Celestesky7
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Hola foreros, antes que nada quiero decirles que soy muy fan de este sitio, que he tenido orgasmos muy intensos leyendo sus relatos. Por obvias razones no voy a dar mis datos exactos, pero me presento de forma general. Soy una mujer de una ciudad de la sierra, estudie una ingeniería y estoy en base 3. A diferencia de lo que piensa la mayoría hay mujeres de la sierra que somos muy calientes y hasta morbosas, pero sin llegar a ser ninfomanas. En el aspecto físico no soy una modelo, pero tengo lo mio. Mido mas o menos 1.50 y mis pompas y senos son normalitos y soy un poco gordita. Creo que al no ser una belleza he tenido pocos novios de verdad, pero debido a mi calentura muchos amantes.
Despues de masturbarme mucho leyendo sus relatos me anime a escribir algunas de mis experiencias siempre que mi tiempo lo permita. Actualmente trabajo en campo, debido a mi carrera (ingenieria) por lo que siempre estoy rodeada de hombres que a veces me tratan como uno de sus amigos mas, pero que en realidad me calientan debido a su forma de expresarse. Todos los dias me toca trabajar con grupos y grupos de hombres, asi que estoy muy acostumbrada a tratarlos, e incluso a tener fantasías con muchos de ellos.
Hoy les contaré mis inicios con mi primer amante, al que llamaré Miguel. Obvio que en ese entonces yo lo consideraba mi novio, pero despues me enteré que solo era su amiga con derechos entre varias, pero bueno fue mi primer hombre. Entonces yo tenía 21 años, ya había terminado la carrera y comencé en mi primer trabajo. Antes ya había tenido experiencias calientes, incluso veía mucho porno, pero nunca me había acostado de verdad con un hombre. Con algunos de mis compañeros de la universidad tuve manoseos incluso me dejé meter el dedo y a chuparles la pinga, pero nunca concreté algo mas intimo.
A Miguel lo conoci en el trabajo unos dias despues de comenzar. El se encargaba de temas logísticos y esas cosas, por lo que comencé a hablar mucho con el. Al principio no me interesó mucho, ya que estaba muy preocupada por el bachiller y la tesis, pero poco a poco me fue llamando la atención, quizá por todo el tiempo que pasaba conversando por temas del trabajo. Poco a poco me fui acostumbrando mas y mas e incluso comencé a buscar excusas para quedarme en su oficina. El mide 1.80 es mas o menos alto, y entonces se notaba que estaba bien conservado. El caso es que la confianza llego a ser tal que el se soltaba bastante en temas eroticos, y obvio yo me sonrojaba, no quería que sepa como soy, pero en el fondo me derretia por escuchar mas. Y así paso el tiempo y había mucha mas confianza. Incluso llegue a insinuarme y en una ocasión llegue a sentarme en sus piernas y llegue a sentir su rica pinga, ya había mucha tensión entre los dos. Tenía muchas fantasías con el y me masturbaba mucho viendo sus fotos, pero no me atrevía a dar el siguiente paso. El caso es que la empresa en la que trabajabamos lo destacó a Lima por temas de capacitación y yo me quedé un poco triste y caliente también. Pero tuve tanta buena suerte que a mi me enviarían a Lima también a capacitarme en unos temas de los que me haría cargo, no se si fue el destino, pero para mi todo fue un sueño hecho realidad.
