Principiante66
Capitan
Aunque parezca inverosimil, pero cierto.
No se que paso. Soy muy timido con las mujeres. Lo que mas recuerdo de ella era los bailes que hacia en el tubo de un hotel bien pinton alla en la Av. Costanera, el champagne, las burbujas... el licor a fresa en sus labios rosas. Mi cumbiambera, como le gusta que la llame, aparecio en un momento de mi vida que no debio. La conoci antes de ser conocida, prima de una amiga mia, conversabamos de vez en cuando e intuia en la forma como me miraba que la atraia a sobremanera. Siempre fui muy timido, y en la universidad fui muy callado. Eso le gustaba de mi, que sea "seriecito", que no la vea con ojos de enfermo ni le metiera floro barato, yo solo queria ser su amigo, ademas habia respeto por ser amigo de sus tios y cercano de sus padres. No cofrades no era cabro, era timido.
Envidiada por un cuerpo endiosable, como casi todas sus primas, le encanta bailar y cantar, aunque no me gustara la musica que cantara, pero era lo suyo, entretenia y se lucia, era lo suyo. Mi forma de ser y la excusa de los estudios aplazaron el destino, era de esperarse que se hiciera algo conocida y mientras la gente coreaba su nombre yo exigia silencio en las aulas. Cuando nos topabamos en una reunion de su familia, me preguntaba cuando la invitaba a salir, ¿Quien era yo para invitarla? No tengo carro, soy estudiante misio y por si fuera poco timido. Sus partidos era pseudo futbolistas de cuarta, gringos y uno que otro mafioson. Solo le sonreia, ella me sonreia; ella se resignaba.
Acabe la universidad, y el empleo cayo por propio peso, mal no me fue, conoci a una jefa que era una enferma; me enseño mucho. Me entere que ella estaba por las europas de gira en gira, y cuando la veia en las impresiones a veces me maldecia. Era un buen culo, una diosa canela que todos tocaban en papel fotografico y yo un huevon.
Pasaron unos años y una chica se me mando. ¿Increible?, le dije que si. ¿Hembrita? no cofrades era timido. Pasaron 2 años y la idea de formar un hogar llego a mi mente, luego de salir de un hogar dividido, minado y destrozado, formar uno a creacion y obra de la mente de la chica que aposto por mi sonaba cada vez mas emocionante en mi corazon. La chica no era como la cumbianbera pero como toda chica del rico norte tiene sus curvas bien puestas. Pero de ella no voy a hablar, esta prohibida. La semana 2 de febrero fuia averiguar el anillo de compromiso, aunque caro, se que era algo que le iba a gustar y mucho, luego de hacer las averiguaciones y proformas, enrumbe a la casa de mi tia politica, tia tambien de la cumbianbera. Grata y enorme sorpresa fue en verla ahi, mas mujer, mas madura. Era verano y estaba con un short de jean ajustado microminifaldero, sandalias de color aguamarina, uñas de color rojo, una blusa escotada blanca, el pelo suelto ensortijado teñido de castaño con rayos amarillos, lentes de sol negro, tenia la forma de que lujuria deberia. Recuerdo hasta su maquillaje y lo recuerdo porque fue la primera vez que la desee de una forma inexplicable. Reia con sus primas, la vi de lejos, me fui a la cocina a saludar a mi querida tia. Regrese a la terraza a saludar a los señores y me dijeron La XXXX llego antes de ayer, anda saludarla hijo. Hijo... esa palabra que en conversaciones calientes del chat en el facebook me decia que queria. Me vio de lejos y se ilumino la sala, sonrio mas y me acerque y le di un abrazo y senti un apreton fuerte por parte de ella. Luego de las conversaciones con las familias una de sus primas se acerca y me dice que: Principiante, la XXX quiere comocer a tu chica, ¿por que no la has traido?, recorde que ni la habia llamado con la emocion del anillo y de ese cuerpo me olvide de ella. Estaba en el norte viendo a su familia explique y en frente de sus primas, mi cumbianbera, como le gusta que le llame, dijo: No se que le has visto a ella que no tenga yo y rieron y me fregaban al unisono. Yo estaba rojo de verguenza pero respondi para mis adentros, huevos para manejarme.
Tragos van, tragos vienen. Yo no soy de tomar mucho asi que no hubo complicidad del trago. Ella se me acerca y me dice al oido, me voy a quedar en Lima 2 semanas; es la ultima vez que te digo para salir. La mire a los ojos y una de las pocas veeces sin titubear, con voz firme y decidida le conteste: el martes almorzamos. Era Sabado.
