Michael Corleone
Cuenta Verificada
Eran los primeros dias del 2016, mientras cuidaba a la perra de una pareja amiga mía que se habían ido de viaje, empecé a revisar los cientos de anuncios de kines de Megaplaza, hasta que ví una que me pareció cachable. Sin pensarlo mucho me alisté y me fui de cacería.
Me hospedé en el Asturias (ese hotel con silla tántrica, espejos en los techos y pole dance), mientras separaba cita con la kine de turno la espere en toalla, bañado y afeitado para la faena.
Pero grande fue mi sorpresa cuando llegó y la flaca en cuestión nada tenía que ver con la se la foto, así que amablemente la despaché y me fui del telo a comer algo por ahí.
Cuando estoy bajando en recepción, veo una chibola de ojos grandes y Ricotona, con un señor culo y unas tetas tremendas (luego me di cuenta que las tetas eran operadas y el culo natural). Se me pasó el hambre y solo pedí una botella de agua haciendome el huevón.
La chibola hacia lío porque no quería dejar su DNI , diciendo que recién había sacado duplicado y que tenía 19. Al final cuando subió para verse con su cliente la abordé.
-"amiga, a qué hora te desocupas?" Le pregunté en una.
- "en una hora...por qué?" me repreguntó palteada.
- "me han estafado y no quiero irme sin cachar, dame tu número, además estás muy bonita"
- "amigo, no me dejan darte mi número por aquí, hay cámaras...bueno dale... Es el 982 645 612 soy Ángela".
Ni bien apunté, ví que salía su foto real en el perfil... "Que confiada" pensé. Me despedí de ella y llegando a la habitación le mandé un mensaje dándole mi número de habitación.
_"505 no demores bb".
En verdad no tenía muchas ilusiones con que la chibola se apareciera pero igual, si no aparecía iba por otra.
Pasada una hora y cuarto, tocan a mi puerta, abro y era ella.
Entró y me saludó con un pico, estaba recién bañada y olía a chibola, inmediatamente armé carpa.
- "Pensé que no venías" le dije mientras la abrazaba, paleteando y tocando su tremendo culo.
- "me caiste bien, solo atiendo a mis clientes antiguos", me contestó la muy zorra.
Luego de decirme la tarifa y que incluía, pasamos a desnudarnos, empecé sacándole todo de arriba para chuparle bien las tetas, ahí ví unas pequeñas huellas de implantes. "Despacito porfa que recién me operé" me dijo pero igual ya estaba en modo violador. Empecé a besarle el cuello y el abdomen hasta bajarle de un tirón ese jean ajustado que le hacía ver tan rico ese culo, lo jale tan fuerte que se fue también su calzón. Su conchita estaba depilada y ese culito era carnoso, cero estrias y celulitis. Ya echada en la cama le empecé a estimular el clítoris a lo que ella cerro los ojos y empezó a gemir, a la vez que se mojaba.
-"Que rico, Papi, ahora me toca". Ya con el piel en la mano agarró mi verga, la miró y me miró toda coqueta "eres vergon, no lo sospechaba", me puso el condón con la boca y empezó a chuparmela duró hasta la garganta, visitando las bolas de cuando en cuando, en ese momento miraba al techo, hacia los espejos que reflejaban la escena tan porno.
Con la verga dura se me quiso subir encima, a lo que yo la tomé del brazo y la lleve al sillón tántrico.
-"Hay que aprovecharlo", le dije
- "Eres un mañoso", me respondió como si fuera la primera vez que se la tiraban ahí.
La puse boca abajo, le abri esas nalgas duras y le metí toda la verga en la concha.
Ángela sintió la pegada y empezó a gritar al inicio de forma fingida y luego ya más real, mientras sus jugos vaginales me empapaban los huevos tras cada embestida.
Conforme pasaba el tiempo ella se dejaba llevar más y más, yendo al mismo ritmo que yo, que solo miraba ese culote y el orificio que lo veía con poco o nada de uso. Oliendo su aroma de chibola (luego me entere que de verdad tenía 19 años y su santo era en febrero), que me arrechaba más y más.
De pronto, tras tantos jadeos ella dió un gemido más profundo y empezó a contraerse, sintiendo como palpitaba su papita: La puta se había corrido antes que yo.
Me paré del sillón, con la verga aún dura y la lleve a la cama.
- "te pasaste, cuando tengo un orgasmo me da sueño".
Yo me reí, mientras me colocaba encima de ella para penetrarla en misionero, cuando sintió de nuevo la pegada me amarró con sus piernas casi sin fuerzas, aumenté la velocidad hasta que me vine dentro de ella. Recién me retiré sin sacarme el condón, sudoroso y exhausto.
- "si quieres ahora puedes dormir un poco", le dije
- "gracias, solo dame 10 minutos porfa"
Se puso de cucharita, jalando mi brazo y empezó a dormir como si fuera una dulce niña y no fuera una puta de 200 soles la hora.
Me quedé mirando al espejo esa escena, tomando energías para el segundo polvo, mientras la miraba dormir, ví un tatuaje con un nombre de mujer, suponiendo que era de ella, como al final fue, tratando recordar cuando había sido la última vez que había dormido con una puta (tuve que retroceder hasta el 2008).
