La columna de Bayly en Peru21 día 09 de Agosto de 2010,una cachetada a la pobreza
Por favor lean-sobre todo los que apoyan su candidatura-las frivolidades que escribe.Habla de sus "amores";la madre de SUS hijas(el síndrome Tula?),su "amante" peruana y su amante(este si sin comillas) argentino.Pero sobre todo habla de su más grande amor...el dinero...cuanto tiene,cuanto recibe,cuanto paga,cuanto no heredó de su tio,cuanto recibió de su madre por no heredar de su tio,cuanto va a dejar en herencia...mejor lean:
Menos que cero
Autor: Jaime Bayly
Pago mensual a mi adorable amante Lucía para que se dedique a escribir lo que le dé la gana cuando le dé la gana: cuatro mil soles, es lo justo.
Alquiler de su departamento en San Isidro: mil dólares mensuales.
Cuota de mantenimiento mensual de su departamento: trescientos setenta soles, acaba de subir.
Cuentas de luz, gas, cable e impuestos prediales de su departamento: quinientos soles al mes.
Bono o premio a Lucía por terminar su novela lésbica “Hay una chica en mi sopa”: mil soles, estupenda novela, felicitaciones, espero que salga pronto.
Pago mensual a Sofía, la madre de mis hijas, para que se dedique a cuidar a mis hijas y a cuidar de sí misma: doce mil dólares, merece el doble, es el gran amor de mi vida, cuando quiera le daré un hijo más.
Dinero extra para que siga decorando la casa nueva: incalculable, con tendencia al alza, pero es que Sofía decora precioso.
Servicios de peluquería a mi hija porque tiene una fiesta a la noche: trescientos soles.
Servicios de peluquería a mi otra hija porque tiene que hacerse la cera, la manicure y la pedicure: quinientos soles, por si después va al cine.
Drogas legales que compro en la farmacia para sentirme bien: doscientos dólares.
Servicio mecánico de una de las camionetas que usa la madre de mis hijas: doscientos dólares.
Reparación de la otra camioneta: doscientos dólares más.
Transferencia bancaria a mi adorable amante Martín para que me recuerde con cariño en Buenos Aires: cuatro mil dólares mensuales hasta diciembre.
Colchón marca “Paraíso” para el cuarto de huéspedes en caso de que con suerte me visite Martín antes de diciembre: dos mil dólares, calidad “Royal Dynasty”, es lo que él merece porque mide casi dos metros.
Pagos a los colaboradores periodísticos de un talento inestimable que integran mi equipo del programa de televisión: cincuenta mil dólares mensuales.
Cena con Lucía en un café de San Isidro: doscientos soles, por suerte la chica come poco.
Costo de un gel francés para que aumente mis testosteronas y me garantice una erección digna de ser llamada tal cosa: cincuenta dólares la caja, dos cajas.
Costo del Cialis para que me asegure una prolongada erección: treinta soles por pastilla.
Pago suplementario a la adorable empleada Aydeé que plancha mi camisa y mi corbata: veinte dólares por semana, ya toca aumentarle.
Llenar los tanques de gasolina de las tres camionetas: trescientos dólares.
Perfume para la madre de mis hijas y otro para la adorable Ximena, mi mejor amiga, que también es madre (de dos niños preciosos), como regalos por el día de la madre: doscientos dólares.
Regalos para una amiga que acaba de casarse: tres mil quinientos dólares.
Donación a una causa benéfica que patrocina la madre de mis hijas: trescientos dólares.
Taxi al canal: veinte dólares.
Propina a la maquilladora: cien dólares, ella me anima como nadie a ser candidato.
Herencia que no me dejó mi tío y sí les dejó a mis nueve hermanos: medio millón de dólares a cada uno, provecho muchachos.
Regalo de mi madre para mitigar mi tristeza por el dinero que no me dejó mi tío: trescientos mil dólares, gracias mamá, eres una santa, que Dios te lo pague.
Precio de una noche en el hotel Berkeley de Londres en el que se aloja mi madre: mil libras esterlinas.
Patrimonio aproximado de mi madre: trescientos millones de dólares.
Herencia que me correspondería en caso de fallecimiento de mi madre que Dios no lo quiera y la tenga en conserva: treinta millones de dólares.
Años que calculo que vivirá mi madre: veinte más, quizá treinta.
Años que calculo que me quedan por vivir: cinco, con suerte seis.
Herencia que recibiré de mi madre: cero coma cero.
Costo de mi cremación que pagará mi madre rezando por la salvación de mi alma que tal vez no existe: diez mil dólares.
Regalías que mis libros dejarán a mis hijas: minucias.
Patrimonio aproximado que heredarán mis hijas: cinco millones de dólares.
Dinero en efectivo que heredarán mis amantes: cero.
Número de hijas: dos.
Número de amantes: dos.
Monto que cobrará la madre de mis hijas por mi seguro de vida: un millón de dólares, es lo menos que puedo dejarle, merece que le deje todo lo que tengo.
Monto que me pagaron por mi última novela: cien mil euros.
Monto que me pagaron por mi penúltima novela: cien mil euros.
Monto que estimo me pagarán por mi nueva novela: cien mil euros.
Fajo de billetes que llevo siempre en un bolsillo de la chaqueta: cinco mil soles.
Ahorros bancarios en distintas monedas: tres millones de dólares.
Patrimonio inmobiliario: dos millones de dólares.
Lo que valgo si muero, incluyendo el seguro de vida: seis millones de dólares.
Lo que heredarán mis hijas: cinco millones.
Lo que heredará su madre: un millón y un apartamento, es poco para lo mucho que la quiero.
Lo que heredarán mis amantes: un departamento cada uno, es lo justo y decoroso, considérese en el rubro “pensión de viuda”.
Costo de mi campaña presidencial austera: un millón de dólares.
Costo de mi campaña presidencial como uno se merece, alquilando avión privado: dos millones de dólares.
Donación de mi madre al arzobispado de Lima: misterio insondable, asunto pendiente de investigación.
Donación de mi madre a su hermano idealista desheredado: un millón de dólares.
Donación de mi madre a mi campaña presidencial: cero coma cero, seguimos a la espera, la esperanza es lo último que se pierde (incluso si pierdo las elecciones), un beso y un abrazo para mi madre que está viajando por sus minas en Huánuco.
Porcentaje de intención de voto nacional que asignan las encuestas a mi candidatura presidencial: cuatro por ciento.
Porcentaje de intención que tengo de ser candidato: cien por ciento.
Porcentaje de posibilidades de ganar si soy candidato: cincuenta por ciento, ríanse, ya nos vemos en abril.
Sueldo del presidente del Perú: tres mil quinientos dólares mensuales después de impuestos.
Presupuesto de mi familia: treinta mil dólares mensuales como mínimo.
Presupuesto de mi familia cuando mis hijas se vayan a estudiar en universidades de los Estados Unidos en dos años: cuarenta mil dólares mensuales como mínimo.
Dinero de mis ahorros que gastaría en mi presupuesto familiar los cinco años como presidente del Perú: dos millones y medio de dólares.
Dinero que me quedaría de mis ahorros de toda la vida (veintisiete años haciendo televisión en el Perú y el extranjero, veinte años ya como escritor, trece novelas publicadas y traducidas a dieciocho lenguas) cuando termine mi gestión como presidente: menos que cero.
P.D. Sr.Bayly no queremos que se quede sin dinero(ni sus dependientes) así que por favor no postule,siga con su vida y sea feliz ó infeliz,lo que más dividendos le de... pero no postule por favor.