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Profesor Mosquera:
Me imagino que el resultado de ayer lo debe tener tan o mas mortificado que todos nosotros. A fin de cuentas, todos sabemos que Usted es un hincha celeste más.
Estoy completamente seguro que ayer, luego del partido, no reparó en mi presencia. Pero estuve ahí, cerca a la banca, y mantenía a duras penas la ecuanimidad ante el dolor del resultado y las mofas de los locales. Mofas más terribles por cuanto eran justas con lo que se acababa de ver. Pero, aunque Usted ni se enteró que yo andaba por ahí, yo no lo perdí de vista ni un sólo momento. Lo vi afuera del camerín, lo vi declarar a la prensa, hasta lo vi hablando por celular alejado de la muchedumbre. Lo vi desencajado, molesto, irritado. No quise estar en sus zapatos.
Es cierto lo que dicen respecto a que luego de la batalla todos somos generales. Pero, también es cierto que una labor como la suya va a estar siempre sujeta a la evaluación constante y pública, a la crítica acuciosa y detallista. Criticar, entonces, no implica necesariamente tenerle mala fe, aunque usualmente quienes lo critican suelen hacerlo con muchísima de ella. Pero es la naturaleza de su labor. Usted está para tomar decisiones y, o bien ser aplaudido por ellas, o bien ser criticado duramente por las mismas. Y mi labor, Usted lo sabe, es tener que criticarlas y serle sincero.
De mi parte, tengo que ser sincero con lo que siento y con lo que vi. Por que, otra cosa que Usted conoce, Sporting Cristal es una pasión para muchas personas y, por esa naturaleza, nos puede elevar a la punta más alta de la euforia o hundir en la más profunda de las depresiones. No puedo ser desleal a ese sentimiento porque implicaría ser desleal a mi mismo. Y si el hombre no se es fiel a sí mismo, no es fiel a nada. Intentaré, entonces, limpiar mi apreciación de adjetivaciones e interjecciones ayer ya hubo bastante de eso pero sólo en la medida de lo posible. Hay cosas que no se pueden decir con eufemismos. Espero que Usted entienda eso como también que todo esto tiene que decirse hoy. Tal vez a Usted le resultaría mejor que estas cosas se dijeran luego, cuando hayan pasado un par de días. Lamentablemente, no tengo la posibilidad de dejar pasar ese tiempo. Lo que tengo que decir, lo tengo que decir hoy.
Profesor, con todo el aprecio y respeto que le tengo, yo lo responsabilizo a Usted directa e íntegramente de la humillante derrota que sufrimos ayer. Y lo hago por varios motivos, muchos de los cuales resultan incluso ser contradictorios con lo que Usted ha dicho y pregonado varias veces. Y se los voy a detallar.
1. Porque traicionó el estilo. Llevamos año y medio hablando y reivindicando que en Sporting Cristal hemos recuperado el estilo. Hemos inflado el pecho diciendo que nosotros podremos perder los partidos pero que no renunciaríamos jamás al estilo. Se ha establecido toda una política institucional en base al estilo buscando que las reservas y los equipos de fútbol formativo jueguen respetando ese estilo. Se están generando indicadores para ver qué tanto se respeta el estilo en cada uno de esos equipos. Inclusive el pasado miércoles, cuando enfrentamos a un rival inmensamente superior que nos dejó chiquitos en todos los aspectos, una de las pocas cosas que se rescataban era que Sporting Cristal intentó, con lo que poco que tuvo, respetar su estilo. Y ayer, el primer equipo el representante por excelencia de ese estilo que reivindicamos jugó a cualquier cosa menos al estilo. Jugamos al pelotazo, jugamos a replegarnos, a buscar que no nos metan gol y a rechazar el balón esperando que los de arriba tuvieran una jugada afortunada. Jugamos a la espontaneidad porque no se vio ningún tipo de orden ni estrategia.
Profesor, no es mentira. Recién a los 72 minutos, ¡72 minutos! Sporting Cristal hizo una jugada que tuviera más de tres pases. ¡72 minutos! ¡Tres pases! ¿Qué pasó? Debo entender que nuestros jugadores, en quienes pesa grandes críticas también, se olvidaron de jugar a lo que venían jugando, en algunos casos, año y medio o, en otros, ocho meses. No, no se olvidan. La única explicación que encuentro es que Usted los mandó a jugar así. Y lo veo porque, si esa no hubiera sido su instrucción, pues en algún momento lo habríamos visto intentar corregir el rumbo. Pero no fue así. Cristal estuvo en el mismo marasmo todo el partido. ¡Todo el partido!