No se que paso. Soy muy timido con las mujeres. Lo que mas recuerdo de ella era los bailes que hacia en el tubo de un hotel bien pinton alla en la Av. Costanera, el champagne, las burbujas... el licor a fresa en sus labios rosas. Mi cumbiambera, como le gusta que la llame, aparecio en un momento de mi vida que no debio. La conoci antes de ser conocida, prima de una amiga mia, conversabamos de vez en cuando e intuia en la forma como me miraba que la atraia a sobremanera. Siempre fui muy timido, y en la universidad fui muy callado. Eso le gustaba de mi, que sea "seriecito", que no la vea con ojos de enfermo ni le metiera floro barato, yo solo queria ser su amigo, ademas habia respeto por ser amigo de sus tios y cercano de sus padres. No cofrades no era cabro, era timido.
Envidiada por un cuerpo endiosable, como casi todas sus primas, le encanta bailar y cantar, aunque no me gustara la musica que cantara, pero era lo suyo, entretenia y se lucia, era lo suyo. Mi forma de ser y la excusa de los estudios aplazaron el destino, era de esperarse que se hiciera algo conocida y mientras la gente coreaba su nombre yo exigia silencio en las aulas. Cuando nos topabamos en una reunion de su familia, me preguntaba cuando la invitaba a salir, ¿Quien era yo para invitarla? No tengo carro, soy estudiante misio y por si fuera poco timido. Sus partidos era pseudo futbolistas de cuarta, gringos y uno que otro mafioson. Solo le sonreia, ella me sonreia; ella se resignaba.
Acabe la universidad, y el empleo cayo por propio peso, mal no me fue, conoci a una jefa que era una enferma; me enseño mucho. Me entere que ella estaba por las europas de gira en gira, y cuando la veia en las impresiones a veces me maldecia. Era un buen culo, una diosa canela que todos tocaban en papel fotografico y yo un huevon.
Pasaron unos años y una chica se me mando. ¿Increible?, le dije que si. ¿Hembrita? no cofrades era timido. Pasaron 2 años y la idea de formar un hogar llego a mi mente, luego de salir de un hogar dividido, minado y destrozado, formar uno a creacion y obra de la mente de la chica que aposto por mi sonaba cada vez mas emocionante en mi corazon. La chica no era como la cumbianbera pero como toda chica del rico norte tiene sus curvas bien puestas. Pero de ella no voy a hablar, esta prohibida. La semana 2 de febrero fuia averiguar el anillo de compromiso, aunque caro, se que era algo que le iba a gustar y mucho, luego de hacer las averiguaciones y proformas, enrumbe a la casa de mi tia politica, tia tambien de la cumbianbera. Grata y enorme sorpresa fue en verla ahi, mas mujer, mas madura. Era verano y estaba con un short de jean ajustado microminifaldero, sandalias de color aguamarina, uñas de color rojo, una blusa escotada blanca, el pelo suelto ensortijado teñido de castaño con rayos amarillos, lentes de sol negro, tenia la forma de que lujuria deberia. Recuerdo hasta su maquillaje y lo recuerdo porque fue la primera vez que la desee de una forma inexplicable. Reia con sus primas, la vi de lejos, me fui a la cocina a saludar a mi querida tia. Regrese a la terraza a saludar a los señores y me dijeron La XXXX llego antes de ayer, anda saludarla hijo. Hijo... esa palabra que en conversaciones calientes del chat en el facebook me decia que queria. Me vio de lejos y se ilumino la sala, sonrio mas y me acerque y le di un abrazo y senti un apreton fuerte por parte de ella. Luego de las conversaciones con las familias una de sus primas se acerca y me dice que: Principiante, la XXX quiere comocer a tu chica, ¿por que no la has traido?, recorde que ni la habia llamado con la emocion del anillo y de ese cuerpo me olvide de ella. Estaba en el norte viendo a su familia explique y en frente de sus primas, mi cumbianbera, como le gusta que le llame, dijo: No se que le has visto a ella que no tenga yo y rieron y me fregaban al unisono. Yo estaba rojo de verguenza pero respondi para mis adentros, huevos para manejarme.
Tragos van, tragos vienen. Yo no soy de tomar mucho asi que no hubo complicidad del trago. Ella se me acerca y me dice al oido, me voy a quedar en Lima 2 semanas; es la ultima vez que te digo para salir. La mire a los ojos y una de las pocas veeces sin titubear, con voz firme y decidida le conteste: el martes almorzamos. Era Sabado.