El miércoles luego de atenderme por el hospital de la UNSA (ya local conocido)6:00 pm, bajaba por la avenida Marañón y a una cuadra de la aviación entre la multitud de la gente (por qué esa cuadra estaba que reventaba) mire a tres extranjeras, una de ellas que tenía una cinta en el pelo como moño se regalo estaba bien rica, y caminaban apuradas medio achoradas y a pesar de que intente seguirlas se me perdieron entre el paradero de las combis amarillas y la cantidad de gente. Ahora entiendo que hacían allí.