Fue Usted el principal portavoz de que nosotros pusiéramos especial énfasis en cuidar el estilo. Fue Usted con sus propias declaraciones quienes nos dijo a nosotros, los hinchas de Cristal, que Cristal siempre iba a jugar bien. Fue Usted quien nos permitió esperar cada partido cuando menos una vocación por intentar jugar bien, por tener la pelota, por tocarla, por apabullar al rival en función de nuestra precisión.
¿Por qué traicionar al estilo ahora? La lección que queda es que, cuando dejamos de lado el estilo, nos pasan estas cosas pero, ¿acaso era necesario que nos golee este rival para aprender esto que todos ya sabíamos: que sino respetamos el estilo no llegamos a ningún lado?
2. Por que eligió mal a los jugadores. Y me refiero a todos los jugadores. Desde los que lanzó al campo como titulares hasta los que puso en la banca y los que ingresaron como cambios. En cada uno de esos momentos encontré decisiones que me parecen equivocadas a la luz de lo que todos sabíamos y, ahora, también en función de lo que se vio ayer.
Se los voy a mencionar uno por uno:
Eduardo Uribe. Lo de Uribe es una incognita. No recuerdo haberle visto un partido en que calle la boca a sus detractores. A lo más ha mostrado partidos correctos frente a aquellos rivales en los que no ha sido exigido. La idea de su llegada era que juegue como 6 pero Usted lo ha utilizado únicamente como lateral derecho. Siempre, incluso contra Atlético de Madrid. El año pasado rindió de 6, estuvo en el equipo ideal y hasta fue elegido como uno de los mejores jugadores de las finales nacionales jugando en esa posición. Pero usted casi no lo ha puesto ahí. Sus razones tendrá. De lateral no venía rindiendo. Y ahora lo puso de 6 hizo un partido para el olvido. Entiendo que, si su intención era ponerlo de 6, entonces debió entrenar con él en esa posición estos últimos días. Pero, si ha estado entrenando con él jugando de 6, ¿entonces porqué en el partido del miércoles lo mandó a la banda? En este punto lo veo errático y, con todo eso, no sorprende que el rendimiento de Uribe, en un puesto que en teoría conoce, haya sido bajo.
(foto: clubsportingcristal.pe)
Claro, eso no quita que Uribe tiene mucha responsabilidad en su bajo rendimiento. No puede ser que un jugador que supo tener un buen año en una posición se olvide de eso ocho meses después. Eso no es serio, no es profesional. Pero, en todo caso, Usted es el que lo entrena, Usted es el que lo ve. Si Usted lo pone ahí debe ser porque algo le vio. Pero si a pesar de todo eso hay un rendimiento tan bajo quiere decir que o no vio bien o lo puso sabiendo que no iba a funcionar. Y eso es grave, porque compromete el rendimiento del equipo.
Nelinho Quina. Si lo de Uribe es bajo, lo de Quina es realmente de no creer. Quina no es un jugador debutante, es un jugador que lleva años jugando en primera y que incluso ha tenido sus logros y todo. Pero este año es uno de los peores de su carrera, si no el peor. Y eso se ve hace mucho tiempo. Nelinho defiende mal y ataca peor. No suma. Hace tiempo que no suma. Y Usted lo tiene ahí siempre. ¿Por qué? Créame que he intentado entender. He intentado analizar el rendimiento de este jugador en función de lo que puede aportar tácticamente a pesar de su bajo nivel. No encontré nada. He intentado analizar su función anímica dentro del grupo que también puede ser un respaldo importante. Tampoco. Eso se debe atribuirse a que yo, a fin de cuentas, soy un comentarista aficionado y Usted es el entrenador pero, créame, no le encuentro la menor lógica.
(foto: clubsportingcristal.pe)
Entonces, si Quina no suma en juego, no suma en táctica, no suma en lo anímico, ¿por qué sigue siendo el lateral titular de Sporting Cristal? Porque no tenemos otro, me podría decir. Pero ¿no tenemos otro? Creo que existen variantes. Pienso, por ejemplo, en Deyair Reyes. Usted debe tener sus motivos para no poner a Deyair, pero me parece que hacerse la vista gorda sobre lo mal que viene rindiendo Quina no es la solución y resulta más dañino. Pero, aún así, asumamos que efectivamente no tiene un reemplazo para esa banda. Y ojo que han pasado 8 meses de esta temporada, es parte de su tarea encontrarle una salida ingeniosa a ese problema y no simplemente esperar el refuerzo y quejarnos por el jugador que se fue y el refuerzo que nunca llegó. Por eso, ¿vale la pena ir perdiendo tiempo y esfuerzo en un jugador que hace meses ha demostrado que no brinda nada? Mejor aprovechamos ese tema para sumar en la bolsa, que es otra asignatura que Usted tiene pendiente, y darle fuego a un muchacho de la reserva.
