No sé cómo pero se me han venido buenos recuerdos a la mente. Bueno, esto de caminar es bueno, definitivamente, lo malo es el acoso. En México y las salas de masajes de San Francisco las masajistas tienen autorizado desplazarse por todo el recinto excepto las cámaras, duchas y pozas (piscina, jacuzzi). Pero tienen prohibiciones, una de ellas es iniciar la conversación con el usuario y discutir con el mismo. La otra es interrumpir el paso o colocarse en un lugar de alto tránsito en la sala. Otra es desnudarse o ponerse en poses provocativas.
Eso genera a su vez nuevas cosas, como tener al frente una kine que no te dice nada pero solapadamente se alza la falda o se baja el brasiere. O tener kines que te hacen señas y por allí alguien cae y les dice algo (la del cigarro es clásica). Etc. Etc. Las latinas hacen lo que sea por llamar la atención, las europeas son más frías pero con cucharitas las sacas y las asiáticas son más bien distantes menos con su propia etnia.
Pero si, toda la vida una europea blancona cuerpona rubia y ojos coloridos siempre tiene más jale entre los latinos. No importa que sea virola, cochina o pestilente. Siempre jala más. Lo que nunca he visto en saunas es una africana o una nativa, tampoco brasileñas, sería interesante.
Saludos,
Bakunin