Día 3
Guía del Kamasutra
Para el día de hoy hemos reservado especialmente revisar algunas posturas típicas que debieran darse durante el sexo, para esto les pido que busquen en sus pupitres un pequeño libro; el Kamasutra, que les obsequio para que puedan leerlo, aprender de el y poner en práctica las posturas que crean puedan hacer lucirse y gozar a su pareja.
Recuerden que es el hombre a quien le gusta dominar la situación y él generalmente propondrá las posiciones que más le guste, salvo que sea un novato en estas lides en las que no sabrá siquiera que posición pedir, pero entre lo normal pueden estar:
La cucharita, cowgirl, el famoso perrito o el misionero, que veremos en principio hoy en clase.
Pero recuerden que Uds., también deberán disfrutar del sexo y si pueden revisar algo en su manual tomando una posición en la que puedan lucirse y sacar de la rutina a su hombre en ese momento, ya habrán ganado por marcar la diferencia, ya que sólo este hecho y si el sexo fue disfrutado por los dos hará que terminen siendo recordadas por ellos y los ganarás para siguientes aventuras.
Por lo que, para la última clase cada una de Uds., deberá revisar y considerar que postura es en la que creen harán disfrutar a sus parejas y romper el mito de la monotonía.
La posición del misionero es una posición supongo yo conocida por todas. Donde ella se echará en la cama mientras él se le echará encima. Es una posición típica donde el hombre tendrá el control y el ritmo pero dependerá de Uds., que sientan también ese agrado usando sus manos para abrazarlo o las mismas piernas, hasta por allí emitir ligeros gemidos. Ojo, ligeros; no gritos.
Fuera de esto pueden intentar inclusive llevar alguna de las variantes que existe en esta posición del misionero y en eso una de las novatas me pregunta.
Profe no tendremos clases prácticas también como lo fue la clase anterior?
Bien, le dije. Esa es la iniciativa que siempre deben tener.
Recuerden, hay que disfrutar del sexo y todas deben de verlo así.
Ya para hacer la clase práctica, saco un colchón inflable de plaza y media que tenía guardado y lo pongo a disposición de la clase.
En eso, mi querida alumna se desviste y ayuda a desvestirme. Me pide que me eche y me da un felatio de ensueño, así yo también comencé a jugar un poco con ella para que estuviera calientita y sacarle mejor provecho de las posiciones que veríamos.
Wow, que rico estuvo esto, veo que has estado practicando bastante.
Cuando la mujer normalmente termina el felatio, generalmente puede asumir inmediatamente tomar la posición del cowgirl, es decir, donde ella se sentará encima de él, como si estuviera montando a caballo, así la siento a ella encima mío y le pido que comience a cabalgar o bien de arriba hacia abajo, o bien adelanta y hacia atrás. Nunca se queden quietas ya que esto podría enfriar a su pareja. Las chicas aquí tendrán el control, donde inclusive ellos pueden sujetarlas de las nalgas para lograr una mayor y mejor presión sobre sus caderas y hacer que el sexo sea placentero y llegue a cierta profundidad.
Aquí también existe su variante, que el reverse cowgirl, que no es otra cosa que la misma postura, sólo que la chica estará de espaldas a él. Si la chica tiene buenas caderas, esta sería una posición ideal, ya que el hombre disfrutará no sólo mucho esta vista sino que también sujetará tus caderas para jugar con el ritmo elegido.
También está la cucharita, donde ella se echara de costado dándote la espalda y tu te echarás detrás de ella. Lo rico de esta posición es que el hombre podrá tener al menor una de las manos a total disposición para acariciarle los pechos a su pareja o bien bajar hasta el clítoris donde ella lo disfrutará mucho mientras la penetras.
Si ella es hábil en el sexo de amar, podrá inclusive presionar con sus caderas sobre el hombre para llegar a lograr una buena profundidad e inclusive ayudándose con las piernas y entre lazarlas con las de él para ejercer una mayor presión.
Luego vendría la postura del misionero y sus variantes del misionero, donde podemos encontrar:
1.- El asiento de loto; donde ella estará echada y mantendrá las piernas abiertas y dobladas mientras el hombre se echará encima. Así la echo y me pongo encima. Le pido que abra las piernas y las mantenga dobladas y zas; le entro con todo y ella siente la pegada al sujetarme fuerte con sus manos en mis brazos y emitir un gran gemido. Sin embargo, luego de un par de embestidas me retiro para no acabar y poder mostrar las otras variantes.
En este tipo de posiciones el hombre es quien tiene el control y a su vez permite una penetración muy profunda donde ella también lo sentirá.
2.- El número ocho; en la misma posición que la anterior, salvo que la chica tendrá las piernas dobladas sobre la cama y para mejor disfrute, le pondrás una almohada sobre la espalda baja, mientras el hombre mantendrá los brazos estirados apoyándose sobre la cama, así ella podrá poner sus manos sobre los glúteos del hombre y podrá dirigir el ritmo de penetración.