Entonces, yo veo a Quina en la formación titular para este partido y, sinceramente, ya no sé qué pensar.
William Chiroque. Chiroque venía de una lesión, no se había recuperado bien aún por lo que me dicen. Claro, Usted eso lo debe saber mejor. Pero, más allá de si estaba o no estaba bien, ¿en serio? Chiroque tampoco ha tenido un buen año. Sus participaciones han sido discretas y sus errores han sido reiterativos. El buen Willliam siempre se equivoca en lo mismo. Usted lo puso ante Atlético de Madrid y mostró más de lo mismo. Lo puso como titular ayer y en dos jugadas se vio que no estaba para el partido. ¿Eso no se pudo ver en los entrenamientos? ¿Que no había otro? Bueno, discúlpeme, pero creo que en ese puesto sí había otra opción: Ramírez. Se podrá decir que en las tragedias siempre es héroe el que no esta y también que Ramírez tampoco es la divina pomada pero, de lo que se ha visto hasta hoy, Ramírez ha dejado más fútbol en las pocas ocasiones que tuvo que Chiroque en todo el año.
(foto: clubsportingcristal.pe)
Irwing Acuña. Profesor, ¿realmente Usted pensó que Acuña iba a darnos el golpe de timón que necesitabamos para reaccionar en un partido que ya nos habíamos dejado dominar y en el que ya íbamos 1 gol a cero abajo? Me imagino que, de repente, Usted lo puso para quemar el último cambio y sumar en la bolsa algunos de esos minutos que no pudimos sumar por el walk over ante Real Garcilaso. Pero, entonces, eso me dice que a Usted el resultado y el rendimiento del equipo le importó muy poco al tomar esa decisión, que su cambio jamás estuvo dirigido a aportar al equipo y eso me parece injusto. Injusto para el equipo, para la hinchada y para el mismo jugador que tocó la pelota dos veces, la mandó a cualquier lado en ambas y de ahí desapareció. En un partido candente y ante un rival difícil, esa decisión no ha sido la más feliz.
Pero, incluso, si la intención de lanzar a Acuña en la cancha era para que centre (que eso fue lo que intentó, el pobre), ¿no habría sido mejor meter a un jugador con habilidad de ataque como Chávez que lo tenía en la banca y no un jugador de medio como Acuña? Posiblemente me podría decir que Chávez no suele rendir bien en los clásicos y que el año pasado se sintió abrumado por este mismo rival y estadio pero, entonces, ¿para qué lo convocó a él y no, digamos, a Marcio Valverde?
Ojo, si se va a decir que no tenemos variantes, que no tenemos plantel, ¿cómo podemos renunciar a tener a un jugador como Marcio Valverde que tiene mucho mejor nivel que varios otros jugadores y algo más de experiencia para partidos como estos?
3. Porque ubicó mal a los jugadores. Profesor, ¿Arroé de nueve? Joazinho no es mal jugador, le falta más compromiso, eso sí, transmite indiferencia y que no le importa mucho la situación. No se le ve indignación ni rebeldía. Hace lo suyo y no busca más. Puede resolvernos un partido aunque luego le de pena hacerlo pero definitivamente no es 9. ¿Se imaginó Usted en la previa a Arroé chocando con Galliquio?
(foto: clubsportingcristal.pe)
Lo peculiar es que, en el primer tiempo, lo que yo vi fue que los tres de adelante rotaron continuamente. Así, en varios momentos, Arroé estuvo de 9, pero también lo estuvo Ross y lo sacaban del área rapidísimo y también lo estuvo Chiroque. Lo que debió ser una variante constante en el ataque terminó siendo un desorden intrascendente porque a ninguno le llegó la pelota. Arroé fue el único que tuvo una pero, la verdad es que, sin sentir el sitio de 9, siempre se pegó a los costados o retrocedió aún más a buscar balón. Hasta que lo sacaron.