Como no conocía a mucha gente en Lima, lo primero que hice fue buscar a Miguel y pedirle recomendaciones para hospedarme, para que me recomiende lugares para comer y todo eso, fue muy amable conmigo y me trató muy bien, me gustaba como juntaba el buen trabajo con las cosas pícaras. La capacitación fue muy cansada, y casi siempre llegaba muerta a mi hospedaje y no tenía tiempo para ver a Miguel. Cuando llegó el viernes fue cuando se dió todo. Pensé que todo sería igual la misma rutina, pero no. Miguel me escribió para salir en la noche, me dijo para ir un rato a cenar y luego a divertirnos un rato a la discoteca. Estaba ansiosa todo el día, pensando en que pasaría al final, no dejaba de pensar en algo muy romantico, o estar muy ilusionada, pero me llevaría otra sorpresa. Me arreglé lo mejor que pude incluso me puse una ropa interior muy sexy fantaseando en todo momento, no dejaba de mojarme. Llegando la tarde, fuimos a cenar, me llevó a un lugar muy bonito en Barranco y como siempre con sus ocurrencias pícaras me hacía reir y sonrojar. Terminamos y me dijo para ir a una discoteca, y yo mas que dispuesta dije que sí. Llegamos y el ambiente era muy estremecedor, había mucha música fuerte, muchas chicas sexys y chicos muy guapos, yo me sentía un poco intimidada. Me invitó unos tragos y comenzamos a bailar. Al principio todo tranquilo, pero poco a poco el ambiente se calento y comenzamos a hablar mas cerca, a pegarnos mas e incluso llegó a rozarme las nalgas. El alcohol hizo efecto y comencé a perder la verguenza y cada vez nos pegamos mas y mas, hasta que en uno de esos arrimones el se atrevió a besarme la oreja. Para los que me conocen, saben que las orejas son mis puntos débiles. yo no pude mas con la sensación y me colgue de su cuello para darle un tremendo beso a lo que el respondió salvajemente metiendome la lengua y poco a poco bajando sus manos hasta mis nalgas. Yo hasta ese entonces estaba super exitada, mojada y ademas con el alcohol encima y lo único que atine a hacer es darme la vuelta y darle mis nalgas mientras comenzaba a tocarle su miembro por encima del pantalon. Lo sentí durísimo y eso me exito un montón. Luego la música acabo y fuimos a sentarnos a descanzar un tiempo. Yo no podía con mi calentura por lo que apenas el se sentó, yo me senté sobre el para seguir sintiendo su miembro, mientras agarraba su mano para que tocara mi conchita por encima del pantalon. No quería que la exitación se terminara por lo que me desabroche el pantalon y le pedí que me metiera el dedo. El no perdió la oportunidad y en menos de cinco segundos ya tenía uno de sus dedos dentro de mi conchita mientras me decía cerquita al oido que lo tenía muy cerradito y me decía que me iba a partir en dos con su pinga. Eso me exito mas por lo que le arranque otro beso muy intenso, que hasta casi me hace llegar. De ahi nos calmamos un rato, el se acerco a mi oido y me dijo "quieres que te haga mi hembra", nunca voy a olvidar esas palabras, que me llegaron al fondo y lograron que me moje aún mas. Yo le respondí "quiero que me hagas todo lo que tu quieras" y acto seguido nos paramos me tomó de la mano y salimos volando rumbo a su hotel. En el taxi no paramos de besarnos ni manosearnos hasta que llegamos y nos fuimos casi corriendo a su cuarto. Apenas llegamos nos comenzamos a besar y a manosear intensamente, yo no paraba de sobar su pinga sobre el pantalon y el no paraba de masajear mis nalgas y pasarme mano. Como siempre me gusta hacer con mis amantes, me di la vuelta y comencé a sobar mis nalgas contra su pinga y le decia que me diga cosas sucias, estaba fuera de mi, solo quería ser sometida. Despues de un rato de tanto manoseo me decidí y me arrodille, hasta tener mi cara a la altura de cintura, le baje el cierre, le hice a un lado el interior y por fin pude ver con lo que tanto había fantaseado. Una pinga gruesa y larga que apenas salió me dio un golpecito en la cara. No sera la mas grande que haya visto en todo mi historial de aventuras, pero si que me dio una muy buena primera impresión. Sin dudarlo comencé a besar su miembro, a lamerle la punta a besar sus huevotes, si que los tenía grandes y estaban colgados en su miembro. Trate de meterme uno