Tengo la suerte de haber ido a Chile en varias oportunidades, sea por turismo, trabajo o estudios, pero ninguno se comparara la vez cuando fui con la gente de mi colegio por viaje de promocion. A continuacion les relatare lo que acontecio durante dicho viaje a mediados de la decada pasada.
Para empezar, estudie en un colegio de hombres, por lo que se podran imaginar la arrechura que teniamos todos, con la consigna de reventar a todas las chilenitas que osaran ponerse al frente y dejarlas mas rotas de lo que son.
El dia que llegamos a Santiago nos alojamos en el hotel, de inmediato un duchaso para estar "fresh", y de ahi al mas grande parque de diversiones de la ciudad: Fantasilandia. Los juegos mecanicos quedaron de lado para los mongos que solo querian seguir viviendo infantilmente, pero para los machos peruanos que queriamos dejar sin orto a las vecinitas del sur fuimos en plan de gilear y ligar. Avistamos un grupo de seis chicas, les buscamos el habla y felizmente logramos entrar (pensamos que nos chotearian por ser de Peru, pero no paso... Positivos!). Del grupo destacaba una chica rubia, hermosisima, blanca como la nieve, de ojos azul cielo y labios perfectos (para la epoca que moriamos por Claudia Schiffer, ella facilmente podria ser la hermanita menor de la teutona), amen que tenia un cuerpo proporcionado con unas tetas que parecian pequenias (mas adelante les dire que me equivoque) aunque de derrier no fue muy premiada. Me quede prendado de ella. Estudiaban no se en que colegio de la comuna de Las Condes y me empate con LA flaca. Subimos a unos juegos, caminamos conversando animadamente; me hizo la pregunta clasica si tenia enamorada, le dije que no (que canalla! Pues si tenia, jeje) y ella tampoco estaba con nadie. Me repregunta donde estaba alojado. Le indique el lugar y me dijo "Se donde esta". Le respondi "Bueno, si sabes donde queda, que tal si nos encontramos pasado maniana para que me hagas conocer tu ciudad...?". Ella acepto, y como tambien estaba de vacaciones (que suerte de verdad!) no se hizo problemas.
A los dos dias (que para mi fueron una eternidad) no sabia como decirle a los profesores que no queria ir a la excursion programada. Como mis companieros de cuarto sabian que me habia salido el plancito con la flaca no iban a decirles nada, pero tenia que inventar la excusa perfecta. Me hice el enfermo, dije que algo me cayo mal de lo que habia cenado la noche anterior. Uno de ellos comento "Facil que este tragon se metio el banquete, y la comida de aca, como es pesima, le cayo bomba...". Atracaron con la historia y me dejaron en el hotel. No cabia mas de contento, el plan caminaba bien.
Llame a la blonda y quedamos en reunirnos cerca del hotel. Nos movilizamos en metro, ya que es facil y barato. Caminamos por la avenida principal del centro de Santiago, conocimos unos cuantos lugares turisticos y, a la hora del almuerzo, me sugirio para ir a comer comida italiana. Me parecio perfecto. Pedimos una pizza, me hablo de su vida, yo de la mia, y decia dentro de mi "Ojala que no me enamore porque me esta pasando". Lo peor de todo es que era correspondido. Ustedes saben, eso sucede cuando uno es adolescente. No se en que momento yo, todo rochoso, intento una maniobra de querer abrazarla a lo torpe y le golpeo sutilmente la cabeza, a lo que ella en vez de enojarse, sonrio y recosto su hermosa cabecita en mi hombro; tomo mi mano, me la apreto y me dijo que la bese. Ni corto, menos perezoso, comence a besarla como loco y ella igual. Mande al olvido -momentaneamente- a mi flaca de Lima y como dice el dicho "Ojos que no ven, corazon que no siente...", menos que en ese tiempo no existia el internet y las llamadas al extranjero te salian un ojo de la cara y un testiculo empeniado.
Estabamos en unos chapes que facil harian palidecer las relaciones diplomaticas entre ambos paises, que en una me lanzo y le digo "Que tal si vamos a mi hotel (como bueno) y estamos mas comodos...?". "Y tus amigos no habran regresado?". "No... Se han ido a no se donde diablos y no regresan hasta la noche, ya que es lejos".