3.- La casa; si bien es cierto esta posición es ligeramente acrobática es muy placentera. Mientras ella sigue echada, yo me pongo en posición perrito y le pido que eleve sus caderas y que enganche sus piernas alrededor de mi cintura mientras la penetro o bien le sujeto a ella las caderas para que las mantenga en elevación permanente, así ella podrá mover libremente las caderas en círculos haciendo muy excitante la penetración.
4.- La tregua; esta es una de las posiciones que más me agrada. Así le pido a mi alumna que se eche mientras yo me pongo de costado transversamente sobre ella, manteniendo un ángulo recto. Las piernas de ella pasarán sobre mi espalda. Así puedo inclusive jugar con mi herramienta sobre su cosita antes de meterla, cosa que hago y esto comienza a excitarla mucho y siento como se va humedeciendo. Al cabo de un rato ella busca que se la introduzca, pero yo aguanto un momento más y siento como sus piernas comienzan a presionar sobre mí, hasta que sólo introduzco la cabecita por un instante mientras ella jadea para penetrarla hasta que al rato la meto por completo y se siente un gran gemido por parte de ella, mientras con mis manos inclusive puedo ir sobando su húmedo clítoris.
Sentí que lo disfrutó tanto al igual que yo, que no me quedó más alternativa que irme por completo dentro de ella, para en unísono los dos lograr una gran excitación.
La clase se quedó pasmada de cómo terminamos para luego esbozar grandes risas al saber que ambos habíamos podido llegar al climax como si nadie más hubiera estado en aquel lugar.
Yo ya más relajado sólo atine a decir; esta es la manera de tener un buen sexo, y así los hombres las buscarán para pasar un momento igual.
Bueno, les dije vamos a tomar un breve descanso de quince minutos para poder relajarme y seguir luego.
Luego del breve descanso, retomamos la clase, y, para terminar hoy, esta la posición del famoso perrito, quien se anima, dije. Y, mayor fue mi sorpresa cuando todas levantaron la mano.
Bueno, gracias por su gran iniciativa y participación, pero escogeré entre una de las novatas y la que sea la más caderona. Así les pedí a las novatas que se voltearan y escogí a la más caderona y con buen trasero y a otra de las novatas para que me estimulara inicialmente.
El hombre generalmente buscará esta posición cuando vea que la chica tiene buenos atributos traseros, ya que podrá hacer breves embestidas y sentir todo el peso del trasero de la chica sobre él, y esto le gustará mucho.
Una vez dicho esto, procedo a desvestirme y una de las chicas escogidas procede con la estimulación respectiva. Lo ensaliva bien, lo comienza a lamer y luego adentro y cada vez más adentro hasta que logra una garganta profunda ayudándose con las manos en acariciar mis gemelos dejándome listo para la faena.
Me hubiera gustado terminar con ella por la buena lamida que me dio, pero no quería defraudar a la caderona a la que también le había visto ese buen trasero y quería hacerlo mío.
Así le digo a la caderona, ponte en posición y se pone en cuatro patas. Lo rico de esta posición al menos para el hombre es que tiene dominación completa sobre ella y también puede ver lo glamoroso y esplendido del trasero de su pareja.
Antes de introducirlo inclusive puedo jugar; como que comienzo hacerlo, con mi pene entre sus nalgas, lo que hace muy rica la sensación previa, incluso acariciando su clítoris y hasta su ano si la mujer lo permite, ya que es también la mejor posición para hacer el anal para quien lo desee. Como vi que la chica lo tenía cerradito preferí no aventurarme por allí.
Así que luego de unas sobaditas y sentirle su cosita húmeda la introduzco suavemente en principio.
Aquí si la mujer es hábil y no solo esperar las embestidas del hombre, ella podrá hacer lo mismo y lograr una penetración profunda, inclusive se dice que es la mejor postura para que ella sienta el roce con su punto G, lo que alocará y podrá llegar fácilmente al clímax.
El hombre inclusive podrá abrirle ligeramente las nalgas y ella sentirá más la pegada, también podrá acariciarle sus senos y hasta inclusive con su mano extendida podrá llegar acariciarle el clítoris de la mujer mientras sigue con las embestidas.
A medida que voy explicando esto, lo voy haciendo con ella y no pasa mucho rato en el que comienza a gemir y sentir la pegada.
Otra de sus variantes, es que ella deje de apoyarse con los brazos y se eche, dejando las rodillas dobladas y el trasero levantado. Aquí la penetración será más profunda inclusive y ellas lo van a sentir de todas maneras.
Muchas veces como me ha pasado a mi, ellas se dejan vencer y finalmente se echan no sólo por cansancio sino por no aguantar más y ya echadas uno las tiene dominadas completamente y las embestidas pueden llegar a ser más fuertes, y así mi amiga comienza a gemir y dar de pequeños gritos que me terminó estimulando más de lo debido y terminamos enfrascados en una batalla sin cuartel hasta que no aguanté más y boté toda la presión que llevaba dentro.
Uffff, que buena clase, dije al final del día y todas terminaron aplaudiendo y con ganas de continuar.
Bueno, les dije no se olviden de la siguiente clase y no se olviden de revisar su manual.