a la boca, luego volví a chuparle su miembro y casi me atragando al intentar comerlo todo, tal como veía en los videos porno que me gustaban. No se cuanto tiempo deguste su miembro, pero si que me parecieron horas y no quería dejar de chuparlo, de verdad estaba muy a falta de sexo. Luego de tanto manoseo dijo que era su turno, me ayudo a levantarme, creo que de tanto estar arrodillada no tenía fuerza en las piernas, me agarro de las nalgas me levanto y me tiró a la cama. Yo en completo extasis, abrí lo mas que pude mis piernas, aún con pantalon y le dije "hazme tu hembra". Me desabrochó el pantalon y lo quitó hasta la altura de las rodillas yo estaba como amarrada y comenzó no a besar mi conchita, sino a tocarme, y lo hacía tan bien que me mojaba mas y mas. En una de esas se dedico observar mi cosita y abrió los labios y me dijo de verdad estas cerradita pero hoy te voy a abrir. Me metió un dedo hasta el fondo, me causo un fuerte dolor, pero no quería que pare, así que le dije que siga. Me pregunto cuantos dedos podía aguantar y le dije, todos los que tu quieras, soy tuya. Y sin piedad me metio dos hasta tres dedos, de verdad me sentía totalmente abierta , violada y maltratada, pero me encantaba. Pero eso no es lo peor que me pasaría esa noche. Acto seguido ya con un poco menos de calor, pero aún besandonos y tocándonos, nos desnudamos completamente, la ropa practicamente volo por los aires, me gustaba como mientras nos desnudabamos me toque, me bese, me manosee y me diga cosas sucias. Nos terminamos echando en la cama, era delicioso tenerlo cerca yo con las piernas abiertas y el a punto de hacerme su hembra. Mientras nos besábamos el intentaba encajar su pinga en mi conchita, pero creo que de verdad yo estaba muy cerrada, por que de verdad no entraba, y como dije no es que el lo tuviera grande, solo que de verdad yo estaba muy estrecha. Asi estuvimos mucho rato con ese juego, hasta que el alcohol comenzó a bajar y el deseo también. Despues de un rato dejamos de intentarlo y decidimos descanzar. Me acurruque en sus brazos y dormimos. No se cuanto tiempo pasó, pero me desperte con una calor única, mi cuerpo ardía y mi conchita también. Comencé a moverme, a tocarle y pronto despertó y comenzó con el manoseó también, nos besamos apasionadamente y de nuevo le abri las piernas. Y esta vez supongo que por el calor, o no se por que su pinga entro hasta el fondo de un solo golpe, hasta llegue a sentir su huevos junto a mi conchita, obvio yo sentía que me había roto algo, sentía como si me hubiera rasgado incluso senti que estaba rota y que estaba botando sangre, pero no , solo eran mis fluidos y los de el, mezclados. En ese momento solo atine a gemir como en los videos que veia, a decirle que no lo saque y que me de duro, ya no se lo que decia. Solo seguía moviendose mas y mas, hasta que comenzó el mete y saca y me hizo ver estrellas, me sentía como un trapo sin reacción y solo pedía mas y mas y el me daba durísimo, no se cuanto rato estuve en trance, pero de un momento a otro comence a temblar y todo mi cuerpo sentía como electricidad y ya no pude mas y tuve un orgasmo intenso, incluso creo que me orine un poco, por que no aguante. Pero el no paraba y seguia y seguia dandome con todo, yo solo sentía esas cosquillas extrañas y quería que se salga de mi, pero no me hacía caso, hasta que me prendí otra vez y esta vez mas cuerda le comence a decir cosas sucias, que solia escuchar o leer, como dame mas duro, hasme tu hembra, mas rapido papi, cachame, dame tu pinga, dame tu leche, preñame y cosas así. El caso es que en el calor del momento el solto todo su liquido dentro de mi y eso me hizo llegar otra vez. Fue tan fuerte esa llegada que sentí que se me salían las entrañas. Le enrosque las piernas en la cintura y le dije preñame, obvio que era solo el calor, pero eso lo hacía mas emocionante. Al final, ya poco a poco su pinga se puso flacida, pero no perdía su tamaño, aun me sentía llena con su carne dentro de mi, nos separamos y comenzó a salir algo de mi, sentí como si fuera mi regla, pero no era todo el semen que me había dejado y me sorprendio mucho al sentir eso. Despues de eso me nos acurrucamos, nos besamos y nos quedamos dormidos.
