Buenos dias… las kines ahora son mas osadas que antes en el oral a pelo y se toman la leche… y yo personalmente, la mejor experiencia que he tenido es con Ameliet, una kine en Higuereta que desapareció del ruedo el año pasado… que rica manera de chupártela!. Se prendía de frente al muchacho, y lo hacía tan rico que no podías decirle que lo deje de hacer… sus labios suaves y delicados, succionaba dandote tanto placer, te chupaba las bolas con harta oasión pero sin perder delicadeza… riquísimo… y lo mejor de todo es que ella misma te pedía que te vengas en su boca. Todo con paciencia y amor,,, riquisimo. Luego la kine desapareció del mapa y yo también del kineo, aunque actualmente algunas veces sigo pecando… si alguien tiene el dato de ella, o sabe de su paradero pasenme el dato
Ah!, Amelieth... ella te hacía el amor con esa boquita maravillosa. Pude atenderme con ella por fuera antes de que dejara el Lyrels.
Luego regresó a su tierra y colgó las tangas (parece que definitivamente).
Recuerdo la primera vez que fui al Lyrels. Ella me abrió la puerta, altaza con sus tacones y una lencería azul. Besito en la mejilla y me hizo pasar a uno de los "stands" del local (Eran divisiones de triplay y cortinas).
Esperé un ratito y regresó con su amiga Brisa para que eligiera con quién me quería atender. Me dejé llevar por la que tenía mejor físico para mí y elegí a Amelieth. Brisa se fue normal y Ame procedió a explicarme los servicios y después me preguntó qué quería.
Una vez pactado y pagado todo, se puso de cuclillas y comenzó a chupármela. Despacito y con paciencia, mirándome a los ojos destilando arrechura y malicia. De rato en rato alzaba mi pene con la mano y les daba cariño a los dos huérfanos: Los succionaba y besaba con esos labios carnosos y con esa lengüita lamía y lamía mis bolas, sin dejar de mirarme traviesa. Además era obediente y bien dispuesta, ya que aceptaba indicaciones y pedidos.
—¿Puedes metértelo todo a la boca?
—Claro que sí, mi amor. —Y se lo engulló con pericia. Después me acosté en la colchoneta para que ella siguiera comiéndosela toda—.
—Aguanta ahí. —Le dije y ella asintió ligeramente con toda la pieza dentro de la boca. Le acaricié el cabello en señal de agradecimiento por el sumo placer que me estaba brindando y esto era evidente porque yo mismo me estaba mordiendo los labios tratando de controlar todo el mar de sensaciones. Luego fue subiendo poco a poco y volvía tragárselo todo. Yo quería más. Le pedí que se lo metiera todo en la boca y al tiempo tratara de sacar la lengua para lamer a los dos huérfanos. Así lo hizo, botando bastante saliva. Se lo engulló todo lentamente y sacó la punta de la lengua para moverla de lado a lado sobre mis bolas. ¡Qué rico! En esas estaba cuando le dije que sacara la lengua y le di palmaditas con el glande. Luego recorrió con su lengua desde el perineo hasta la punta para después tragárselo. Comenzaba bien abajo, subía a las bolas, seguía por el tronco hasta llegar al glande, que besaba y lengüeteaba bien rico para luego hacer la garganta profunda. Esta fue una de mis favoritas. Así fue intercalando las técnicas y ritmos, con algunas variaciones aquí y allá. Ya se acercaba el final y ella me pedía su lechecita. Me puse de pie para dársela—.
—Abre la boca —Le dije. Ella obedeció y comenzó a jalármela con la boquita abierta. Chorro tras chorro fueron saliendo y aterrizaban en su lengua y dientes. Para mi enorme sorpresa se los tragó. Yo no salía del asombro cuando me dijo: "¡Umm! Tú sí que te alimentas sano. Está bien rica tu leche".
Y así fue el mejor oral que he recibido en mi vida.
Edit:
Sí, faltaban las fotitos del recuerdo (@
Mike Maple):