Vi un extranio brillo en sus ojos de coqueteria y felicidad, quizas el reflejo de los mios en esos dos cielos terrenales donde facilmente los angeles conviven alegremente entre ellos. Tomamos el metro, casi me roban ahi (no se como, pero casi me sacan toda la bolsa de viaje del canguro), llegamos a la estacion del hotel, y entramos juntos. No se dieron cuenta en recepcion, cosa que facilito mas las cosas.
Mientras subiamos por el ascensor los chapes iban y regresaban, llegamos al cuarto, abro la puerta y de la nada se me ocurre la idea de cargarla. Le digo "Vamos a entrar como si recien nos hubieramos casado". Se rio graciosamente y me dio otro beso. Pateo la puerta, la llevo hasta mi cama (habian tres camas por habitacion) y empezamos con lo nuestro. Le saco su casaca, su blusa, su jean, y la dejo en brassier y calzon. Me quede observandola y contemplandola largo rato. No podia creer que me iba a comer a un angel! Ella me coge del cuello, me acerca hacia ella y me da otro beso, muy apasionado, y empieza a sacarme el sueter y el polo en un tiempo; el pantalon y yo ya estaba como el mastil del Huascar. Me echo sobre ella y empiezo a besar su cuello con ternura, le mordia y lamia suavemente el paladar de su orejita para excitarla (eso me funcionaba con mi flaca con buenos resultados) para despues bajar por el cuello, pecho y le saque el bra. Antes mencione que crei que ella no tenia mucho, pero para mi buena suerte me habia equivocado: seria un 36B, perfectos, en armonia, de pezones rosaditos y riquisimos. Les pase la lenguita, jugue mucho con ellos, lacte como bebe y comence a bajar los dedos de la mano directamente a su calzon buscando su vaginita. La senti humeda y olia rico. Le saque el calzon, la sopee mientras ella se arqueaba de placer y senti que se le vino un orgasmo. Me jala de los cabellos y casi me deja sin el mechon del corte "honguito" de la epoca noventera. Segui jugando con su vagina, repasando de vez en cuando sus entrepiernas blanquitas. En eso le pido que me haga un oral, cosa que accedio y me dio una mamada que no fue buena, pero si gratificante (creo que no le gustaba -me lo confeso despues- e igual lo hizo, merito rescatable, ya que ademas se quedo mirandolo como diciendo si le cabria en su boquita mi bazuca). Despues nos echamos en la cama y le aplique en misionero, perrito, en el borde y al final parados contra la pared. La flaquita lo disfruto muchisimo, gimio varias veces y le habre sacado unos tres orgamos en total. Habremos estado unas tres horas en total y por el temor que nos ampayaran (sobretodo los arrechos de mis companieros de cuarto), nos duchamos, cambiamos, bajamos al lobby del hotel, justo cuando en eso veo llegar los buses con mis companieros dentro regresando del paseo. Ellos me vieron con la chica, y tambien los profes. No sabia que decir en ese momento, pero se me prende el foco y les digo "Es una amiga que conoci antes de ayer en el parque de diversiones. Vino a buscarme y me invito a comer algo por aca cerca". Se tragaron el cuento, mas mis dos amigos con los que compartia cuarto estaban que se cagaban de risa. Les hice una senia que sean mas solapas y me fui con mi princesa a caminar un toque haciendo tiempo para despues dejarla en la estacion de metro. Nos dimos nuestras direcciones para estar en contacto, un beso que parecio nunca terminar, y con la promesa que nos veriamos mas adelante, sea en Peru o en Chile. Nos carteamos (tecnologia del siglo pasado) un par de meses, y de ahi cada quien siguio su camino y no supe mas de ella.
"Que sera de su vida?" a veces me pregunto, pero imagino que debe estar ya casada, con hijos, dignos herederos de su belleza. Sin embargo su recuerdo nunca se borrara y ha de permanecer como un tatuaje en lo mas profundo de mi ser.