Creo que el relato se hizo muy largo, pero ya en otra ocasión contaré que hicimos al dia siguiente y los siguientes días, como la primera vez que se corrio en mi cara (solo dias despues, hasta ese nivel llegaba mi calentura) o como practicamente me violo por atras estando borrachos. Hasta una nueva oportunidad.
Despues de masturbarme mucho leyendo sus relatos me anime a escribir algunas de mis experiencias siempre que mi tiempo lo permita. Actualmente trabajo en campo, debido a mi carrera (ingenieria) por lo que siempre estoy rodeada de hombres que a veces me tratan como uno de sus amigos mas, pero que en realidad me calientan debido a su forma de expresarse. Todos los dias me toca trabajar con grupos y grupos de hombres, asi que estoy muy acostumbrada a tratarlos, e incluso a tener fantasías con muchos de ellos.
Hoy les contaré mis inicios con mi primer amante, al que llamaré Miguel. Obvio que en ese entonces yo lo consideraba mi novio, pero despues me enteré que solo era su amiga con derechos entre varias, pero bueno fue mi primer hombre. Entonces yo tenía 21 años, ya había terminado la carrera y comencé en mi primer trabajo. Antes ya había tenido experiencias calientes, incluso veía mucho porno, pero nunca me había acostado de verdad con un hombre. Con algunos de mis compañeros de la universidad tuve manoseos incluso me dejé meter el dedo y a chuparles la pinga, pero nunca concreté algo mas intimo.
A Miguel lo conoci en el trabajo unos dias despues de comenzar. El se encargaba de temas logísticos y esas cosas, por lo que comencé a hablar mucho con el. Al principio no me interesó mucho, ya que estaba muy preocupada por el bachiller y la tesis, pero poco a poco me fue llamando la atención, quizá por todo el tiempo que pasaba conversando por temas del trabajo. Poco a poco me fui acostumbrando mas y mas e incluso comencé a buscar excusas para quedarme en su oficina. El mide 1.80 es mas o menos alto, y entonces se notaba que estaba bien conservado. El caso es que la confianza llego a ser tal que el se soltaba bastante en temas eroticos, y obvio yo me sonrojaba, no quería que sepa como soy, pero en el fondo me derretia por escuchar mas. Y así paso el tiempo y había mucha mas confianza. Incluso llegue a insinuarme y en una ocasión llegue a sentarme en sus piernas y llegue a sentir su rica pinga, ya había mucha tensión entre los dos. Tenía muchas fantasías con el y me masturbaba mucho viendo sus fotos, pero no me atrevía a dar el siguiente paso. El caso es que la empresa en la que trabajabamos lo destacó a Lima por temas de capacitación y yo me quedé un poco triste y caliente también. Pero tuve tanta buena suerte que a mi me enviarían a Lima también a capacitarme en unos temas de los que me haría cargo, no se si fue el destino, pero para mi todo fue un sueño hecho realidad.
