canebo
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Parte 1:
En una chamba que tuve a la par de la universidad, entró una chica nueva y a las semanas comenzó a fijarse en uno de mis patas, la chica a quien llamaré Elva, era de pelo castaño, trigueña de ojos saltones color café, de buenas caderas y unas chichis muy apetecibles, ps en una de las tantas coordinaciones que tenía que hacer con otra oficina, ella estaba muy guapa, con un polo de manga larga color beige, y un pantalón que le moldeaba su buena figura, con esos tacones ya a uno la hacia fantasía de una escena sexual al toque, y sus lentecitos con montura gruesa, terminaban por arrechar a cualquiera y robar miradas de todos los trabajadores.
Mi pata a quien llamaré David, ps este se manejaba su pepa ps, era plantadazo , y tranquilo aparentemente pero era igual o más pendejo que este humilde servidor, ps era cotizado, aun cuando él tenía ya su flaca por ahí, y uno que otra capillita fuera de Lima. En estos días, Elva siempre le daba sus miraditas y coqueteos pero David no le paraba boliche y ella se quedaba con la intriga de pedirle su fono, pero sus oficinas no tenían mucha interacción, y más era contacto a nivel de jefes pero no se había dado la interacción entre ambos, entonces David que era muy amigo mío me hace saber un día que Elva por ahí le hacía miraditas coquetonas en pleno almuerzo, que casi siempre la tenía cerca mirándolo y otras cosas más, en fin, yo le decía que normal le dé sajiro como pa ver qué pasa, la cuestión es que me encuentro con Elva al salir y me intercepta, para preguntarme cosas de mi área, ps le habían dicho que yo estaba en esa área y podía consultarme, quizás también la chica según ella olfateaba que como era amigo de David yo podría servirle para llegar a él y ella por ahí tenía miedo de acercase a él de frente.
(Continuará)
En una chamba que tuve a la par de la universidad, entró una chica nueva y a las semanas comenzó a fijarse en uno de mis patas, la chica a quien llamaré Elva, era de pelo castaño, trigueña de ojos saltones color café, de buenas caderas y unas chichis muy apetecibles, ps en una de las tantas coordinaciones que tenía que hacer con otra oficina, ella estaba muy guapa, con un polo de manga larga color beige, y un pantalón que le moldeaba su buena figura, con esos tacones ya a uno la hacia fantasía de una escena sexual al toque, y sus lentecitos con montura gruesa, terminaban por arrechar a cualquiera y robar miradas de todos los trabajadores.
Mi pata a quien llamaré David, ps este se manejaba su pepa ps, era plantadazo , y tranquilo aparentemente pero era igual o más pendejo que este humilde servidor, ps era cotizado, aun cuando él tenía ya su flaca por ahí, y uno que otra capillita fuera de Lima. En estos días, Elva siempre le daba sus miraditas y coqueteos pero David no le paraba boliche y ella se quedaba con la intriga de pedirle su fono, pero sus oficinas no tenían mucha interacción, y más era contacto a nivel de jefes pero no se había dado la interacción entre ambos, entonces David que era muy amigo mío me hace saber un día que Elva por ahí le hacía miraditas coquetonas en pleno almuerzo, que casi siempre la tenía cerca mirándolo y otras cosas más, en fin, yo le decía que normal le dé sajiro como pa ver qué pasa, la cuestión es que me encuentro con Elva al salir y me intercepta, para preguntarme cosas de mi área, ps le habían dicho que yo estaba en esa área y podía consultarme, quizás también la chica según ella olfateaba que como era amigo de David yo podría servirle para llegar a él y ella por ahí tenía miedo de acercase a él de frente.
(Continuará)
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