Ya le hablé de Uribe y su inexplicable inclusión como 6. También le hablé de Acuña y cómo lo lanzó a ocupar la punta derecha hasta que se equivocó dos veces y se salió del partido. A eso me refiero.
4. Porque planteó mal el juego. Profesor, de los dos equipos, el único que juega al fútbol somos nosotros. Siempre hemos sido nosotros. El que debía preocuparse por anular al rival era el local. No nosotros. ¿Por qué entonces mandó al equipo tan atrás? Comizzo era el que debía pensar cómo quitarle la pelota a Cristal y no descubrirse atrás. Comizzo era el que debía ingeniárselas para ganar la pelota y la cancha. ¿Por qué le regaló cancha y pelota? ¿Por qué no mandó al equipo a que haga lo que nos ha traído resultados: jugar a tenerla? ¿Acaso Lobatón y Sheput son los únicos jugadores en Cristal que saben tocar un balón?
Le voy a ser sincero que la única opción lógica que tengo es pensar que Usted mandó al equipo a tirarse atrás. De hecho, si no hubiera sido así, lo habría visto durante el partido haciendo correctivos y rearmando el equipo. Pero no, no lo hizo. Entiendo entonces que su idea para afrontar este partido fue: tirarse atrás, darle el espacio y el balón a la U, darle la posibilidad que elabore con calma, que nos abran la cancha, que nos ataquen a pelotazos. ¿Y Cristal? Nada. ¡Nada! Cuando la tuvimos, la revoleábamos arriba para lo que se pudieran pelear los 3 de arriba. ¿Ese era el plan? ¿Y el estilo? Bueno, de eso ya le hablé.
Pero, de todas maneras, Profesor. Asumamos por un momento que decidió jugar al contragolpe. El equipo no tenía balance. Para apostar a ese tipo de contragolpe se necesitaba un lanzador que alimente a los de arriba. No mandó un lanzador a la cancha. Otra cosa, ese tipo de juego suele requerir un delantero arriba que impida que los centrales se vayan a nuestra área y que esté ahí también para aprovechar espacios y abrirlos para sus compañeros. ¿Lo tuvimos? ¿Era Chiroque acaso?
(foto: clubsportingcristal.pe)
Por último, si iba a apostar a jugar al centro, al ollazo. ¿Por que no tener en el equipo al jugador que, en todo lo que va del año, es el único que ha sacado dos centros buenos? Me refiero a Ramírez. Ya lo dije, Ramírez no será el jugador descollante pero algo ha hecho que los otros no: tener criterio y puntería a la hora de centrar. Además de ser rápido y gambeteador. Digo, si su instrucción era jugar a colgarnos todos de nuestro arco, ¿por qué no armar el equipo de la mejor manera para eso? ¿Por que no usar al único jugador que tenemos y que parece hecho para jugar así: al contragolpe, como en Ayacucho?
Pero, además, lo que me parece más terrible es que, si ha mandado al equipo a jugar a defenderse ¿por qué la defensa se desordenó? ¿Vio el segundo gol? Era Jorge Cazulo quien tuvo que llegar a marcar de central. Los centrales estaban en cualquier lado y Quina andaba haciendo cualquier cosa. Si la orden que dio para este partido era colgarnos del travesaño, ¿a dónde se fueron los centrales? ¿a dónde se fue el orden defensivo?
De repente, Usted me dirá que la orden no fue jugar así y yo preguntaré ¿entonces, cuál fue? Porque, nuevamente, si hubiera sido otra, lo habría visto lanzando correctivos e intentando mejorar la forma cómo se paró su equipo ayer. O, por lo menos, mandar algún cambio que intente recuperar el planteamiento que Usted pensó. Pero no, eso sí no lo vi.
Creo que con lo comentado hasta el momento, muestro mi punto. El partido ha sido terrible y, por todo esto que le explico, yo creo que la culpa ha sido enteramente suya.
¿Sabe qué pienso? Lo pienso de buena fe y por eso se lo digo con sinceridad. Pienso que Usted hace buen tiempo no tiene buenas relaciones con la dirigencia y la Comisión de Fútbol. Pienso que le molesta que no hayan traído, quizá, algún jugador que Usted pidió o que terminaran contratando algún otro jugador que tenía las características del que pidió pero que no era el que pidió. Pienso que le molesta sobremanera que le digan que hay que cumplir la bolsa de minutos y que tenga que sacrificar el planteamiento inicial para poner un juvenil. Pienso que, entonces, Usted está trabajando con cierto fastidio y frustración y eso se refleja en su equipo. Pienso que en medio de esta batalla sorda entre ellos y Usted, ambas partes se están olvidando de lo que está al medio. Sí, acertó, Sporting Cristal está al medio. Pienso que existe tozudez de su lado, y posiblemente también del otro, y que en esta lucha de dejar en claro quién tiene la razón o quien no tiene la culpa el equipo va jugando a cualquier cosa, las fechas van pasando, los puntos se van perdiendo y Cristal va perdiendo sus chances y yendo directo al fracaso con sus objetivos.