Como no conocía a mucha gente en Lima, lo primero que hice fue buscar a Miguel y pedirle recomendaciones para hospedarme, para que me recomiende lugares para comer y todo eso, fue muy amable conmigo y me trató muy bien, me gustaba como juntaba el buen trabajo con las cosas pícaras. La capacitación fue muy cansada, y casi siempre llegaba muerta a mi hospedaje y no tenía tiempo para ver a Miguel. Cuando llegó el viernes fue cuando se dió todo. Pensé que todo sería igual la misma rutina, pero no. Miguel me escribió para salir en la noche, me dijo para ir un rato a cenar y luego a divertirnos un rato a la discoteca. Estaba ansiosa todo el día, pensando en que pasaría al final, no dejaba de pensar en algo muy romantico, o estar muy ilusionada, pero me llevaría otra sorpresa. Me arreglé lo mejor que pude incluso me puse una ropa interior muy sexy fantaseando en todo momento, no dejaba de mojarme. Llegando la tarde, fuimos a cenar, me llevó a un lugar muy bonito en Barranco y como siempre con sus ocurrencias pícaras me hacía reir y sonrojar. Terminamos y me dijo para ir a una discoteca, y yo mas que dispuesta dije que sí. Llegamos y el ambiente era muy estremecedor, había mucha música fuerte, muchas chicas sexys y chicos muy guapos, yo me sentía un poco intimidada. Me invitó unos tragos y comenzamos a bailar. Al principio todo tranquilo, pero poco a poco el ambiente se calento y comenzamos a hablar mas cerca, a pegarnos mas e incluso llegó a rozarme las nalgas. El alcohol hizo efecto y comencé a perder la verguenza y cada vez nos pegamos mas y mas, hasta que en uno de esos arrimones el se atrevió a besarme la oreja. Para los que me conocen, saben que las orejas son mis puntos débiles. yo no pude mas con la sensación y me colgue de su cuello para darle un tremendo beso a lo que el respondió salvajemente metiendome la lengua y poco a poco bajando sus manos hasta mis nalgas. Yo hasta ese entonces estaba super exitada, mojada y ademas con el alcohol encima y lo único que atine a hacer es darme la vuelta y darle mis nalgas mientras comenzaba a tocarle su miembro por encima del pantalon. Lo sentí durísimo y eso me exito un montón. Luego la música acabo y fuimos a sentarnos a descanzar un tiempo. Yo no podía con mi calentura por lo que apenas el se sentó, yo me senté sobre el para seguir sintiendo su miembro, mientras agarraba su mano para que tocara mi conchita por encima del pantalon. No quería que la exitación se terminara por lo que me desabroche el pantalon y le pedí que me metiera el dedo. El no perdió la oportunidad y en menos de cinco segundos ya tenía uno de sus dedos dentro de mi conchita mientras me decía cerquita al oido que lo tenía muy cerradito y me decía que me iba a partir en dos con su pinga. Eso me exito mas por lo que le arranque otro beso muy intenso, que hasta casi me hace llegar. De ahi nos calmamos un rato, el se acerco a mi oido y me dijo "quieres que te haga mi hembra", nunca voy a olvidar esas palabras, que me llegaron al fondo y lograron que me moje aún mas. Yo le respondí "quiero que me hagas todo lo que tu quieras" y acto seguido nos paramos me tomó de la mano y salimos volando rumbo a su hotel. En el taxi no paramos de besarnos ni manosearnos hasta que llegamos y nos fuimos casi corriendo a su cuarto. Apenas llegamos nos comenzamos a besar y a manosear intensamente, yo no paraba de sobar su pinga sobre el pantalon y el no paraba de masajear mis nalgas y pasarme mano. Como siempre me gusta hacer con mis amantes, me di la vuelta y comencé a sobar mis nalgas contra su pinga y le decia que me diga cosas sucias, estaba fuera de mi, solo quería ser sometida. Despues de un rato de tanto manoseo me decidí y me arrodille, hasta tener mi cara a la altura de cintura, le baje el cierre, le hice a un lado el interior y por fin pude ver con lo que tanto había fantaseado. Una pinga gruesa y larga que apenas salió me dio un golpecito en la cara. No sera la mas grande que haya visto en todo mi historial de aventuras, pero si que me dio una muy buena primera impresión. Sin dudarlo comencé a besar su miembro, a lamerle la punta a besar sus huevotes, si que los tenía grandes y estaban colgados en su miembro. Trate de meterme uno a la boca, luego volví a chuparle su miembro y casi me atragando al intentar comerlo todo, tal como veía en los videos porno que me gustaban. No se cuanto