que ya casi llegaba al clímax se metió toda mi verga a su boca y se trago todita mi leche, yo quede tan agradecido y excitado que no la pensé dos veces la tira al suelo y la puse al hombro y sin pre (si cofrades wonazo sin pre) se la metí todita, fue un mete y saca frenético, que rico era verla gritar y sus enormes pechos moverse y oír ese sonidito de chocar nuestros sexos mojados, ella ayudaba estimulándose el clítoris mientras yo se la metía y otra vez no tardo en venirse, yo estaba con ganas de toro!! sabia que demoraría mas porque ya me había venido hacia un rato atrás, la puse en 4 y seguía sodomizando esa rica concha hasta que tanteando ese culo ella volteo y me dijo, es tuyo metemelo, cofrades lubrique ese culazo y la metí en una, ya tenia bastante recorrido porque no ajustaba tanto y no sufrí al meterlo y eso que tengo una verga gruesa, ella se agarraba de la pared y volteaba a ver el espejo, gozaba viéndose a si misma follada, yo me levante y puse mis piernas a los costados de sus nalgas y se la metí sin piedad, gritaba, gemía y me besaba mientras se masturbaba y mojaba el piso con chorros enormes de liquido espeso como la linaza, la tuve asu cerca de media hora, hasta que sentí que me venia y ella comenzó a gritar y nos ahogamos en un orgasmo mutuo, lejos de mi pena, mi luto y mi tristeza volví a ser el mismo de antes con una mujer que apenas conocía tras una pantalla de computadora, esa tarde se volvió eterna y lo hicimos 4 veces mas, pero eso ya es harina de otro costal.
Espero les guste mi relato y vivencia con Roxanita la gerenta de banco.
Pase momentos feos, me quede sin chamba, pase penurias y encima mi duelo me tenían alejado del mundo y con pocas ganas de seguir la vida, pero tiempo después la suerte me comenzó a sonreír, comencé a trabajar en una importante cervecería y conocí gente nueva, me fui distrayendo y conocí a una gerenta de un banco de la tierra del chavo.
Todo esto mediante el badoo, nos hicimos patas, pasamos a whatssapearnos casi todo el día y al fin llegamos a vernos personalmente un día en un importante centro comercial en San Miguel, ese día no paso nada solo conversamos, salimos a comer algo, pero nos mirábamos y hasta llegamos a besarnos, pero no llego a mas.
EL DÍA DEL ENTIERRO
Bueno una semana después de vernos y conversar, hablar del beso quedamos en vernos un día de semana y comer un cevichito, bueno recuerdo un jueves día de su descanso nos vimos en un distrito populoso del cono este y fuimos a una cevicheria, tomamos unas chelas, comimos rico y nos mirábamos con deseo, sin decirnos nada fuimos a un boulevard y un telo bien lindo entramos, pude verla y era una diosa de ébano, ella mide 1.70 es negrita con labios carnosos, trenzas rasta y pechos enormes copa 40, piernas bien torneadas y un trasero de infarto, nos besábamos con pasión, me quito la camisa y me besaba el torso desnudo, bajaba hacia mi vientre y yo parado contemplando todo tras el espejo, me bajo el pantalon lentamente mientras mordía mi verga por encima del boxer y me jalaba las bolas, me miraba con lujuria mientras me mordía la verga con ternura y cierta sensualidad, se paro y se quito el vestido, se quedo con un conjunto rojo un brasier finísimo y un hilo rojo que se perdía, al ver su hilo estaba completamente mojado y sus pezones erectos, nos fuimos besando y entrelazar nuestras lenguas, le quite el brasier y sus enormes globos me invitaban a morderlos, masajearlos, chuparlos, estaba demasiado embriagado de su piel morena y de sus gemidos, ella volvió a bajar y me quito el boxer, junto sus enormes pechos, los junto y comenzó hacerme una de las mejores pajas rusas que me han hecho en mi vida, cada que la cabeza de mi verga salia de sus pechos ella lo succionaba y le pasaba la lengua, no se aguanto mas y me la chupaba, lo escupía y me masturbaba y de nuevo se lo metía a la boca, se golpeaba los pechos con mi verga, lo miraba y se lo volvía a meter a la boca mientras me jalaba las bolas, sentía tanto placer y cierto dolor que realmente era una mezcla muy rica, ella arrodillada mi mirándose al espejo la excitaba mas, el morbo y nuestro libido ponía el ambiente mas que erótico, me tiro al suelo, no sin antes tirar una almohada para que me acomode y puso su enorme culo en mi cara y comencé a lamerse esa clítoris gruesa, salida y mojada que olía a hembra y me invitaba a probarla, le lamí la clítoris mientras mis dedos exploraban su interior, ella se volvió loca comenzó a gritar y se volvió a prender de mi verga, el silencio de la habitación solo era acompañada de intercambios gemidos, sonidos de nuestros sexos al ser lamidos y succionados y el calor de la tarde hacia que fuésemos mas salvajes, ambos mirábamos ese espectáculo tras un enorme espejo y eso nos excitaba mas, sentía como se contraía y se venia una y otra vez, me mojaba la barbilla y aprovechaba para lubricar su culazo y meter un dedo y morder ese agujerito que se notaba tenia cierto recorrido, ella se dio un senton y todo mi dedo medio fue literalmente devorado por ese culo y se movía como loca, mientras mi lengua se metía a su conchita, no pudo mas y se vino mientras me masturbaba y al sentirme que ya casi llegaba al clímax se metió toda mi verga a su boca y se trago todita mi leche, yo quede tan agradecido y excitado que no la pensé dos veces la tira al suelo y la puse al hombro y sin pre (si cofrades wonazo sin pre) se la metí todita, fue un mete y saca frenético, que rico era verla gritar y sus enormes pechos moverse y oír ese sonidito de chocar nuestros sexos mojados, ella ayudaba estimulándose el clítoris mientras yo se la metía y otra vez no tardo en venirse, yo estaba con ganas de toro!! sabia que demoraría mas porque ya me había venido hacia un rato atrás, la puse en 4 y seguía sodomizando esa rica concha hasta que tanteando ese culo ella volteo y me dijo, es tuyo metemelo, cofrades lubrique ese culazo y la metí en una, ya tenia bastante recorrido porque no ajustaba tanto y no sufrí al meterlo y eso que tengo una verga gruesa, ella se agarraba de la pared y volteaba a ver el espejo, gozaba viéndose a si misma follada, yo me levante y puse mis piernas a los costados de sus nalgas y se la metí sin piedad, gritaba, gemía y me besaba mientras se masturbaba y mojaba el piso con chorros enormes de liquido espeso como la linaza, la tuve asu cerca de media hora, hasta que sentí que me venia y ella comenzó a gritar y nos ahogamos en un orgasmo mutuo, lejos de mi pena, mi luto y mi tristeza volví a ser el mismo de antes con una mujer que apenas conocía tras una pantalla de computadora, esa tarde se volvió eterna y lo hicimos 4 veces mas, pero eso ya es harina de otro costal.
Espero les guste mi relato y vivencia con Roxanita la gerenta de banco.