Eso pienso.
Y pienso que esto está mal. Porque Sporting Cristal está por sobre encima de todos nosotros. Es más que nosotros y así debe mantenerse.
Pienso que Usted es un técnico que ha aprendido mucho y conoce muy bien su oficio. Pienso que sabe manejar su camerino y que sabe plantear y replantear un partido. Por eso es que me parece ilógico que partidos como el de ayer le salgan por descuido o accidentalmente, pienso por el contrario que Usted sabía que este resultado era posible y lo aceptó inclusive antes de jugarlo. No por necio ni por indolente, tal vez por tozudez, por hartazgo, por cansancio, por frustración.
Su trabajo no puede escudarse en no tengo jugadores, no tengo recambio o mis jugadores están sentidos. Usted demostró que pudo recuperarlos. Decir que la ausencia de tres jugadores importantes es la diferencia entre un Cristal que juegue a algo y un Cristal que no juega a nada, desmerece totalmente su trabajo y desmerecería su capacidad. Y Usted ha demostrado que tiene capacidad como para superar estos temas. No puede ser que sin Sheput y Lobatón su equipo se derrumbe, no lo puedo imaginar, creo que Usted esta en la capacidad de preparar un partido correcto sin ellos. Moviendo bien las piezas, algo que no ha hecho ayer. Pienso que, si quisiera, ya habría encontrado solución al problema de los laterales, al problema del 9, al problema de los puntas. Pero creo que, antes que encontrar la solución de esos problemas, quiere dejar en claro otras cosas. No discuto la validez de esa intención, pero si me niego a aceptar que se haga a costa de la institución que Usted, yo y millones de peruanos amamos. Eso sí que no.
Hay gente que pide su renuncia. Yo no la voy a pedir. Es más, me pronuncio expresamente y en voz alta por su permanencia. Porque he sido crítico con su llegada y he sido convencido por su trabajo. Porque soy testigo del cariño que le tiene a esta camiseta y porque sé que Usted siente que tiene más por lograr.
Pero sí voy a unir mi voz a todas aquellas voces de hinchas celestes que piden, exigen, intiman, demandan un cambio de rumbo. Un cambio urgente. Cristal no puede perder tan pronto lo que costó tanto construir. Otro partido de estos, otro rendimiento de estos, nos tiraría abajo todo. Acabaría con la fe que se tiene en Usted y en el equipo. Nos mancharía a todos de fracaso. Y lo curioso es que, llegado ese momento, ya dejaría de importar quién tiene razón o quien no, si Usted o la Comisión de Fútbol.
Le pido, por favor, no llegar a esos extremos.
Me imagino que Usted sigue molesto. Yo sigo molesto. No conozco a un sólo hincha celeste que no esté molesto e indignado. Y lo vamos a estar mucho tiempo más. Lo de ayer no se va a olvidar fácil. No se tiene que olvidar fácil. Si lo hemos causado, entonces, tenemos por lo menos que aprender las lecciones.
Que tenga buenas tardes.
4. Manifestamos nuestra disconformidad con los elementos contratados para reforzar el plantel del entrenador. Actualmente el club tiene en sus filas a futbolistas que no dan la talla, que fecha tras fecha son los principales responsables de las malas presentaciones del equipo. Cristal tiene, además, a un jugador extranjero disputando partidos en reserva, algo inadmisible.
Reiteramos nuestro rechazo y consideramos que esta determinación no aporta al progreso deportivo ni al fortalecimiento de la identidad del club.
FUENTE: "PORTAL CELESTE" ..
Opino igual al respecto que no se debe de hacer cambios a mitad de campeonato, lamentablemente nuestro entrenador se equivoco totalmente en los refuerzos de esta año y no lo quiere admitir, será soberbia no se.
. Si la directiva pretende trabajar a largo plazo con resultados internacional satisfactorios entonces Mosquera no era el hombre para llevar ese proceso.