(Fin de la primera parte)

Me hospedé en el Asturias (ese hotel con silla tántrica, espejos en los techos y pole dance), mientras separaba cita con la kine de turno la espere en toalla, bañado y afeitado para la faena.
Pero grande fue mi sorpresa cuando llegó y la flaca en cuestión nada tenía que ver con la se la foto, así que amablemente la despaché y me fui del telo a comer algo por ahí.
Cuando estoy bajando en recepción, veo una chibola de ojos grandes y Ricotona, con un señor culo y unas tetas tremendas (luego me di cuenta que las tetas eran operadas y el culo natural). Se me pasó el hambre y solo pedí una botella de agua haciendome el huevón.
La chibola hacia lío porque no quería dejar su DNI , diciendo que recién había sacado duplicado y que tenía 19. Al final cuando subió para verse con su cliente la abordé.
-"amiga, a qué hora te desocupas?" Le pregunté en una.
- "en una hora...por qué?" me repreguntó palteada.
- "me han estafado y no quiero irme sin cachar, dame tu número, además estás muy bonita"
- "amigo, no me dejan darte mi número por aquí, hay cámaras...bueno dale... Es el 982 645 612 soy Ángela".
Ni bien apunté, ví que salía su foto real en el perfil... "Que confiada" pensé. Me despedí de ella y llegando a la habitación le mandé un mensaje dándole mi número de habitación.
_"505 no demores bb".
En verdad no tenía muchas ilusiones con que la chibola se apareciera pero igual, si no aparecía iba por otra.
Pasada una hora y cuarto, tocan a mi puerta, abro y era ella.
Entró y me saludó con un pico, estaba recién bañada y olía a chibola, inmediatamente armé carpa.
- "Pensé que no venías" le dije mientras la abrazaba, paleteando y tocando su tremendo culo.
- "me caiste bien, solo atiendo a mis clientes antiguos", me contestó la muy zorra.
Luego de decirme la tarifa y que incluía, pasamos a desnudarnos, empecé sacándole todo de arriba para chuparle bien las tetas, ahí ví unas pequeñas huellas de implantes. "Despacito porfa que recién me operé" me dijo pero igual ya estaba en modo violador. Empecé a besarle el cuello y el abdomen hasta bajarle de un tirón ese jean ajustado que le hacía ver tan rico ese culo, lo jale tan fuerte que se fue también su calzón. Su conchita estaba depilada y ese culito era carnoso, cero estrias y celulitis. Ya echada en la cama le empecé a estimular el clítoris a lo que ella cerro los ojos y empezó a gemir, a la vez que se mojaba.
-"Que rico, Papi, ahora me toca". Ya con el piel en la mano agarró mi verga, la miró y me miró toda coqueta "eres vergon, no lo sospechaba", me puso el condón con la boca y empezó a chuparmela duró hasta la garganta, visitando las bolas de cuando en cuando, en ese momento miraba al techo, hacia los espejos que reflejaban la escena tan porno.
Con la verga dura se me quiso subir encima, a lo que yo la tomé del brazo y la lleve al sillón tántrico.
-"Hay que aprovecharlo", le dije
- "Eres un mañoso", me respondió como si fuera la primera vez que se la tiraban ahí.
La puse boca abajo, le abri esas nalgas duras y le metí toda la verga en la concha.
Ángela sintió la pegada y empezó a gritar al inicio de forma fingida y luego ya más real, mientras sus jugos vaginales me empapaban los huevos tras cada embestida.
Conforme pasaba el tiempo ella se dejaba llevar más y más, yendo al mismo ritmo que yo, que solo miraba ese culote y el orificio que lo veía con poco o nada de uso. Oliendo su aroma de chibola (luego me entere que de verdad tenía 19 años y su santo era en febrero), que me arrechaba más y más.
De pronto, tras tantos jadeos ella dió un gemido más profundo y empezó a contraerse, sintiendo como palpitaba su papita: La puta se había corrido antes que yo.
Me paré del sillón, con la verga aún dura y la lleve a la cama.
- "te pasaste, cuando tengo un orgasmo me da sueño".
Yo me reí, mientras me colocaba encima de ella para penetrarla en misionero, cuando sintió de nuevo la pegada me amarró con sus piernas casi sin fuerzas, aumenté la velocidad hasta que me vine dentro de ella. Recién me retiré sin sacarme el condón, sudoroso y exhausto.
- "si quieres ahora puedes dormir un poco", le dije
- "gracias, solo dame 10 minutos porfa"
Se puso de cucharita, jalando mi brazo y empezó a dormir como si fuera una dulce niña y no fuera una puta de 200 soles la hora.
Me quedé mirando al espejo esa escena, tomando energías para el segundo polvo, mientras la miraba dormir, ví un tatuaje con un nombre de mujer, suponiendo que era de ella, como al final fue, tratando recordar cuando había sido la última vez que había dormido con una puta (tuve que retroceder hasta el 2008).
(Fin de la primera parte)

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