tiempo deguste su miembro, pero si que me parecieron horas y no quería dejar de chuparlo, de verdad estaba muy a falta de sexo. Luego de tanto manoseo dijo que era su turno, me ayudo a levantarme, creo que de tanto estar arrodillada no tenía fuerza en las piernas, me agarro de las nalgas me levanto y me tiró a la cama. Yo en completo extasis, abrí lo mas que pude mis piernas, aún con pantalon y le dije "hazme tu hembra". Me desabrochó el pantalon y lo quitó hasta la altura de las rodillas yo estaba como amarrada y comenzó no a besar mi conchita, sino a tocarme, y lo hacía tan bien que me mojaba mas y mas. En una de esas se dedico observar mi cosita y abrió los labios y me dijo de verdad estas cerradita pero hoy te voy a abrir. Me metió un dedo hasta el fondo, me causo un fuerte dolor, pero no quería que pare, así que le dije que siga. Me pregunto cuantos dedos podía aguantar y le dije, todos los que tu quieras, soy tuya. Y sin piedad me metio dos hasta tres dedos, de verdad me sentía totalmente abierta , violada y maltratada, pero me encantaba. Pero eso no es lo peor que me pasaría esa noche. Acto seguido ya con un poco menos de calor, pero aún besandonos y tocándonos, nos desnudamos completamente, la ropa practicamente volo por los aires, me gustaba como mientras nos desnudabamos me toque, me bese, me manosee y me diga cosas sucias. Nos terminamos echando en la cama, era delicioso tenerlo cerca yo con las piernas abiertas y el a punto de hacerme su hembra. Mientras nos besábamos el intentaba encajar su pinga en mi conchita, pero creo que de verdad yo estaba muy cerrada, por que de verdad no entraba, y como dije no es que el lo tuviera grande, solo que de verdad yo estaba muy estrecha. Asi estuvimos mucho rato con ese juego, hasta que el alcohol comenzó a bajar y el deseo también. Despues de un rato dejamos de intentarlo y decidimos descanzar. Me acurruque en sus brazos y dormimos. No se cuanto tiempo pasó, pero me desperte con una calor única, mi cuerpo ardía y mi conchita también. Comencé a moverme, a tocarle y pronto despertó y comenzó con el manoseó también, nos besamos apasionadamente y de nuevo le abri las piernas. Y esta vez supongo que por el calor, o no se por que su pinga entro hasta el fondo de un solo golpe, hasta llegue a sentir su huevos junto a mi conchita, obvio yo sentía que me había roto algo, sentía como si me hubiera rasgado incluso senti que estaba rota y que estaba botando sangre, pero no , solo eran mis fluidos y los de el, mezclados. En ese momento solo atine a gemir como en los videos que veia, a decirle que no lo saque y que me de duro, ya no se lo que decia. Solo seguía moviendose mas y mas, hasta que comenzó el mete y saca y me hizo ver estrellas, me sentía como un trapo sin reacción y solo pedía mas y mas y el me daba durísimo, no se cuanto rato estuve en trance, pero de un momento a otro comence a temblar y todo mi cuerpo sentía como electricidad y ya no pude mas y tuve un orgasmo intenso, incluso creo que me orine un poco, por que no aguante. Pero el no paraba y seguia y seguia dandome con todo, yo solo sentía esas cosquillas extrañas y quería que se salga de mi, pero no me hacía caso, hasta que me prendí otra vez y esta vez mas cuerda le comence a decir cosas sucias, que solia escuchar o leer, como dame mas duro, hasme tu hembra, mas rapido papi, cachame, dame tu pinga, dame tu leche, preñame y cosas así. El caso es que en el calor del momento el solto todo su liquido dentro de mi y eso me hizo llegar otra vez. Fue tan fuerte esa llegada que sentí que se me salían las entrañas. Le enrosque las piernas en la cintura y le dije preñame, obvio que era solo el calor, pero eso lo hacía mas emocionante. Al final, ya poco a poco su pinga se puso flacida, pero no perdía su tamaño, aun me sentía llena con su carne dentro de mi, nos separamos y comenzó a salir algo de mi, sentí como si fuera mi regla, pero no era todo el semen que me había dejado y me sorprendio mucho al sentir eso. Despues de eso me nos acurrucamos, nos besamos y nos quedamos dormidos.
Creo que el relato se hizo muy largo, pero ya en otra ocasión contaré que hicimos al dia siguiente y los siguientes días, como la primera vez que se corrio en mi cara (solo dias despues, hasta ese nivel llegaba mi calentura) o como practicamente me violo por atras estando borrachos. Hasta una nueva oportunidad.